Es habitual que personas de diferentes zonas del país conozcan bandas con letras en euskera o catalán, pero en gallego no es tan habitual. Aún así, dentro de las fronteras gallegas todavía queda una escena fuerte y unida que defiende el uso de su idioma en su música.

Los niños gallegos de los 90 hemos tenido la suerte de criarnos a ritmo de rock bravú, un género divertido y sin filtros con toques de punk y pop rock realmente enérgico y adictivo. Crecimos con canciones en nuestros dos idiomas oficiales de bandas como Aerolíneas Federales, Os Diplomáticos De Monte Alto, Siniestro Total, Rastreros o Heredeiros Da Crus, que marcaron los gustos musicales de una generación, normalizando la escucha de estos géneros musicales que a muchos nos terminarían gustando el resto de nuestras vidas. Actualmente, la escena es distinta pero sigue muy viva, defendiendo el idioma gallego en géneros musicales de todo tipo, incluidos el rock y el metal. Por otro lado, la hermandad que muestran estas bandas entre sí, compartiendo escenario y canciones en numerosas ocasiones, demuestra el motivo de la fuerza y la intensidad de nuestra escena.

Ruxe Ruxe

Esta agrupación de Aríns lleva dando tralla desde 1996. Son un gran ejemplo de cómo defender una fusión del rock y el punk con la música tradicional, utilizando gaitas y diversos sonidos que casan estupendamente con géneros más extremos. Algunas de sus letras tratan temáticas sociales, pero no son los únicos temas que les interesan. Actualmente tienen más de una decena de discos en el mercado. Su próximo lanzamiento, ‘O Estraño Falar Dun Monstro Da Aldea’, será presentado oficialmente el próximo 14 de febrero en la Sala Capitol (Santiago). Por otro lado, también son conocidos por su defensa activa de la lengua gallega en la música y en medios de comunicación. De hecho, el vocalista de Ruxe Ruxe, Vituco Neira, fue locutor de un programa llamado Planeta Furancho, emitido hace unos años en la Radio Galega Música, donde se dedicaba a la difusión de la música en gallego.

Dakidarría

En este caso, esta banda surgida en Nigrán y Val Miñor comenzó su andadura escribiendo en castellano, pasándose al gallego posteriormente. Llevan activos desde 2003, y están viviendo un gran momento en su carrera, con un reconocimiento considerable dentro de las fronteras gallegas y una participación muy activa en festivales por toda su geografía. Su sonido bebe del ska y del reggae, con una fuerza punk como base, estilo que funciona muy bien en directo para públicos de diversos gustos, ya que se adapta a casi cualquier festival. En sus filas cuentan con nada menos que 8 músicos, entre los que se incluye un trombón, una trompeta, un saxo y un teclado. El mensaje de Dakidarría es claro: crítica de la situación política y social actual y defensa de la diversidad cultural. No solo cantan en gallego, sino que cantan para defenderlo.

Heredeiros Da Crus

No se puede hablar de la historia del rock gallego sin mencionar a Heredeiros Da Crus. Esta banda es parte de la historia de nuestra música, marcando a varias generaciones de aficionados al rock, pero llegando también a todo tipo de personas de gustos diversos. Surgen en Ribeira (A Coruña) en el 92, y siguen activos en la actualidad, aunque sufrieron un parón hace unos años. Eso no les impidió tocar por diversos puntos de la península así como en otros países en varias ocasiones. Sus letras no solo son en gallego, sino que cuentan con la particularidad de expresarse en su variante local (uso de seseo y gheada), con humor y naturalidad. La retranca protagoniza sus letras, utilizando la ironía para hacer todo tipo de críticas en relación a ciertos casos de discriminación naturalizados en la sociedad o a nuestra propia historia, así como simples situaciones cotidianas, pero de una forma cómica y sin pelos en la lengua. Acaban de estrenar su décimo álbum, ‘Derretidos’, cuya presentación les está llevando de nuevo al extranjero.

Zënzar

Hablando de veteranos, desde Cerceda tenemos a esta banda de rock que lleva más de 30 años en las tablas. De hecho, Zënzar puede decir con orgullo que es la banda que lleva más años activa haciendo rock escrito en gallego. Se les considera «los padrinos del rock gallego», por lo que serán recordaros siempre como pieza clave de la historia de nuestra música. Tienen a sus espaldas 11 publicaciones, entre las que podemos encontrar un directo de su anterior proyecto, dos maquetas, siete álbumes de estudio y un directo más actual (2011). Actualmente, están en el estudio preparando el sucesor de ‘Camiñando entre serpes’ (2015), que podremos escuchar el próximo año. Son la historia viva del rock gallego continuando activos 3 décadas después de su formación, haciendo disfrutar a varias generaciones a lo largo de su carrera.

Terbutalina

En este caso no son veteranos pero, a su manera, ya son leyenda. Terbutalina son un ejemplo de como llegar, arrasar y establecerse en menos de una década. Su música es adictiva para casi cualquier tipo de aficionado a la música, funcionando de lujo en directo. Comenzaron con un estilo garage punk, suavizándose con el paso del tiempo y perdiendo ese sonido lleno de adrenalina que los caracterizaba, pero el gamberrismo que los caracteriza sigue presente. Sus letras en gallego tratan temas totalmente triviales a primera vista (y en muchos casos es así), pero esconden ciertos mensajes en algunas ocasiones. El secreto de su éxito está en su frescura y en sus alocados directos, donde es imposible aburrirse y que ya los han llevado a diversos puntos de la península. Su nuevo álbum, ‘Espabila Gallego’, ya lleva un par de meses disponible.

