Michael Jackson, Beethoven y Scott Walker: ejemplos a seguir para un Ihsahn que prepara su debut español en el Be Prog! My Friend
Experimentación y convención, reuniones de Emperor, un nuevo álbum y el papel de sonidos heredados del black metal en el mainstream actual. Pese a lo reservado de su carácter y su rara disponibilidad para entrevistas, Esteban Portero consigue conversar con él sobre esto y más en vistas de su primera actuación en España (en el festival Be Prog! My Friend), que tendrá lugar este sábado en Barcelona.
Considerado uno de los padres del black metal y más recientemente toda una institución en cuanto a metal experimental y progresivo, Ihsahn es uno de los artistas más prolíficos en su campo, manteniéndose en el ojo de la tormenta con lanzamientos regulares y de una calidad excelente. Pese a lo reservado de su carácter y su rara disponibilidad para entrevistas, Esteban Portero consigue conversar con él extensamente en vistas de su primera actuación en España (en el festival Be Prog! My Friend), que tendrá lugar este sábado en Barcelona.
Este sábado podremos escuchar en vivo, entre otros, algunos de los temas de tu último álbum, Das Seelenbrechen. Es curioso cómo este trabajo tiene un tracklist que a medida que avanza se desvincula de convencionalismos, aumentando los niveles de experimentación poco a poco, canción tras canción, para lograr un efecto de colapso progresivo. ¿Qué te lleva a idear algo así?
«He estado haciendo discos de metal la mayor parte de mi vida, he sido tan afortunado en esto como para que lo peor que me pudiera pasar fuese que se convirtiera en una rutina. Dicho esto, pienso que saco lo mejor de mí cuando me obligo a salir de mi zona de confort: seguir sintiéndome desafiado es clave para no quedarme atrapado por mi propio estilo, que es algo que le pasa a muchas bandas. Cuando acabé la trilogía que inauguró mi carrera en solitario me apetecía explorar un poco más el formato 8 cuerdas + saxofón, así que lo llevé al extremo en Eremita, pero después de eso no tenía muy claro hacia dónde podía llevarlo.»
«Das Seelenbrechen supuso para mí una gran reto, porque me permitió volver a enfrentarme a un estilo en el que no estoy experimentado. En cierto modo fue como volver a ser aquel adolescente black metalero que, sin tener ni idea de cómo funcionaba nada, simplemente tocaba siguiendo su instinto. El encontrarte sin herramientas conocidas, sin fórmulas que hayas usado una y otra vez, es una experiencia magníficamente liberadora. Desde que era adolescente he sido un gran fan de Diamanda Galas, y algo más recientemente de Scott Walker, artistas que con un cierto grado de espontaneidad, por así decirlo, que interpretan una pieza que no ha sido escrita igual que compones una canción cualquiera. Para mí intentar entrar en ese mundo es llevar mis inquietudes un paso más allá.»
Imagino que dentro de esos parámetros de experimentación habría mucho sitio para la improvisación.
«En efecto, See y Tacit 2 fueron totalmente improvisadas, se grabaron tal cual salieron en una sola toma en directo. Recuerdo cómo surgió Tacit 2: estábamos en el estudio a las 12 de la noche, después de haber estado todo el día grabando las baterías de los temas más convencionales, y de repente Tobias empezó a hacer una de esas alocadas improvisaciones de batería. Le di a grabar, enchufé mi equipo de guitarra, me puse a gritar un montón de frases sobre ideas que aquella atmósfera me sugería… y así se quedó. Me gusta pensar que se plasmó la chispa creativa del momento.»
Siguiendo en la línea de explorar terrenos en los que no te habías adentrado hasta ahora, en M tenemos un sonido muy bluesero a lo largo de toda la canción, ¿es este un estilo que suelas escuchar?
«La verdad es que nunca he sido un apasionado del blues, pero supongo que cuando eres guitarrista es algo que debes aprender y en algún momento u otro siempre acabará habiendo alguna canción que te lo pida. Es curioso porque precisamente Sammoth y yo nos conocimos en un seminario para músicos jóvenes que organizaba el festival de blues de Notodden, mi ciudad natal, el cual es uno de los más importantes de Europa.»
