El guitarrista de Metallica sorprende a sus seguidores con la elección de los solos que más les gusta tocar.

Han sido muchos los solos que Kirk Hammett, guitarrista de Metallica, ha interpretado a lo largo de su carrera. Aunque todos forman parte de la historia de su banda, el propio Hammett ha elegido los tres que más le gustan por diferentes motivos. Que coincida o no con los favoritos de sus seguidores, es otro tema.

Kirk Hammett elige sus tres solos favoritos

El guitarrista Kirk Hammett tiene su propia lista de los tres solos favoritos que ha tocado Metallica desde que se uniera a la formación en 1983. Es posible que no sea una elección que coincide con los seguidores de la banda de San Francisco, pero en declaraciones a Metal Hammer confesó que «Hero Of The Day», «Fade To Black» y «One» son las canciones que poseen sus solos de guitarra predilectos.

Sobre el de «Hero Of The Day», la balada de su controvertido ‘Load’, el músico estadounidense afirmaba que es su favorita porque «va de menor a mayor, comienza con algo rítmico y luego llega una parte que pasa al siguiente nivel». «Mucha gente no estaría de acuerdo», reconocía Hammett, «y no sé por qué, pero para mí es uno de mis solos favoritos».

La segunda elección del guitarrista es su solo en ‘Fade To Black’, de su clásico ‘Ride The Lightning’ de 1984, ya que es «uno de los muchos solos que me encanta tocar en vivo porque puedo improvisar, cambiarlo todo, nunca toco el mismo solo dos veces. […] Eso me encanta, me encanta saber que estoy bailando en el filo de la navaja, esa es la emoción por la que vivo».

Para su tercera elección vuelve al material clásico de la banda: «One». Ese de uno de los temas más potentes del cuarto disco ‘… And Justice For All’, tiene una anécdota inolvidable para el guitarrista. Hammett recordó una llamada telefónica urgente del batería de Metallica, Lars Ulrich.

«Lars me llamó y me dijo: ¿Puedes venir? Necesitamos un solo en la nueva demo de la canción’. «Recuerdo que aparecí con mi guitarra, Lars tocó la pista un par de veces y yo jugueteé con ella, descubrí a dónde iba James Hetfield», contaba. «Dije, ‘OK, presiona para grabar’. Lo siguiente que sé es que mi mano estaba tocando, siguiendo la progresión de acordes, ¡simplemente salió del aire! Después pensé, ‘¡Bueno, eso fue una especie de viaje!’ «