Los dos luchadores de wrestling Sting y Darby Allin salieron al Wembley Stadium al son de Metallica, lo que debió costar un pico probablemente.

El famoso Wembley Stadium en la capital británica se transformó el pasado sábado 26 de agosto en el recinto de «All In», la velada de lucha libre a cargo de All Elite Wrestling (AEW) más grande jamás celebrada. Como es costumbre en este tipo de espectáculos, algunas estrellas de la lucha libre hacen su entrada al ring con canciones que encajan con su personalidad o añaden un toque espectacular a sus personajes.

Mientras que Swerve Strickland eligió una entrada acompañada por un rapero y Chris Jericho invitó a sus compañeros de la banda Fozzy para tocar su tema «Judas», la atención se centró en el icónico luchador Sting y su joven aprendiz Darby Allin. Ambos hicieron su aparición con la canción «Seek & Destroy» de Metallica, una elección que seguramente no fue barata para Tony Khan, el dueño de AEW. Esta elección no fue aleatoria pues sirvió como un homenaje al pasado de Sting en la WCW, donde usó esta canción entre los años 1999 y 2001.

No es la primera vez que el universo de la lucha libre se cruza con la música de Metallica. Recordemos que The Sandman, el luchador extremo de ECW, usó «Enter Sandman» durante la mayor parte de su carrera. Además, “Now That We’re Dead” fue el tema que The Undertaker utilizó en su enfrentamiento contra AJ Styles en Wrestlemania 36.

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Más gente que Metallica

Curiosamente, esa misma noche Metallica ofrecía un concierto en el SoFi Stadium de Los Ángeles, un recinto con capacidad para 70,240 personas. El mismo día que el evento ‘All In’ reunió a más de 81.000 aficionados en Wembley. Esto implica que el clásico “Seek & Destroy” fue escuchado por más personas en el marco de un evento de lucha libre que en el propio concierto de la banda en Los Ángeles.

Este evento demuestra la sinergia increíble que puede existir entre el deporte y la música, y cómo ambos pueden unirse para crear momentos verdaderamente históricos.