Jon Schaffer es un tipo con un gran don para verbalizar emociones. Y los últimos años le dieron motivos para verbalizar muchas emociones, pero no lo hizo y calló manteniéndose en un segundo plano, dejando que discos como “The Crucible of Man” o “Framing Armageddon” hablaran por el. Ahora, superado el mal trago de aquellos años –que el mismo admite que afectaron a la calidad de los discos de la banda- Schaffer abre la boca y explica todo lo que ha sucedido en el pasado reciente. Sergi Ramos se sienta en las oficinas de la discográfica Century Media en Dortmund con el guitarrista americano y con el nuevo vocalista de ICED EARTH, Stu Block, también voceras de INTO ETERNITY. Tenemos una amplia charla de más de una hora que rescatamos en tres sabrosas partes que iremos presentando en las próximas semanas. No tienen desperdicio.

¿Cómo conociste a Stu? ¿Eras ávido  seguidor de INTO ETERNITY? ¿Envió Stu una demo cuando supo que Matt Barlow volvía a dejar la banda?

Jon: “No, no es que escuchara a INTO ETERNITY, pero en cierta ocasión giramos con ellos y recuerdo escucharle calentando en el camerino. Nunca le vi sobre el escenario pero recuerdo escucharle pegar voces calentando. Cuando eres el cabeza de cartel siempre estás liado con otras cosas antes del show, sea hacer entrevistas, firmas de discos o lo que sea. Recuerdo esa noche en la que le escuché, como digo, y pude darme cuenta de su variedad de rango y estilos. Pasaba de una voz absolutamente death metalera a una voz aguda y melódica con una facilidad tremenda. Fue entonces cuando dije “hum, este tío tiene buenas cuerdas vocales”.

“Fue Robert de Century Media quien me hablo de Stu cuando comentamos la posibilidad de que Matt no siguiera formando parte del futuro de ICED EARTH ahora que queríamos lanzarnos a por todas con el nuevo disco. El me recomendó a Stu y me enseñó uno de sus videos en YouTube. Me impresionó su mirada mientras cantaba. Su rango alto era muy bueno, tenía grandes melodías, y aunque no estoy muy metido en las voces death metaleras porque no es un género que aprecie particularmente, sabía que lo estaba haciendo muy bien en ese sentido también. El rango lo tenía, pero lo más importante era la actitud, la agresión y pasión que ponía a la hora de cantar. Cuando escuché los ganchos melódicos que usaba en los coros terminé de decidirme porque supe que podría componer con él.”

“Una persona del sello me ayudó a localizarle, me puse en contacto con él y lo tomamos desde ahí. Mi mánager le envió un par de viejos temas de ICED EARTH para que los practicara y quedamos directamente en el estudio, para ver que tal sonaba todo con un buen micro y una buena compresión. Quería probarle sobre un par de canciones nuevas para ver que tal lo hacía. No le di demasiado tiempo (risas). El primer tema que compusimos juntos fue “End of Innocence” y quedó  muy bien. Desde un principio le empujé a centrarse en la zona media de su voz, porque es lo que mejor encajaba con la música de ICED EARTH y es lo que menos usaba en las canciones de INTO ETERNITY. De vez en cuando tenemos un agudo por aquí y por allá, pero la parte más amplia de nuestro catálogo se encuentra en ese rango vocal medio. Es lo que tiene sentido para mi cuando compongo una canción. Otros tipos de música requieren otros tipos de voz, pero la de ICED EARTH requiere esas tonalidades. Me interesaba saber si era un estilo con el que Stu se sentía cómodo y rápidamente vimos que si, y que había muchos detalles en su voz que solo aparecían cuando trabajábamos en ese contexto”.

La cuestión es que muchos vocalistas de death metal solo saben cantar de esa manera y no saben controlar su voz en otros ámbitos. Stu brilla especialmente FUERA del registro más agresivo, donde muestra los elementos más únicos de su voz. Ese dinamismo, no obstante, es el que comenzaba a faltarle a Matt Barlow, a quien se le notaba cansado y algo falto de ideas últimamente.

“Depende de las canciones. Las canciones determinan la dinámica de las voces. Intento decirle a la gente que no se debe escribir una canción para un determinado vocalista. La canción es la canción y el arreglo es el que ha de ser. La progresión de acordes determina que melodías puede aplicar vocalmente, así como la atmósfera del tema determina como ha de enfocarse la voz. No haces un tema de PINK FLOYD con voces a lo SLAYER. Vale, quizá alguien lo hará, pero no es algo que quede particularmente bien.  Es el arreglo musical lo que dicta qué sucede después. Lo que sucede después de tener el arreglo o la estructura de acordes es que puntúas, acentúas y eso lo haces con la voz. Es la progresión natural a la hora de generar música”.

