No tenemos respeto por nuestra escena

Esa no es la pregunta y por lo tanto no daré una respuesta. La pregunta es. ¿Me siento heavy? ¿Quiero que sobreviva y crezca la escena? Cuando respondas a esta pregunta entonces medita y pregúntate ¿y que puedo hacer para que la escena sobreviva y crezca? Y entonces, si me haces el favor, te vuelves a leer estas líneas. Ojala veas la luz. Ojala entendáis que lo que necesita apoyo, calor, compromiso, es LA ESCENA.

Muchas veces he reflexionado, debatido, escrito, hablado con los colegas en el bar… sobre el tema del apoyo a las bandas estatales. Quien me conoce sabe que es mi pasión, nuestras bandas, las históricas, las actuales, todas. También quien me conoce sabe que hay momentos en los que no he podido morderme la lengua y he entrado a trapos en foros públicos, siempre con mi nombre, no soy yo de esconderme bajo seudónimos rimbombantes, a debatir el tema.

De esos debates he sacado mis primeras conclusiones, incluso a veces he visto otros puntos de vista y los he asimilado y con el paso del tiempo tengo algunas ideas más claras que voy a tratar de esbozarlas en estas líneas.

LA EVOLUCIÓN DE UNA BANDA ESTATAL Y EL APOYO EN SU TIERRA.

Lujuria, la banda que ha sido y es mi vida, ya tiene una trayectoria que me permite ver las cosas con perspectiva. Esa perspectiva me ha permitido desarrollar mi teoría sobre la evolución que sigue una banda de aquí en cuanto a apoyos. Generalizar siempre es injusto, por lo tanto, lo que voy a exponer no es siempre así ¿OK? pero creedme, sí muchas veces.

Una banda de aquí pasa por tres fases en su carrera:

1ª Cuando nace. Cuando una banda nace suele despertar simpatías siempre, especialmente en su pueblo o ciudad donde rápidamente sus colegas, amigos y gente de tu pueblo o ciudad, se identifica con la banda. Apoyan tus bolos, hablan de ti, te convierten en “su” banda y todo es de color de rosa. Musicalmente no es tu mejor momento, no suele serlo vamos, pero da igual. La peña está a muerte contigo

2º Cuando crece. Aquí ya llegan los problemas. La banda es la misma, por pura lógica y aunque solo sea por los años de práctica y la experiencia adquirida, la banda es mejor. Se habla de la banda a nivel nacional, llegan seguidoras y seguidores de todo el estado pero, amigo, tienes un problema. Tú no has cambiado pero a la gente eso le da igual, para aquellos primeros que te apoyaron (lo dicho, generalizar es malo, siempre hay honrosas excepciones) te has vendido. Ya no eres auténtico. Ya no estas en los garitos del principio tocando para ellos y 20 más, ya no molas. Ahora molan “Los…. (aquí el nombre de una nueva banda que ha surgido) que, por supuesto casi nadie conoce y son propiedad de los exquisitos. Ya crecerán y dejarán de molar… es cuestión de tiempo.

3º Cuando se consagra. En ese momento algunos de los que te abandonaron en la segunda fase vuelven, eh, que yo los descubrí, joder yo los vi en los 90 tocando para cuatro, tenías que haberlos visto entonces… También se estabiliza la cosa en cuanto a seguidores. Aquellas y aquellos que te criticaron esgrimiendo mil falsas razones no van a reconocer que se equivocaron, al revés, ya es algo personal para ellos y se reafirmarán continuamente y donde puedan (aunque no venga al caso) en las críticas hacia ti. Aquellos que te siguieron siempre ahí estarán. Los que has conseguido en tu carrera también, esa será tu gente ya para siempre. La gente hoy día no es del rock, es de bandas, soy de Lujuria, a muerte, o me va el rock y el metal pero con Lujuria es que no puedo… y nada mueve estas cosas. Nadie es del ruuack, somos de bandas…

Falta una cuarta fase a la que aun Lujuria no hemos llegado pero sí he visto lo que pasa en otras bandas, hablaré de ello mas adelante, cuando eres verdaderamente histórico.

