Invaders: Hay rivalidades que a veces complican las cosas

El ascenso de la NWOTHM se está evidenciando gracias a grupos como Invaders, que gracias a un trabajo constante de tocar y tocar para mostrar su valía, están consiguiendo crecer y que la escena en nuestro país se vaya fortaleciendo. Adrián García nos cuenta cómo lo viven desde Invaders gracias, en parte, a su último álbum de estudio 'Beware Of The Night’.

¿De dónde surge Invaders y cual es la trayectoria del grupo hasta la fecha en breve?

Invaders surge a finales de 2016 entre tres compañeros de instituto en la ciudad de Alcorcón (Madrid) para hacer realidad nuestros sueños. Desde entonces, conseguimos estabilizar la formación con 5 miembros y grabamos nuestro EP ‘Metal Madness’ en 2018, lo cual nos impulsó a continuar y a aumentar nuestra cantidad de conciertos.

En 2021 lanzamos un single llamado “Endless Wait” y en 2022 nuestro primer LP ‘Beware Of The Night’ a través de Fighter Records. Durante estos años nuestro crecimiento ha sido notable en todas las facetas y ha sido un verdadero placer para nosotros poder haber compartido escenario con grandes bandas como H.E.A.T, Panzer, Obús, Jorge Salán, Danny Vaughn de Tyketto, etc.

Vuestro disco ‘Beware Of The Night’ es relativamente reciente, ¿cómo ha sido el recibimiento hasta ahora?

‘Beware Of The Night’ fue lanzado el pasado 8 de septiembre de 2022 y la verdad que, ahora, a mediados de 2023, podemos hacer una valoración positiva general. El álbum ha supuesto un salto cualitativo respecto a nuestros anteriores trabajos y quedamos muy contentos con la producción. Su recibimiento ha sido bueno tanto para medios como para el público, lo cual es gratificante, y su lanzamiento a través de Fighter Records nos ha permitido acceder al mercado internacional. En resumen, podemos afirmar que ‘Beware Of The Night’ ha sido un paso hacia adelante.

Habéis apostado por reflejar fielmente el hard/heavy ochentero, pero es una época que vosotros -por edad- no vivisteis. ¿Cuáles han sido los referentes que habéis usado para construir ese sonido e identidad estética?

Desde el principio tuvimos claro que queríamos que nuestro estilo reflejase en cierta parte los años ’80. Nuestros grandes referentes en nuestro sonido son bandas como Ratt y Dokken, aunque también bebemos de otros como Gary Moore, Iron Maiden o Def Leppard.

¿Cómo grabasteis y qué técnicas empleasteis para conseguir ese sonido ochentero que habéis logrado?

El LP fue grabado y masterizado en 16Studio y fue primordial en el sonido añadir algo de chorus a las distorsiones de las guitarras y un buen reverb en la batería y voces. No obstante, la verdadera raíz del sonido está en el propio proceso de composición, es ahí donde le damos sentido a lo que queremos hacer y no vamos al estudio hasta que no estamos al 100% cómodos con nuestras obras.

No tocáis un género que esté en boga ni sea popular en este momento. Desde vuestros entornos más cercanos, ¿qué reacción habéis tenido?

Sin duda con ‘Beware Of The Night’ hemos experimentado un crecimiento y hemos podido llegar a más gente, además de tener una buena aceptación general como he mencionado. Hemos visto cómo nuestras ventas y números de reproducción es stream han aumentado y como la calidad de los conciertos también compartiendo escenario con grandes bandas, llevando nuestra música por todo el país y recibiendo más llamadas de promotores. Hay mucho por mejorar y por crecer y en ello estamos, trabajando ya en nuestro próximo álbum y en estrategias que nos lleven poco a poco a grandes escenarios.

Temas como “Livin’ In the End” tienen la urgencia y potencia de bandas de la NWOBHM de 1980-1983. ¿Buscabais reflejar esa época en concreto del Hard-heavy ochentero?

Bueno, en ‘Beware Of The Night’ se puede apreciar una gran variedad de sonoridades, desde temas más heavies como “Livin’ In The End” o “Visions” a temas más hardrockeros como “Redhead Lady” o épicos como “Ghost Religion”. Aunque todos siguen una línea un tanto ochentera, la diversidad de ideas y la inspiración en cada momento durante la etapa de composición han dado lugar a un álbum versátil pero con una coherencia que se mantiene fiel a nuestro objetivo respecto a lo musical.