¿Te esperabas un cambio tan repentino en tu carrera como ser el frontman de ICED EARTH a estas alturas?

Stu: “Mira, tío, si te digo la verdad ha sido todo tan repentino y hemos ido tan estresados que ni me he podido parar a pensar en ello. Ha sido un shock. Desde que conocí a Jon solo hemos hecho que componer, tocar, ensayar, volar arriba y abajo… Creo que no le he dicho esto a nadie aún: ¿sabes cuando te levantas por la mañana y te das cuenta de lo que acaba de suceder en tu vida? Pues yo me levanté una mañana, me metí en la ducha, me di cuenta de lo que estaba pasando y grité como un poseso de pura felicidad (risas). Esto es lo que había querido hacer toda mi vida”.

Jon: “Y este es el tipo de música que debería haber estado cantando toda su vida. Lo creo y estoy muy convencido de ello. He tenido la fortuna de trabajar con muy buenos vocalistas en toda mi carrera, como Hansi Kursch, Tim Owens, Matt Barlow y ahora Stu Block. Y lo que pienso es que si tienes las herramientas…úsalas! Saquémoslas de la caja de herramientas y comencemos a usarlas. Especialmente si yo estoy componiendo la música, lo que quiero es dinámica, quiero que la música sea un viaje, que ICED EARTH te hagan ir a distintos sitios mientras escuchas un disco. Y hay pocos vocalistas que sepan hacer eso”.

Los últimos dos discos de ICED EARTH fueron algo más aburridos o estáticos, aunque quizá no sea eso lo que quieres escuchar.

Jon: “Tío, perdí a tres familiares muy cercanos mientras componía esos últimos dos discos. Eso va a afectar a la música. Más de una persona lo enviaría todo al cuerno y se encerraría en si misma antes que hacer música. Yo ahora escucho esos dos discos y veo que no estaba ahí, que estaba en otra parte, especialmente con “Crucible of Man”. Cuando los arreglos de las canciones estaban acabados, justo antes de comenzar a registrar las pistas, fue cuando perdí a mi padre y luego a mi hermana. Fue una saturación horrible. Ahora escucho esos arreglos y pienso ‘nunca lo haría así’. La manera en que estaba haciendo las canciones no era mi manera habitual, no tienen sentido  algunas. Hay buenos momentos, no obstante, como “Come What May” o “I Walk Alone”. Hay temas muy consistentes, pero como disco, como unidad, no fluye igual que otros.”

“Reto a cualquier a componer un disco estando en el estado en que yo estaba por entonces”.

Aunque ya debes haber pasado tu duelo particular tras estos dos o tres años ¿sigues volcando esas emociones en la música de la banda de algún modo?

“No lo creo. Cada tres meses había alguna tragedia impresionante. Pero de eso ya hace tres años y medio. Soy bueno en esas cosas. Me planto ante la adversidad y me pongo duro: venga, una cosa. Venga, la siguiente. Ahora, esta otra. Primero fue mi hermano, luego mi padre, luego mi hermana…la mitad de mi familia eliminada en unos meses. Fue brutal”.

“Me llevó algún tiempo reponerme. La energía que me hizo volver a funcionar fue mi especie de despertar hacia lo que estaba pasando en el mundo. El caos financiero, la fragilidad del sistema financiero, que es el motivo de muchas de las cosas que van mal en el mundo. Aquello fue una experiencia que me hizo volver a realidad y volver a la actividad. ¿Sabes cuando algo está mal pero no sabes porqué? ¿Cuando no puedes señalar el motivo con el dedo? Yo no quería ser esa persona. Te sientes perdido y yo ya no estoy perdido.”