¿Cuál es el concepto general que hay detrás de ese álbum?
«La idea principal, como decía cuando hablábamos de su estilo, era volver a esos instintos que me llevaron a meterme en el mundo de la música, volver a hacer un disco de black metal puro sin necesariamente recurrir a su funcionamiento tradicional, es decir, darle protagonismo a esa actitud, ese instinto, esa crudeza, sin excesiva técnica, sin planificación, sin experiencia que lo fundase, hacerlo de un modo primitivo. Por eso escribí una gran cantidad de letras que interpreté tal como las sentía, sin prepararlas.»
Juzgando por las valoraciones que se pueden leer a lo largo y ancho de la red, parece que entre tu fanbase tuvo bastante buena acogida pese al giro que supuso, ¿verdad?
«Cuando estábamos mezclando pensé que sería un suicidio comercial, pero la verdad es que por algún motivo ha tenido bastante éxito entre mis seguidores. Supongo que entienden su propósito, pese a ser claramente distinto a sus predecesores, lo cual me alegra, porque es un trabajo del que estoy muy orgulloso. De todos modos, reconozco que tengo el gran privilegio de no tener que preocuparme demasiado por esas cosas. Durante veinte años he conseguido hacer siempre exactamente lo que me ha apetecido, y supongo que si he conseguido tener seguidores fieles es porque aprecian esa expresión honesta y sin compromisos. Seguir en esa línea es la única manera de honrar mi relación con los oyentes.»
Tan sólo transcurrió un año entre los lanzamientos de Eremita y Das Seelenbrechen, pero parece que te estás tomando con mucha más calma la siguiente entrega, por lo que podría deducir que la naturaleza de esta será bastante distinta a la de su predecesor… ¿En qué estadio se encuentra el desarrollo de tu nuevo álbum? ¿Hacia dónde vas a llevar tu sonido en esta ocasión?
«Ahora mismo hay diez nuevas canciones grabadas, pero todavía queda trabajo, así que supongo que no lo publicaremos hasta principios del año que viene. Como la mayoría de artistas, cuando estoy grabando un disco ya estoy pensando en qué haré en el siguiente, así que cuando estaba ocupado con Das Seelenbrechen empecé a pensar que quizá lo que me apetecía después de hacer un álbum tan «mental», por lo que he comentado antes de la predisposición y el desafío que conllevaba, era componer un disco muy físico. Esa es la idea que he seguido con estas nuevas canciones: crecí en los ochenta, con grandes estribillos y espléndidos riffs, y creo que escribir un tema simple, conciso y memorable es todo un arte. No diré que es un disco comercial, evidentemente, pero ese ha sido el referente, hacer algo que se te quede incrustado en la cabeza, que te haga moverte.»
Cuando estás metido en mundos como el progresivo y la música experimental es normal tender a buscar largos desarrollos, pero tan complicado es hacer una gran pieza de 10 minutos que sea coherente como componer un tema de 3 que lo tenga todo…
«Exacto, es una limitación. Cuando eres adolescente y tocas en una banda de metal, y estoy convencido de que sabes de qué te hablo, es muy común tener una tonelada de riffs que amontonas en lugar de crear una fluidez entre pasajes. Por ello muchas bandas de metal extremo acaban haciendo álbumes que son concatenaciones de riffs sin pulso alguno. Con el tiempo te das cuenta de que es mucho más útil construir en base a una sola idea, la que más te guste, la que más perfecta te parezca. ¡La quinta sinfonía de Beethoven está construida alrededor de sólo cuatro notas! Ese es el mejor ejemplo, no hay duda.»
«Muchas veces no le dedicamos suficiente tiempo a ideas concretas y a las variaciones que pueden ofrecer, y creo que hacerlo es la clave para conseguir un tema de 4 minutos que pese a su corta duración pueda presentarse como una travesía. Al mismo tiempo, que una canción tenga una estructura pop no quiere decir que tenga que ser fácil. Escucha Michael Jackson por ejemplo. Ponte Billy Jean y verás cómo no hay ninguna parte que no sirva a un propósito musical muy concreto, todo está pensado, como por ejemplo ese simple lead de fondo en el segundo verso que lo diferencia del primero y le da continuidad en lugar de que sea una llana repetición. Hay mucho que aprender de este tipo de cosas.»