Está habiendo un resurgimiento del movimiento más clásico con muchos grupos de speed o reminiscentes de la NWOTHM. ¿Os sentís parte de un movimiento?

En cierta parte sí, pensamos que estamos dentro de este movimiento conocido como NWOTHM por nuestras raíces clásicas y las bandas con las que se nos relaciona. Aun así, creemos que tenemos un toque algo distinto y no tan clásico como muchas de las bandas de este movimiento como por ejemplo en el aspecto vocal o melódico. Esa mezcla de ambos puntos de vista es nuestra seña de identidad, y de cara al futuro nos gustaría desarrollar más este aspecto particular o innovador de nuestras composiciones para poder tener una identidad verdaderamente propia y reconocible, aunque siempre estaremos ligados a este género musical.

“Visions” tiene un deje a “L.O.V.E. Machine” o “Wild Child” de W.A.S.P. en el riff e incluso en algunos aspectos estructurales. ¿Es complicado no repetir nada o no “sonar a” cuando uno homenajea una época concreta del heavy metal?

Al final canciones de un mismo género musical pueden recordar a otras y las influencias siempre tienen un importante peso a la hora de componer. El punto de vista de cada uno también influye, a mí por ejemplo no se me había ocurrido una relación de “Visions” con W.A.S.P. (risas); pero ahora que lo dices es cierto, y por supuesto W.A.S.P. es una de nuestras influencias. Como he mencionado, nos gustaría desarrollar más nuestra faceta particular y ser reconocidos por lo nuestro, aunque un estilo musical concreto siempre sigue ciertos patrones que hacen que sea un estilo musical en sí mismo.

Abrís los conciertos de Riot V como hacen otros compañeros como Redshark. ¿Qué significa el telonear a un grupo internacional para un grupo como Invaders?

Para nosotros abrir para grupos con reconocimiento internacional como Riot V o H.E.A.T el pasado mes de julio es un sueño. Resulta gratificante poder vivir estas noches después de tantas horas de trabajo y de local. Además, lo consideramos una gran oportunidad para seguir creciendo como banda, para promocionar nuestro álbum y para poder estar a la altura de una banda como Riot V y lo que su público exige.

¿Qué diferencias hay cuando gestionáis vuestros propios conciertos respecto uno como este? (cachés, conversaciones con promotores…)

La principal diferencia es el papel que jugamos en la propia producción de un concierto. Cuando organizamos un bolo por nuestra cuenta cargamos con toda la gestión y todo lo que esto implica -y además nos jugamos la pasta-. Cuando trabajamos con promotores nuestro papel se limita a ser una banda contratada, a dar lo mejor de nosotros y facilitar a la producción en la medida de lo posible. En general, trabajar con productores suele ser preferible por las facilidades, garantías y las oportunidades que se presentan de tocar con bandas reconocidas. No obstante, a veces toca buscarse la vida para que la actividad del grupo no decaiga.

¿Pensáis que en España se apoya lo suficiente a las bandas nacionales como vosotros?

A nivel underground sí. Hay una gran cantidad de medios, clubes, salas y demás que apoyan el movimiento y el público es muy comprometido. Pero a nivel mainstream la cosa está complicada. Los medios suelen dar la espalda y se ven grandes masas de gente en los grandes festivales, lo cual luego no se refleja a la hora de dar oportunidades o asistir a conciertos de bandas nacionales que estamos en ligas inferiores. Es un tema complejo, la propia cantidad de bandas que hay y las rivalidades/envidias también lo complican todo.

¿Cuál es vuestro grupo nacional favorito?

Históricamente, Barón Rojo. Sin duda es y ha sido nuestra mayor referencia nacional. Y de grupos actuales pues nuestros amigos Redshark (con los que compartiremos escenario en septiembre en Bizkaia), Rave In Fire, Witchtower, Hitten… Hay mucho talento.

¿En qué festival o ciudad os gustaría poder llegar a tocar o en cuáles estáis poniendo más énfasis para poder hacerlo?

Nuestro mayor sueño sería poder tocar algún día en un Hellfest o en un Wacken. A corto/medio plazo nos encantaría tener la oportunidad de poder tocar en el Leyendas del Rock y en el Rock Imperium. Estamos trabajando en ello y a ver si con un poco de suerte se hace realidad en 2024 o 2025.