“Hace unos años me desperté de golpe y volví a apreciar muchas cosas que no apreciaba, incluso a ICED EARTH como banda. Esta banda es una fuerza de la naturaleza. No comprendo aún porque siento la extrema necesidad de hacer lo que hago con esta banda. Es algo extraño. Llegué a un punto en el cual no apreciaba la banda. Estaba tan quemado que no podía más. Tomarme un descanso, unas vacaciones tuvo un gran efecto sobre mi aprecio por esta banda. SONS OF LIBERTY también me enseñó eso. Estar en los ensayos sin tocar la guitarra, concentrándome en lo que hacen los demás, sentándome a ver como ellos tocan me hizo darme cuenta de lo buenos que eran. Nunca me había dado cuenta de ello. Mi nueva perspectiva me hizo cambiar muchos planteamientos. La banda me decía “¿estás orgulloso eh, papá?”. El hecho de dedicarme a cantar me hizo entender mucho mejor por lo que pasan los vocalistas que trabajan conmigo, cuyo instrumento es su cuerpo. Cuando tu cuerpo no funciona bien, se jode todo. Lo sabes siempre, pero cuando has de pasar por ello, tu nivel de respeto hacia quien lo hace regularmente crece drásticamente. Mi perspectiva ha cambiado y ahora estoy totalmente encendido y listo para matar. La gente no se lo espera. Debe haber mucho escéptico respecto a la dirección que está tomando la banda, pero vamos a ir a por ellos y ni siquiera nos van a ver venir”.

Has sido etiquetado como un tío difícil por tu grado de compromiso con la banda, lo fuerte de tus convicciones e ideas sobre la música y tu filosofía a la hora de llevar éste grupo adelante.

“Claro”.

¿Ha sido esto un cierto reto para Stu?

Stu: “No me preocupé demasiado. Cuando comenzamos a hablar, el quería que fuera creativo, que me implicara, que hiciera muchas cosas distintas en ésta banda. Creo que ese miedo se fue bastante rápido, el miedo a que no le gustara lo que tengo que aportar. Desde un primer momento apreció lo que traje a la banda y no me ha mostrado nada que no sea respeto hasta el momento. El sentimiento es mutuo. Nunca me ha mostrado demasiado dureza. Lo único que puedo decir es que sabe lo que quiere y que sabe como llegar hasta ello. Eso es muy importante cuando estas en una banda y mucha gente se lo toma de la manera que no es, dando lugar a comentar que eres un tío difícil y esto y lo otro. No es ser difícil. Sabes lo que quieres y te enfrentas a lo que haga falta para conseguir lo que quieres. Yo quizá le presentaba una idea y me decía “no, esto no es bueno, vuelve atrás y vuélvelo a hacer”. No se va a sentar conmigo para decirme lenta y pausadamente “¿sabes Stu? Creo que sería una buena idea cambiar esta parte para hacer aquello otro”. No. El dice “hay que hacer esto”, “hay que cambiar aquello” y va por faena. Si entiendes que las cosas son así, entiendes como es Jon”.

Los últimos meses han sido muy exigentes. Los ICED EARTH de Matt Barlow estaban actuando en los festivales europeos pero el disco grabado con Stu se estaba acabando de mezclar y producir en Estados Unidos. Eso implicaba que Jon tuviera que pasarse cada semana yendo y viniendo de Estados Unidos. ¿Intenso, eh?

Jon: “Este año ha sido muy intenso. Todo eso sucedió durante la grabación de las pistas básicas, lo que dio lugar a muchas sesiones repletas de jetlag. Pero pasamos por ello y lo hemos superado con méritos, creo.”

“Siempre he sido alguien exigente con los miembros de mi banda, pero no les pido nada que yo no haga. Yo tengo unos estándares bastante altos de trabajo. La presión que me echo encima es mil veces superior a la que les echo encima a ellos.”

Stu: “Eso me motivó. Verle volar cada dos por tres, yendo y viniendo y trabajando en el disco me hizo sentir vago. El tío es como una maquina, no para quieto.”

Jon: “Pero eso es lo que teníamos que hacer y lo hemos hecho. No puedo controlar muchas cosas. No puedo controlar lo que tu vas a escribir después de que hayamos terminado esta entrevista. No puedo controlar las ilusiones que la gente crea después de que yo le entregue el máster a la compañía discográfica. En ese punto, yo dejo de tener control sobre las cosas y los demás son quienes crean expectativas que quizá podré cumplir o no. La gente se basa en ilusiones, sobre lo que tratan las letras, sobre las ideas que hay tras las canciones…pero con lo que yo lidio en el día a día no es con ilusiones, sino con la realidad de ICED EARTH.  Estoy en primera línea de fuego cada día: cada llamada, cada decisión, cada parte del proceso creativo. Yo no tengo la perspectiva de los fans en base a las ilusiones que tienen más allá de lo que yo hago, es algo que no puedo controlar y de lo que no me debo preocupar”.