Volviendo al presente en cuanto a tu calendario, antes de publicar ese álbum estarás este verano tocando en varios festivales, entre ellos el espectacular Be Prog! My Friend de Barcelona, que además será tu primera actuación en España. Traes un nuevo line-up, ¿cierto?
«Así es. Tobias es el único que permanece respecto a la formación anterior, ya que ya no toca en Leprous, quienes eran el principal motivo para este cambio. Ellos están muy ocupados girando por su cuenta, (no obstante allí sí coincidiremos) así que era muy difícil conseguir cuadrar calendarios. Tobias es un batería excepcional y tiene un estilo personal que me encanta, así que para mí es muy importante que sigamos colaborando. En Trondheim recluté a Nikolai y Robin, teclista y guitarrista respectivamente, para completar la banda, y ahora actuaremos como un conjunto de cuatro miembros sólo. He arreglado la mayor parte de las canciones para adaptarse a este formato, tengo ganas de que veáis en Be Prog! cómo funcionamos en directo.»
A lo largo de todos estos años siempre has mantenido tu premisa de sólo tocar en festivales, y ha llegado un punto en el que tienes un amplio catálogo en solitario con el cual se podría construir un extenso repertorio para disfrutar en una gira como cabeza de cartel… ¿Sigues sin estar interesado en esa idea?
«En primer lugar te confesaré una cosa: finalmente he logrado volver a disfrutar tocando en directo. Durante un tiempo estuve bastante quemado por las circunstancias que supone irse de gira, hasta el punto en el que temí que afectase a mi propósito principal, que es componer canciones y publicar álbumes, pero hoy día la organización de eventos es mucho más profesional que en aquella época, así que aquello queda superado. De todos modos, dar conciertos sigue siendo algo secundario para mí… no quiero decir que sea un mal necesario, sino que no es el objetivo principal. Si a esto añadimos problemas de calendario y que me gusta pagar razonablemente a mis colaboradores, siempre es mucho más sencillo y rentable limitarnos a festivales.»
«No estoy en una situación en la que pueda construir una banda estable y dedicarme a girar constantemente como puedan hacer grupos como Leprous, teloneando a otra gente, pagando slots y abriéndose camino hacia una posición en la que ser cabeza de cartel sea viable económicamente. Creo que mi carrera está más allá de ese punto, no tendría sentido ponerme a hacerlo ahora. En los festivales llego a una gran cantidad de público sin tener que preocuparme por cuánta gente vendrá, y reduzco todos esos momentos de estrés que una gira propia conlleva. Quiero vivir tranquilo.»
Hablando de festivales, el año pasado estuviste de gira con Emperor. Debo decir que el concierto de Hellfest fue espectacular.
«¿Verdad? Yo también pienso que fue uno de los mejores.»
Supongo que la mayoría de gente pensó que vuestra reunión de 2006 / 2007 era la última…
«Sí, mantuvimos en secreto los planes para el aniversario de In the Nightside Eclipse durante mucho tiempo porque durante todos estos años Faust no ha tocado demasiado y queríamos asegurarnos de que fuese capaz de volver a subirse a un escenario con nosotros e interpretar las canciones al nivel exigido, con la necesaria seguridad en sí mismo, porque es un salto muy grande pasar de estar dando conciertos con tu banda local a tocar en Wacken, por ejemplo. Al final Faust hizo un trabajo excelente y todo fue muy cómodo, así que valió la pena.»
«Era muy importante que él estuviera con nosotros porque no queríamos hacer lo mismo que en la reunión anterior, tenía que ser un show distinto. Lamentablemente no pudo venir con nosotros a Japón (pese a que removimos cielo y tierra buscando la manera, pero al parecer su antecedentes criminales pesaban demasiado allí), pero Trym estaba en plena forma y conseguimos salvar la actuación.»
¿Cómo es tu relación con Samoth hoy día?
«Hablamos cada semana. ¡De hecho le acabo de enviar un mensaje!»
