Vicky Psarakis, la actual cantante de The Agonist, acusó a Alissa White-Gluz de querer matar a la banda cuando fue despedida. La vocalista de Arch Enemy se defiende de estas declaraciones.

Alissa White-Gluz se defiende de las acusaciones de Vicky Psarakis

Hace unos días, la actual vocalista de The Agonist, Vicky Psarakis, sorprendía con unas acusaciones dirigidas directamente a Alissa White-Gluz, ex cantante de la formación canadiense. En dichas declaraciones Psarakis afirmaba que la actual cantante de Arch Enemy había tratado de matar a la banda a través de declaraciones en las entrevistas, desde que fue despedida de la misma hace cinco años y medio.

A través de un comunicado por la representante de Alissa, Kult Management (dirigida por la ex cantante de Arch Enemy Angela Gossow) la cantante niega haber hablado mal de Vicky o incluso haber mencionado el nombre de su anterior banda en público. «Invitamos a todo el que quiera a que revisen toda la historia de sus redes sociales y encuentren una sola palabra en la que hable sobre ella o la banda en la que se encuentra», afirma la oficina de manager.

Por su parte, la propia Alissa confirma que «No lo he hecho y no he hablado de ellos, ni siquiera he pensado en ellos en años. Estoy más que feliz de hablar con Vicky y ponerle fin a sus preocupaciones porque sé que de hecho son completamente falsas. No tengo nada más que desearle suerte porque disfruté de la música que hice en esa banda y estoy seguro de que ahora también está haciendo buena música. Puede contactar conmigo y siempre ha sido bienvenida para hacerlo, pero nunca lo ha hecho».

Vicky Psarakis nunca ha conocido en persona a Alissa White-Gluz

Según Kult Management, Alissa nunca había conocido a Vicky antes y ella «nunca había tenido contacto con ella en absoluto, por escrito, en una conversación o de otra manera. Son completamente desconocidos, y Vicky admite los admite, así como el hecho de que sus declaraciones contra Alissa son meramente especulativas». Alissa añade a las palabras de este comunicado que «quiero darle el beneficio de la duda porque está confundida o mal informada. No sé nada de ella y, como tal, no tengo ninguna mala voluntad hacia ella».