“Conozco mi reputación y en parte es bastante merecida. Puedo ser un tío difícil con el que lidiar, pero a menudo solo pasa cuando me he cansado de aguantar las tonterías de alguien. Yo siempre soy justo y honesto con la gente. Explico como van a ser las cosas. No les creo fantasías irreales. Pero espero poder empujar a esa persona al máximo de sus capacidades. Siempre he sido así con cada miembro. Si te fijas en los músicos que han pasado por la banda hasta la fecha, podrás ver que probablemente sus mejores interpretaciones las han hecho como miembros de ICED EARTH. Eso se puede debatir, pero creo que es la realidad.  Ya sea por la manera en que trabajo yo con ellos o por lo que Jim consigue sacar de ellos en el estudio… Jim tiende a trabajar aspectos muy específicos, como el pitch del vocalista, su sentido del tiempo y demás. Yo tiendo a centrarme en la actitud. Soy el tipo metalero, el tipo pasional de la ecuación de Jim y Jon. Yo soy el metalero y Jim es el musical. En ocasiones he de realizar compromisos, en ocasiones ha de hacerlos él, pero somos buenos a la hora de sacar las cosas de la gente”.

Stu ha co-compuesto muchas de las canciones, nueve en concreto. ¿En que consistió tu aportación?

Stu: “Jon hizo todos los arreglos, yo hice muchas de las letras y melodías de esas canciones. Los arreglos estaban hechos desde tiempo atrás. Recuerdo a Jon preguntándome sobre los arreglos, de todos modos, y eso que no soy el mejor arreglista del mundo. Pero recuerdo un par de ocasiones en las que me pidió mi opinión al respecto. Me decía ‘¿debería quitar esta parte?’ ‘¿debería añadir esa sección? Yo le daba mis opiniones”.

Todos tendemos a suavizarnos con el paso de los años. ¿Crees, Jon, que ahora tienes más delicadeza o incluso facilidad para considerar opiniones externas a la hora de hacer música?

Jon: “No, realmente. Cuando hubo oportunidad, siempre pedí opiniones. Seamos realistas: muy poca gente es compositora. Muy poca gente puede crear una canción, cada una de sus partes. Melodías, voces, ritmos…yo si, yo lo he hecho. Las mayores canciones del catálogo de ICED EARTH las he compuesto yo, ya sea “Gettysburgh”, “Travel in Stigya”, “Iced Earth” o la que sea. Son canciones que he creado yo solo, porque soy muy capaz. Eso no significa que no quiera un compañero compositivo. Matt compone muchas letras, ese siempre fue su punto fuerte. Las letras son un poema, han de fluir. Pero porque alguien sea músico no quiere decir que sea compositor. Son cosas distintas. Que puedan hacer letras o melodías no quiere decir que sean compositores completos. Componen partes de la canción, no canciones. Eso es co-componer. Pero tío, quiero que Stu esté involucrado porque es capaz y me quita mucha presión de encima. Cuando el saca sus melodías, disfruto. Tío, mis canciones son buenas, es fácil sacar melodías vocales muy buenas sobre ellas.”

“Un tipo como Hansi Kursch tiene mucha facilidad para sacar buenas melodías sobre mi música también. Cuando comparto música en el proyecto de DEMONS & WIZARDS es pasándole a Hansi las canciones que no me hablan vocalmente desde un buen principio, como puede ser un riff para el que no puedo imaginar una parte vocal. Hago que eso sea una demo de DEMONS & WIZARDS y se la envío a Hansi, porque juntos creamos nuestro Frankenstein particular, con mis riffs y sus voces. Siempre hay el toque de ICED EARTH / BLIND GUARDIAN pero DEMONS & WIZARDS son una entidad única.”

“Jim y yo nos solemos reír de la cantidad de posibilidades melódicas que hay en las canciones de ICED EARTH. Hay infinitas posibilidades y muy fácil sacar ideas de tu mente si tienes el talento. No todo el mundo puede, pero Stu puede y pienso que eso se escucha fácilmente en éste disco. Y me va muy bien porque así no tengo todo el peso en mis hombros. El arreglo da paso a la melodía vocal. Si el arreglo no es bueno, no va a haber una buena melodía vocal. No es algo matemático, pero suele ser el caso. Son cosas a tener en consideración. Muchas veces partimos del título o del tema de la canción. Intentamos crear la música a partir de ello y las melodías vocales son lo último. Pero hacemos que la música concuerde con el tema general de la canción. Lo demás es algo así como la guinda del pastel.”

 

Sergi Ramos (sergi@themetalcircus.com)