Continuamos el repaso con el cabeza de cartel del viernes

  

 

El día de año nuevo de 2010, con la entrada de una nueva década, se daba la esperada noticia de la vuelta de SOUNDGARDEN doce años después de su separación. No hubo mucha más información además del mensaje vía Twitter de Chris Cornell hasta dos meses después, donde los rumores que los ponían como cabezas de cartel del próximo Lollapalooza se hacían realidad. Volvía una de las mejores formaciones del sonido Seattle y uno de los grupos claves en la década de los 90… si bien su historia se remontaba a mediados de los 80. Ya dimos cuenta de ella en el reportaje de Veinte años de la explosión del grunge, pero repasémosla un poco junto a hechos más actuales.

 

La banda nace en 1984 con la unión de Cornell a la batería y voz, Hiro Yamamoto al bajo y Kim Thayil como guitarrista. Un año después, Scott Sundquist ocuparía el puesto tras la batería dejando a Chris centrarse en la tarea vocal. Con esa formación realizan su primera grabación para el recopilatorio ‘Deep Six’, compartiendo espacio con bandas emergentes de la escena como THE MELVINS, MALFUNKSHUN o SKIN YARD. Precisamente el batería de estos últimos, Matt Cameron, pasaría a formar parte del grupo en sustitución de Sundquist, grabando con él su primer EP, ‘Screaming Life’. Este y ‘Fopp’ fueron sus cartas de presentación antes de su debut ‘Ultramega OK’ en 1988. A pesar de que su éxito sería posterior, el reconocimiento empezó desde ese momento gracias a una inesperada nominación a los Grammy, galardón que conseguirían por partida doble más adelante.

Antes de eso ya había visto la luz su segundo álbum, ‘Louder Than Love’, en Septiembre de 1989. Durante su gira de presentación Yamamoto dejó el grupo, ocupando su puesto Jason Everman, que venía de NIRVANA; no duraría mucho como bajista, ya que Ben Sheperd entraría poco antes de la grabación de su tercera obra. Para aquel entonces, a mediados de 1991, el panorama de Seattle había cambiado. Grupos emergentes estaban a punto de dar el pelotazo absoluto para que el mundo entero girara sus cabezas hacia la ciudad de la lluvia, y los de Cornell eran uno de ellos. Su mezcla en sus primeros pasos de rock psicodélico con influencias de LED ZEPPELIN y BLACK SABBATH se confirmó en un soberbio ‘Badmotorfinger’, donde volvieron a contar con Terry Date como productor. En él seguían teniendo cabida algunas voces con agudos imposibles, pero mostraba un grupo ligeramente cambiado. Por encima de las demás, destacaban sus cuatro cortes iniciales, ‘Rusty Cage’, ‘Outshined’, ‘Slaves & Bulldozers’ y ‘Jesus Christ Pose’. Precisamente fue esta última el primer single del álbum, y la que se convirtió en himno y hit, gracias a su vídeo y a ese riff tan característico. El grunge se estaba apoderando de la escena musical, y si bien los auténticos bombazos fueron ‘Ten’ de PEARL JAM y ‘Nevermind’ de NIRVANA, SOUNDGARDEN representaba el grupo más asentado y maduro de los que asaltaban las listas de éxitos. Mientras los dos primeros eran los que atraían la atención de medios y público, estos y ALICE IN CHAINS se vieron con el paso del tiempo como bandas distintas y con un toque de distinción.

 

 

En apoyo del lanzamiento el grupo giraría teloneando a GUNS N’ ROSES en Estados Unidos y en Europa, presentando los de Axl y Slash su mastodóntico doble ‘Use Your Illution’, como cabezas de cartel junto a SKID ROW (y su impresionante ‘Slave to the Grind’, además de participar en Lollapalooza. Precisamente en este festival se produjo el momento mágico de llevar al directo algunos temas de TEMPLE OF THE DOG, el grupo-proyecto homenaje a Andy Wood, cantante de MOTHER LOVE BONE y amigo personal de Cornell con el que había compartido piso, que había muerto por una sobredosis de heroína. El éxito masivo les llegaría con ‘Superunknown’ en 1994, si bien su lanzamiento se vería ligado tristemente al suicido de Kurt Cobain tan solo un mes después de su salida. El mayor icono de la escena se había ido cuando el grunge parecía estar en su máximo apogeo, lo que conllevó distintas consecuencias. Se trataba de su disco más experimental (hasta ese momento), pero sobre todo más accesible, donde de nuevo se apoyaron totalmente en un buen puñado de singles que cosecharon gran éxito. ‘Spoonman’ fue el primero que supuso de gancho, mientras ‘Black Hole Sun’ fue el espaldarazo definitivo hacia el mainstream, con un vídeo para el recuerdo. A ellas dos (ambas consiguieron dar al grupo un Grammy en distintas categorías) se les añadieron ‘The Day I Tried to Live’, ‘My Wave’ y ‘Pretty Noose’. Quizá el álbum pecaba un poco de minutaje, pero ni eso se les podía echar en cara, más aún cuando el grupo parecía estar mejor que nunca… o eso parecía.

 

 

El primer problema vino con las cuerdas vocales de su cantante en plena gira de presentación, obligando a cancelar algunas fechas. Pero sólo fue el principio, ya que las batallas internas entre Cornell y Thayil supondrían el final de la banda poco después. Si ‘Superunknown’ era ya experimental en cierto modo’, con ‘Down on the Upside’ SOUNGARDEN se adentró por completo en esa vertiente, optando por el rumbo que dictaba su vocalista, y no por el que quería su guitarrista, más heavy y apoyado en los riffs de siempre. La melodía se apoderó de sus composiciones como demostraron ‘Pretty Noose’, ‘Blow Up the Outside World’, mostrando un lado que en algunos momentos poco tenía que ver al de años atrás. Y aunque tuvo cierto éxito, su acogida no fue la misma que sus obras anteriores; parte de culpa la tuvo el hecho al que hacía mención más arriba, y es que la muerte de Cobain fue una especie de tsunami que terminó arrastrando a muchos. El grunge estaba dejando de ser rentable, y ya se sabe cómo es este mundo, que cuando estás arriba todo es bonito y hay facilidades de todo tipo, pero cuando no estás de moda se olvidan de ti como si nada.