NO TENGO POR QUÉ APOYAR TODO LO DE AQUÍ

Es una de las cosas que he aprendido en esos debates en los que me enfrascaba en mi tierna juventud jajajajaja cuando no daba crédito a lo que leía. Yo me crié en esto del metal en los 80, y apoyábamos a todas las bandas a muerte, porque, sencillamente, nosotros éramos heavys, y las bandas, todas, eran nuestras bandas. Los foros de Internet me permitieron descubrir que ese sentimiento no era universal y que había gente que iba con el puñal entre los dientes cada vez que aparecía una banda estatal. Lo cierto es que llegué a entender que algo de razón tenían, no por ser de aquí tengo que apoyarlo si no me gusta, es cierto. Pero también es verdad que veía otros factores, tal vez envidias, tal vez la proximidad que hace perder la magia…

Mira esto merece que me detenga un poco, la proximidad. A los Judas, a los Maiden, solo los veíamos cuando venían al Pabellón, a nosotros, las bandas de ahora, nos ven a diario, pasamos a ser parte de la peña, estamos en los conciertos de público, en los garitos de marcha, perdemos glamour. Una mierda me ha importado eso siempre pero ese puede ser un factor de que nos vean… de otra manera.

Lo cierto, volviendo al tema, es que llegué a entender la parte interesante de esa premisa, si no fuera porque quien me la solía soltar eran siempre los mismos nicks en los foros, (ya ni los recuerdo, ni quiero, ni quiero saber quien está detrás de aquellos nicks de mis debates pasados, la verdad) que, curiosamente, estaban en cada crítica a cada banda estatal.

La explicación me llegó un día hablando con los responsables de un sello discográfico que se ha dejado la vida por el rock en este país, Avispamusic. Me gusta mucho hablar con ellos cuando nos vemos, siempre aprendo algo. Ellos me dijeron esta frase que creo que recuerdo casi de manera literal “Mira Oscar, por lo que vendemos en nuestro catálogo calculamos que en España hay unos 20.000 heavys. Por lo que conocemos de las cosas que nos llegan para oír, 19.000 tienen un grupo. Tan solo quedan 1000 que de verdad sean heavys y compren y apoyen, los otros 19.000 solo tienen un objetivo, quitarte a ti para ponerse ellos”

La frase me dio que pensar. Evidentemente estaba llevado a la máxima potencia, pero pintaban una situación muy cercana a la verdad.

NADIE ES PROFETA EN SU TIERRA, TÍPICO DE ESPAÑA

No es cierto. Es otra de las cosas que me gustaría dejar claro en estas líneas. Hemos viajado bastante, principalmente por Latinoamérica, y hemos compartido escenario con muchas bandas de esos países. Algunas buenas, otras incluso buenísimas. Nos contaban sus cuitas y pensábamos, joder, pues igual que nosotros en España. A ellos, en sus países, no se les apoyaban como merecían, ahí en cambio se volcaban con nosotros, pero claro, allí, como dicen ellos, somos banda internacional.

Por lo tanto no es tanto que nadie sea profeta en su tierra, es mas bien este carácter gilipollas que tenemos los latinos en general que creemos que todo lo de fuera es mejor. Tan es así que llegamos a la parte más graciosa de la historia y más recurrida. Cuando una banda tiene un nivel que hace difícil criticarla, entonces acudimos a este argumento “ya, si tocar tocan bien, pero las letras…” Siempre me toca despollarme llegado a este punto. Si tradujésemos las letras de las bandas extranjeras que adoramos íbamos a flipar en colores…

LAS BANDAS HISTÓRICAS

Os decía que quería dedicar unas líneas aparte a esto. Me duele lo que estos días ando leyendo. Por cierto que eso ha generado en mi cabezota el inicio de otra teoría, aun no la he puesto nombre pero barajo algo así, como “esta de moda atacar a fulanito” Sí, lo has adivinado, hablo de Barón Rojo. No me corto y lo digo, para mí la banda más grande que ha dado nuestro rock con diferencia y me atrevo a decir que dará. Nunca sabré donde se originan las modas, pero se originan. Barón Rojo debe dejarlo ya. Y todo el mundo repite el mantra. Es que no ensayan ya… ya con esto flipo. Mi chica, que tiene una banda, ensaya en los mismos locales que ensayan Barón. A veces faltan unas bandas, a veces otras, Barón nunca. Después de tantos años, siguen ensayando como el primer día. Que se sepa.

