Dropkick Murphys: Turn Up That Dial
Han tenido que pasar cinco años para que Dropkick Murphys lanzaran su esperado décimo disco, espera que además se ha solapado con una pandemia mundial que ha truncado la gira de presentación de este trabajo, que debía ser paseado nada más y nada menos que por los principales festivales extremos de Europa.
Dropkick Murphys son una banda bastante difícil de calificar. Son los irlandeses que no son de Irlanda, los punkis que han arrasado el mainstream, los que con tres acordes te seducen al metalero más elitista. Si a su fórmula le añades unos directos enérgicos y una ejecución sin complejos ni contemplaciones, uno comienza a entender la expectación que ha rodeado al lanzamiento de ‘Turn Up That Dial’, que desde el primer momento estaba destinado a no dejar a nadie indiferente.
Los Dropkick más optimistas
Basta con prestarle atención a los primeros acordes de “Turn Up That Dial” para darte cuenta de que algo ha cambiado. Dropkick Murphys no son Slayer, no van cabreados por la vida, pero jamás se han librado de esa ira de “working class warrior” que empuja a las bandas de punk que conforman sus influencias. Y aun así, la canción homónima de este trabajo comienza con un tono alegre y desenfadado, más si lo comparamos con la crudeza de ’11 Short Stories of Pain & Glory’.
La fiesta continúa con “L-EE-B-O-Y” que tiene a las gaitas como principales protagonistas, mientras que “Middle Finger” recupera la ejecución más punki y cruda de sus primeros años, dejando de lado los arreglos y melodías más folks con los que a la banda les gusta jugar, pese a que sigue teniendo el regusto tan marca de la casa de que podría sonar perfectamente en cualquier pub de la isla esmeralda.
Esta dinámica es una constante a lo largo de ‘Turn up That Dial’, pues una vez más la relajada atmósfera folky de “Queen of Suffolk Country”, con una estructura más facilona y radiofónica, choca con el punk sin complejos de “Mick Jones Nicked My Pudding”, cuyo aire divertido a la vez que directo la convierte en un seguro para los intensos directos de la banda.
“H.B.D.M.F.” nos devuelve a la tranquilidad folk irlandesa con un tempo tranquilo y suave que sin embargo oculta una curiosa pulla hacia aquellos que celebran demasiado sus compañeros. No es nada nuevo para la banda ocultar críticas sociales o simplemente a alguien que se les haya cruzado en una canción a priori inofensiva, pero es bueno ver que la banda no ha perdido su sarcasmo ni su ácida ironía diez discos más tarde.
El sonido de un vinilo disfuncional que precede a “Good as Gold” sirve como la introducción perfecta para la que sería el ejemplo perfecto de una canción que sigue el arquetipo de himno de Dropkick Murphys, funcionando como la canción más rápida de este nuevo trabajo. La intro con acordeón de “Smash Shit Up” sirve para engañar al oyente que cree que escuchará otra pieza más comedida, solo para que una batería atronadora y un riff asesino le den una vuelta que desemboca en un estribillo que pide a gritos ser cantado por miles de personas.
Y de la divertida excentricidad de los temas anteriores pasamos a la oscura seriedad de “Chosen Few”, con la que el grupo critica los cuatro años de Donald Trump al frente del gobierno estadounidense, en el que es el puto más oscuro en un disco que por lo general destaca por su optimismo. “City by the Sea” suena como una nostálgica oda a su hogar, y es que habla nada más y nada menos que de Boston, una ciudad muy especial para el conjunto, y que en muchos sentidos posee esa cálida sensación de regresar al hogar.
Finalmente, el disco concluye con “I Wish You Were Here”, una hermosa y oscura balada en el banjo y la armónica adoptan un papel protagónico para homenajear al fallecido padre de Al Barr, sirviendo también para bajar las revoluciones tras la montaña rusa estilística que ha supuesto el álbum como un todo.
‘Turn Up Your Dial’ se siente como un álbum diferente, pero no menos malo. Salvo por un par de excepciones, la banda ha abandonado la protesta social y la furia que motivara a muchas de sus canciones en pos de un espíritu más brillante, aunque no por ello menos sosegado. Pese a sus diferencias con sus trabajos anteriores, el estilo y el espíritu siguen siendo los mismos, solo que poseen un halo de sorpresa que hacen de este nuevo trabajo una agradable sorpresa.
Ignoro si detrás de la composición de ‘Turn Up Your Dial’ ha habido un esfuerzo deliberado para animar al personal después de una pandemia larga y cruel, pero independientemente de que haya sido a propósito o no, lo cierto es que ‘Turn Up Your Dial’ es de esos álbumes que te mejoran al día, que en una era en la que debemos mirar la hora constantemente para llegar a casa antes del toque de queda y en la que hemos tenido que renunciar a tantas cosas que nos gustan, suenan como una sala de conciertos llena de gente sudorosa, que apesta a alcohol y te dan codazos, hasta como un bar un viernes por la noche, cuándo podías ahogar la oscuridad de la semana bajo unas risas y un mar de cerveza.
Sea como fuere, tengo muchas ganas de ver como Dropkick Murphys defienden una apuesta tan atrevida como esta en directo, logrando arrastrar así a todos sus antiguos fans hacia esta nueva faceta más brillante y optimista.
Marc Fernández
Grupo:Dropkick Murphys
Discográfica:Dropkick Murphys
Puntuación:7
Canciones:
- Turn Up That Dial
- L-EE-B-O-Y
- Middle Finger
- Queen of Suffolk County
- Mick Jones Nicked My Pudding
- H.B.D.M.F.
- Good as Gold
- Smash Shit Up
- Chosen Few
- City by the Sea
- I Wish You Were Here
Año:2021-04-30
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