Una nueva presencia en Lollapalooza y su gira con METALLICA, que presentaban por aquel entonces su controvertido ‘Load’ fueron el siguiente paso del grupo; no darían muchos más. Muchos factores derivaron en un comunicado el 9 de Abril de 1997, dos meses después de su último concierto en Hawaii, donde informaron de su disolución. Su compañía aprovecharía el tirón en forma de recopilatorio que ponía el fin a trece años de carrera. ¿Fin? Eso parecía.

Desde entonces hubo dos miembros que no se prodigaron mucho en sus actividades. Shepherd colaboró con Mark Lanegan y en los ‘Dessert Sessions’, mientras que Thayil colaboró con Krist Novoselic en un grupo llamado THE NO WTO COMBO, además de SUNN O))) o participar en el proyecto de metal de Dave Grohl, PROBOT. Por su parte, Matt Cameron se uniría a PEARL JAM como baterista fijo, y Cornell iniciaría su carrera en solitario con un decente ‘Euphoria Morning’, que mostraba ese lado más calmado e íntimo del vocalista. Aún con todo, sus ventas no fueron excesivamente buenas. En vista de que el tirón no era el mismo que antes, decidió unir fuerzas con músicos de un grupo recientemente separado; Zach de la Rocha, vocalista de RAGE AGAINST THE MACHINE había anunciado con el comienzo del nuevo siglo que dejaba la banda, así que sus tres ex-compañeros encontraron en Cornell la pieza que les faltaba para ponerse de nuevo en marcha, bajo el nombre de ADIOSLAVE. El proyecto llamó la atención de primeras, pero la fuerza con la que empezaron se fue difuminando poco a poco, dejando un buen debut y un puñado de grandes canciones, pero no mucho más. En un principio ambas partes acordaron olvidarse de sus grupos originales de cara a la presentación en directo, si bien con su segundo disco recuperaron canciones de una y otra; lo que estaba claro es que ni Cornell estaba capacitado para los rapeos de RATM, ni tampoco para algunos de sus propios temas, pasando por momentos delicados con su voz. En 2007, poco después de la salida al mercado de su tercer álbum, abandonaría el grupo para centrarse en su carrera en solitario; poco después, Morello & Cia volvían a la carga con de la Rocha, lo que hizo disparar los rumores de una vuelta de Cornell con los suyos que no llegaba.

  

Con ‘Carry On’ el cantante se adentraba en terrenos blues, mostrando más un cantautor que el que fuera vocalista de una de las formaciones de rock más importantes de los 90. Y con ‘Scream’ parecía alejarse por completo de lo que había sido en el pasado, siendo producido por Timbaland. Por estos últimos pasos en su carrera fue por lo que más sorprendió el anuncio del primer párrafo. La vuelta de SOUNGARDEN se había esperado bastante tiempo, pero precisamente ocurrió en un momento que pilló por sorpresa, y sobre todo generó una duda clara: ¿cómo iba a estar la voz de Cornell? Los presagios no eran buenos teniendo en cuenta la orientación musical en solitario y los problemas evidentes que había tenido en ADIOSLAVE, pero como por arte de magia, parecían haberse esfumado después de sus primeros conciertos. No es aquel cantante prodigioso que ponía los pelos de punta con ‘Jesus Christ Pose’, pero defiende a las mil maravillas sus canciones, supliendo sus carencias con nuevas virtudes. En apoyo a su vuelta, un nuevo (doble) recopilatorio, ‘Telephastam’, con un tema inédito de las grabaciones de ‘Badmotorfinger’ llamado ‘Black Rain’; y su interpretación en directo no desmerece para nada a la original en estudio.

  

 

El siguiente paso fue un disco en directo que vio la luz hace un año, ‘Live on I-5’. Desconozco la razón, pero no podía haber sido una elección peor la gira de representación, ya que se trata de la última del grupo en los últimos meses de 1996, no precisamente en su mejor momento. Aún así, servía de puente hacia uno de los discos más esperados del momento, y por el que seguimos esperando. Pocos datos (además de las declaraciones con tópicos) se han dado de él, además de que ha sido producido por Adam Kasper, que tendrá entre doce y catorce temas y que en su mayor parte lo compondrá material totalmente nuevo. Cornell fue matando el gusanillo con una gira en solitario y acústica llamado Songbook, del que editó un disco del mismo nombre que es puro sentimiento; este verano la compaginará con la de su propio grupo a este lado del charco. De momento ya sabemos cómo suena SOUNDGARDEN en 2012 gracias al tema de la banda sonora de ‘The Avengers (Los Vengadores) con ‘Live To Rise’; tras su salida, han declarado que se trata de un tema aislado que nada tiene que ver con lo que se podrá escuchar en el disco. En su primera gira europea en dieciséis años, sin duda, SOUNGARDEN son el grupo a tener en cuenta y máximo reclamo para gran parte del público de Sonisphere por su reunión, igual que ocurrió con FAITH NO MORE hace un par de años. Una curiosidad: la última vez que nos visitaron fue en La Peineta junto a METALLICA; esta vez comparten cartel (no día) con los de Hetfield, siendo co-cabezas de cartel.

  

 

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