Hablaba de las fases por las que pasa una banda estatal en cuanto apoyos y os mencionaba 3 fases, me quedaba la cuarta, a la que no hemos llegado aun Lujuria, pero sí otras bandas, por ejemplo, Barón Rojo. Cuando se hacen míticas. Aquí sí somos diferentes a otros países. Que se anuncie un concierto de una banda mítica en Inglaterra, veréis, las entradas vuelan, la palabra que entonces se oye es RESPETO. Y eso es lo que nos falta con respecto a estas bandas míticas. RESPETO. No tenemos respeto a quien se lo ha ganado a pulso. Una banda mítica en este país vuelve a la casilla de salida y recorre de nuevo las tres fases que os mencionaba con una banda que empieza. Os resumo. Si la banda, seamos claros, no fue mucho en su época, 30 años después vuelve a tener el apoyo de todo el mundo, resulta que todo el mundo la siguió, que a todos nos gustaba y que a ver si vuelven, a ver si se juntan… ahora, si fue grande, pasa a la fase dos de la banda novel, ya no molan, están acabaos, deben retirarse… sinceramente, estoy ansioso porque llegue a la fase tres una de esas bandas, bien puede ser Barón Rojo ya que me he decidido a dar nombres y ver como cuando cumplan, no se, 40 años de historia y sea algo realmente importante muchos de los que se han llenado la boca con que se retiren ahora, irán al concierto del 40 aniversario, dirán que es algo único, que siempre fueron de Barón y querrán tener la púa del 40 aniversario, la entrada del bolo y la camiseta porque eso sí, apoyar a saco no destacamos por ello pero fetichistas y frikys (no se si para presumir de la cole y demostrar que somos EL QUE MAS) de eso, somos un rato.

LA PARTE QUE TOCA A LOS GRUPOS

No estaría completo este artículo si me limitase a hablar del público. De las cosas que pasan, los grupos, también tenemos culpa. Recuerdo cuando empecé a hacer mi programa de radio en mariskalrock.com. Para su primer aniversario me embarqué en una fiesta cuya intención era llevar al directo a bandas que en aquel año me habían sorprendido por su potencial y que quería dar a conocer. Para que os hagáis una idea, una de ellas era Zenobia y mirad donde han llegado. Allá que me fui a a presentar mi fiesta como soy yo, que pillo un micro y largo. Y largué, ya entonces pasaba que a veces el público no era el esperado. Eso sí, no eran los números de ahora. 300 nos parecía poca cosa, ilusos jajajaj …si lo pillamos ahora. Me quejé de que podíamos, debíamos, ser mas en esa fiesta. Cuando bajé de presentar, un tío del público, por cierto con mucha calma y educación, me dijo, ¿tienes un momento para charlar? Le dije que sí. Me pregunta ¿Cuántos grupos crees que habrá en Madrid? ¿Ponemos mil? La verdad hasta me parecieron pocos pero le dije vale sí, mil ¿y? No sabía donde quería llegar. ¿Y cuantos miembros tiene cada grupo? Normalmente 5 ¿verdad? Si bueno, le dije dando vueltas al coco. Eso hacen 5000 tíos que deberían estar interesados en que estas cosas crezcan. ¿Por qué nos dices nada a nosotros, que sí hemos venido y no dices algo a, al menos, todos esos que deberían casi por egoísmo estar aquí y no están? Tenía toda la razón del mundo. De hecho siempre que puedo cuento esta historia, es mi manera de decir algo a “esos 5000”

Si todos los músicos de cada ciudad fueran a los conciertos, no a todos, a veces están tocando, a veces no hay dinero y lo entiendo, pero de ahí a no ir a ninguno hay un trecho grande… si eso pasara, esto tendría otro color.

Tampoco es bueno leer declaraciones que se leen, gente de un grupo atacando a ex miembros, grupos hablando mal de otros, ¿esto que es? Eso, queridos colegas músicos, funciona si somos The Beatles o Rolling Stones, Oasis o Blur, pero no en el rock estatal, os aseguro que no. Dividir a la poca gente que aun apoya esto en bandos, echar mierda a excompañeros, aconsejar a otras bandas que se retiren como si la nuestra fuera la única buena de todo el estado… no, no es el camino. No al menos para mí y sinceramente creo que no para nuestro rock. Esto lo he contado más veces también pero lo vuelvo a poner porque siempre me viene a la memoria llegado a este punto. Grabábamos nuestro segundo disco. En él colaboraba alguien a quien admiro por encima de cualquier músico estatal, es mi ídolo sin duda, José Carlos Molina. Charlábamos después de grabar tomando algo. No recuerdo por qué o de qué estábamos hablando pero sí esta frase que se me grabó a fuego. “Oscar los seguidores no deben saber como es esto por dentro… que nos quedamos solos” y sonreía con esa sonrisa de quien ya sabe bien de qué va la vaina. Desde entonces tengo un sueño, que la peña pueda saber cómo es esto por dentro, y que no nos quedemos solos…. Aun… no es el momento… una pena.

LEYENDAS DEL ROCK, CAÑONAZO DE BANDAS ESPAÑOLAS

Hace nada salía este titular y se anunciaban nuevas incorporaciones al festival estatal de metal por excelencia sin duda. El Leyendas, fiel a su espíritu, se vuelca con bandas estatales y anuncia una andanada de bandas de aquí para la nueva edición. No han tardado. ¿Cañonazo? Si son los de siempre… buaaa ya lo sabíamos… en fin, como digo, lo de siempre. ¿Quiénes lanzan esas críticas? Pues curiosamente coincide con la premisa que me enseñaron los hermanos de Avispa, quien tiene una banda y no está en esa confirmación. ¿Dirían lo mismo si su nombre estuviera en esa tanda de confirmaciones? No solo bandas, a veces hasta managers que, por lo que sea, mas bien por una única razón, no hay tiempo material para todas las bandas que solicitan entrar en el Leyendas cada año, de meter a todas las que solicitan el festival duraría cerca de dos meses…no han conseguido que alguna de sus bandas estén ahí. Y aquí está la razón por la que hay que apoyar a lo nuestro, lo que siempre acabo diciendo a modo de conclusión y cierre final. POR LA ESCENA.

Lujuria no estuvo en la primera edición del Leyendas. No me importó. Lo apoyé a muerte. Me pidieron que lo presentara (en compañía de Rafa Basa) y no lo dudé. Aquel festival, con esa filosofía, había que apoyarlo a muerte. Reflexionad, si en vez de eso empiezo que vaya, faltan bandas, una de Segovia concretamente, eso es una mierda, que no vaya nadie que está todo compadreado…. ¿Cuál hubiera sido la historia de Lujuria en el Leyendas? ¿La misma? ¿Hubiéramos estado cada edición tras esa? No lo creo. Apoyamos el festival, el festival creció, años después han ido muchas mas bandas (repasad carteles aquellas y aquellos que alegremente afirmáis que siempre son los mismos) y ha crecido la escena.

Ahora mirad las bandas que están haciendo gira de invierno este año. Después mirad cuántas estábamos en gira de invierno hace unos años. Es casi normal que en esos bolos de invierno se invite a bandas locales a abrir el concierto, surgen oportunidades, las nuevas bandas se dan a conocer así. Por otro lado las salas si ven que la cosa funciona programan más conciertos, la escena crece. Pasa lo mismo con los bares, nuestros bares, que transmiten nuestra música. Se nos mueren. Y ya no hay sitios donde juntarnos y escuchar hasta sabernos de memoria cada canción, o descubrir grupos… la escena… lo mismo con las webs, las revistas… la escena…

¿TENGO, PUES QUE APOYAR TODO LO NUESTRO POR SER NUESTRO? ¿Y SI NO ME GUSTA?

Esa no es la pregunta y por lo tanto no daré una respuesta. La pregunta es. ¿Me siento heavy? ¿Quiero que sobreviva y crezca la escena? Cuando respondas a esta pregunta entonces medita y pregúntate ¿y que puedo hacer para que la escena sobreviva y crezca? Y entonces, si me haces el favor, te vuelves a leer estas líneas. Ojala veas la luz. Ojala entendáis que lo que necesita apoyo, calor, compromiso, es LA ESCENA.

¡LARGA VIDA AL HEAVY METAL!

Oscar Lujuria

¡Por el puto rock and roll!