CHICKENFOOT (Michael Anthony): “Si estuviera en un barco con los hermanos Van Halen y David Lee Roth y tuviéramos que echar a una persona al mar para que el barco aguantara a flote…probablemente saltaría yo”.

Acaban de editar “III”, su segundo disco, y se han convertido en una de las pocas esperanzas del hard rock más festivo y básico. CHICKENFOOT es la banda de Michael Anthony, Sammy Hagar, