El vocalista y guitarrista de Metallica reaparecía por primera vez desde que comenzó su rehabilitación a finales del pasado mes de septiembre.

Primera aparición de James Hetfield en meses

Desde que comenzó su rehabilitación a a finales del pasado mes de septiembre, el vocalista y guitarrista de Metallica, James Hetfield, se ha mantenido en un segundo plano. El pasado 30 de enero reaparecía para la presentación de «Reclaimed Rust: The James Hetfield Collection» en Los Ángeles, California. Durante este acto, Hetfield habló con el director ejecutivo del Petersen Automotive Museum, Terry L. Karges, y trató varios temas del futuro de su banda. Sobre el próximo trabajo de estudio de Metallica, el artista estadounidense confesaba que «esa es una gran pregunta. No lo sabemos. En este momento, estoy sentado en el Museo Petersen, y no sé qué va a pasar. Esa es la belleza de esto. Nos sentaremos y descubriremos lo que funciona mejor para nosotros. Lo que sea que esté por venir, no lo sabemos. Y de alguna manera pasaremos del miedo a lo desconocido, a tener el miedo suficiente como para sentirse vivo».

Recuerdos del pasado

Durante esta entrevista, Hetfield también reflexionó sobre sus primeros años como aspirante a músico en Los Ángeles, justo antes de la formación de Metallica, cuando cogió una guitarra por primera vez y cuando comenzó a cantar.

«Quería estar en una banda», recordaba James. «Simplemente lo sabía. Iba a suceder. E iba a hacer que sucediera. Y comencé a tocar con algunos amigos, amigos locales, en una banda llamada Obsession. Y tocamos versiones en fiestas escolares. Y a partir de ahí, después de mudarme, salí con personas que eran un poco mejores que yo. Y así es como aprendí a mejorar un poco. Sabía que eso era lo que quería hacer, y lo haría a toda costa».

«En los años 80, en Los Ángeles, todos los guitarristas intentaban ser Eddie Van Halen, y había millones de guitarristas», continuaba contando. «Cada banda estaba buscando un cantante. Así que vendí mi guitarra, vendí mi amplificador y compré un PA y un micrófono, y quería ser cantante. Ese era el siguiente objetivo. Y cuando conocí a Lars le dije: ‘ Oh, ya no toco la guitarra, ahora estoy cantando ‘. Él me dijo: ‘Bueno, buscaremos un guitarrista’. Y entonces nadie podía tocar la guitarra como queríamos, así que volví a tocar la guitarra. Después buscamos un cantante, y  nadie podía cantar como queríamos que lo hiciera. Así que dije, ‘Ok, cantaré hasta que encontremos un cantante’. Simplemente se hizo por necesidad. Había una necesidad. Para mí fue un desafío hacerlo, pero lo superé y tuve mucho apoyo».