Astarot

Volviendo a los veteranos, no podemos olvidarnos de Astarot. Esta agrupación surge en Cangas hace nada menos que 36 años con la idea de llevar el heavy a los locales de su zona. No sería hasta su tercer álbum que deciden incluir canciones en gallego. El cuarto ya sería grabado íntegramente en gallego, dando un salto atrevido en su carrera por aquel entonces, a finales de los 90. Ahí es cuando comienza su verdadera fusión, con un quinto y un sexto álbum que ya son plenos homenajes no solo al idioma, sino a la cultura tradicional de la música gallega. Se trata de versiones llevadas al rock de autores que forman parte de la historia literaria de Galicia, como Celso Emilio Ferreiro, Rosalía de Castro o Curros Enríquez. Su defensa de nuestra cultura les ha llevado por escenarios de todos los rincones de nuestra tierra, así como a los platós de la TVG, llegando a personas de diversas generaciones. Actualmente, los homenajes han dejado paso a creaciones más personales, pero su esencia sigue latente.

Nao

Nao es un ejemplo de banda más actual que la anterior, ya que solo llevan activos desde 2005, pero su carrera no ha pasado desapercibida en la escena gallega. Surgen en A Estrada (Pontevedra) y ya tienen nada menos que 6 álbumes y un EP a sus espaldas. Al igual que en muchos de los ejemplos anteriores, sus letras se centran en la crítica política y social, mandando un mensaje contundente bajo un baño de hard rock. Por desgracia, actualmente están en plena gira despedida llamada «Adeus e Grazas», cerrando un ciclo que fue breve, pero intenso. Se despedirán dentro de muy poco por todo lo alto, dejando un sabor de boca agridulce a sus seguidores gallegos tras su breve carrera, que dejará huella en nuestra historia musical. Han sido y seguirán siendo hasta el final habituales colaboradores con otras agrupaciones gallegas, que también los acompañarán en su despedida.

Os Diplomáticos De Monte Alto

A pesar de que no se encuentran en activo todo el tiempo, no podían faltar en esta lista por la repercusión que han tenido en la historia de la escena musical gallega. Os Diplomáticos De Monte Alto se formaron en A Coruña en 1990. Han sido una de las bandas más representativas del movimiento del rock bravú, con toques ska, punk y folk, destacando por su uso del acordeón. A pesar de haberse despedido oficialmente en 2005, han hecho numerosas reapariciones juntos en varias ocasiones, creando gran repercusión. Publicaron 5 álbumes entre el 91 y 2003, pero han dejado huella. Además, en 2007 han publicado 4 temas inéditos. Actualmente, se juntan de vez en cuando para eventos especiales. Este año están en activo para celebrar los 25 años del bravú, ese género que marcaría tanto nuestra escena musical, con un evento en diciembre en A Coruña que sin duda contará con una alta carga nostálgica y merece que se junten de nuevo para tocar su música las bandas que hicieron historia.

Desequilibrio Mental

Esta banda que fusiona punk, metal y rap en gallego surgen en Teo en 2002, siendo un nombre de considerable reputación en la actualidad dentro del panorama de música gallega. Desequilibrio Mental defienden su particular «metal rural» con su estilo personal, avalado por sus 4 álbumes. El más reciente lleva pocos meses en el mercado, el fin de la trilogía Séculos Escuros bajo el nombre de ‘Ilusión’. En esta ocasión, han contado con diversas colaboraciones de artistas de Los Suaves, Tálesien, Astarot y Reincidentes. Son una prueba más del casamiento y confraternización de los músicos de la escena del rock gallego, que nunca dudan en colaborar y crecer juntos. A lo largo de sus casi 20 años de historia han participado en diversos festivales gallegos compartiendo tablas con bandas que formaron parte de nuestra historia y de la escena nacional. Además, también han ganado el tercer Certame Música Xove y el concurso Novos Sons de la Radio Galega Música, afianzando una trayectoria de lo más prometedora.

Medomeda

Terminamos la lista con una de las bandas más jóvenes de esta selección. Medomeda surge en Teo en 2008 (siendo vecinos de la banda mencionada anteriormente), pero no está formada por novatos, ya que surge de las cenizas de otras agrupaciones. Ellos catalogan irónicamente su música como «rock gilipollas» y beben de bandas como Heredeiros da Crus. Su acogida ha sido desde el principio de lo más positiva, convirtiendo su carrera en algo breve (de momento), pero intenso, dando numerosos directos a lo largo de los años en múltiples festivales gallegos. Su actividad no se remite solo a la música, ya que aprovechan su influencia para buscar apoyo y dar visibilidad a problemas sociales que afectan a su zona, al igual que Desequilibrio Mental. A pesar de ello, siguen adelante con el humor por bandera y sin perder ese espíritu gamberro que los caracteriza.

Olga Vidal