Vaya, es genial saber eso. Cuando una banda está separada, la gente tiende a pensar que hay tensión entre sus ex-miembros…
«En todas las bandas hay tensión, y en nuestro caso esto se hizo especialmente evidente a nivel creativo hacia el final de nuestra carrera. En Prometheus yo grabé más instrumentos que en varios de mis discos en solitario, por dios (risas). Por no hablar de que lo compuse todo, claro… había un enorme desequilibrio en cuanto a lo que cada uno quería hacer, porque queríamos tirar en direcciones opuestas, y esto se ve fácilmente comparando lo que él haría en Zyklon con mi primer disco en solitario. Hasta entonces la magia de Emperor había residido en cómo nos complementábamos, pero supongo que nuestros puntos de mira se distanciaron demasiado.»
«Sigo pensando que hicimos lo correcto dejándolo en alto en lugar de arrastrarlo sólo por el nombre. Con motivo de los conciertos de reunión no paramos de recibir preguntas sobre si habrá un nuevo álbum, y me gusta preguntarles de vuelta «¿Y qué tipo de álbum sería ese?». Cuando escribo metal me salen cosas como Eremita, y a Samoth le salen cosas como lo que hace con The Wretched End, así que la única opción sería mezclar esos dos estilos o copiar algo que hacíamos cuando éramos adolescentes. Francamente, me parece que ninguna de esas opciones sería un acierto. No tendría sentido.»
Totalmente de acuerdo. Volviendo a la gira, ¿habrá lanzamiento en DVD de alguna de las actuaciones del aniversario de In the Nightside Eclipse?
«Nada planeado de momento, tenemos todo el material necesario de varios de esos conciertos pero no es algo que corra prisa. Eventualmente se hará.»
Para muchos, y me incluyo, la gira ideal hubiese sido la del aniversario de Anthems to the Welkin at Dusk, pero no sé cómo de viable es eso teniendo en cuenta que es de aquí a tan sólo dos años.
«Bueno, eso se comentó incluso antes que los conciertos de In the Nightside Eclipse, simplemente lo iremos viendo. Ahora mismo estoy cerrando mis actuaciones en solitario para presentar mi nuevo álbum el año que viene, y no sé qué haré en 2017. Aprendo de mis errores, así que no voy a decir «nunca» otra vez… el verano pasado lo pasamos extremadamente bien, la verdad, estuvimos enormemente centrados y no hubo ningún tipo de problema. Dar conciertos con Emperor de vez en cuando no perjudicaría a la integridad de mi trabajo principal, que es mi carrera en solitario, así que no veo por qué no. Lo veremos.»
Siempre me ha parecido curioso que, por lo general, si hay una banda legendaria de black metal que llame la atención y guste a gente ajena al género, esa es Emperor. ¿Qué crees que hace que esto sea así?
«Pese a que éramos una banda muy extrema, siempre quisimos tener un alto componente melódico, algo que no todo el mundo hacía. Las orquestaciones, aún siendo bastante sencillas, creo que le daban un toque a banda sonora por el que mucha gente se siente atraída. Detrás de todo aquel caos había un pulso épico al que agarrarse.»
Como despedida, conociendo la singularidad de tu posición me gustaría saber qué opinas de la acogida en círculos mainstream de bandas como Deafheaven o Ghost Bath, que no dejan de ser herederas de algo en cuya creación participaste.
«Creo que incluso en su momento nunca estuve tan metido en la escena noruega como el resto. Samoth era el que estaba vinculado a todos ellos, yo simplemente iba con él, así que pienso que nunca he formado parte de ello a un nivel activo, yo sólo me preocupaba de hacer música. De hecho, eso de la «comunidad» black metal es una contradicción per se, ¿no? Se supone que una actitud black metal debe ser solitaria, personal, así que nunca he entendido que nadie que siga esa filosofía se dedique a decirle a otro «no deberías hacer eso» o «eso no debería sonar así».»
¿Has escuchado Sunbather?
«No, pero conozco la base de su propuesta y aprecio su actitud. ¿No debería ser aquello de «hacer tu voluntad será el todo de la ley» la máxima del black metal?»
Ya que estamos comentando ligeramente el panorama musical actual, tengo curiosidad por saber qué andas escuchando últimamente.
«Por lo general distintas ramas electrónica… en especial The Haxan Cloak y James Blake, por ejemplo.»
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