Uno de los mayores festivales de metal del mundo sufre una ola de cancelaciones con más de veinte bandas cayendo del cartel.

El festival Hell and Heaven 2023, que se celebra en el Foro Pegaso en Toluca, Estado de México, del 3 al 5 de noviembre, ha enfrentado una serie de cancelaciones por parte de bandas que estaban programadas para actuar. A pesar de contar con grandes nombres como Muse, Slipknot, Guns N’ Roses, Helloween y A Day To Remember en su cartel, más de 20 bandas han decidido retirarse del evento, citando diversas razones entre las que destaca la mala organización del festival.

Casi 20 bandas canceladas

Una de las cancelaciones que más ha impactado es la de Ill Niño, que anunció su decisión a través de sus redes sociales, expresando su desilusión por no poder participar debido a «depósitos no recibidos y logística de vuelo». La banda señaló que estaban listos y emocionados por actuar, pero las circunstancias los han obligado a retirarse. En su comunicado, Ill Niño lamentó no poder encontrarse con sus seguidores en México, y destacó que en situaciones como estas, son los fans quienes realmente sufren. Para suplir la ausencia de Ill Niño, los organizadores del festival incorporaron a Abodrock al cartel.

Entre las otras bandas que han cancelado su participación desde que se anunciaron los primeros avances de programación se encuentran 1914, Accused, Angra, Anima Tempo, Cenotaph, Coal Chamber, Emperor, Espécimen, Fortress Of Empyrean, Front Line Assembly, GBH, Hanabie, Here Comes The Kraken, Hocico, Images of Eden, Lockjaw, Luzbel, Masacre 68, Mudvayne, My Dying Bridge, Stabbing, Strike Master, y Tiger Army.

Guns N’ Roses, sobre los que existieron muchos rumores a lo largo del fin de semana, publicaron un mensaje en sus redes sociales reforzando la idea de que iban a tocar en la cita mexicana. Se tratará del último concierto de su largo tour mundial del año 2023, que ya pasó por España en verano.

«Dificultades logísticas»

Las “dificultades logísticas” han sido citadas como una de las principales razones para estas cancelaciones. Además, se han reportado quejas por parte del público en relación a la impuntualidad de los conciertos y a la lentitud en el acceso al recinto, lo que incluso llevó a algunos asistentes a forzar su entrada.

El coste de las entradas para el festival oscilaba entre los 3990 pesos mexicanos a 11290 pesos mexicanos, dependiendo del tipo de acceso y la fase de compra. Ante las cancelaciones, muchos de los asistentes han expresado su descontento en las redes sociales, solicitando el reembolso de sus entradas. La ola de cancelaciones pone en evidencia los desafíos logísticos y organizativos que enfrentan los festivales de gran envergadura, y resalta la importancia de una gestión eficaz para garantizar la satisfacción tanto de los artistas como del público.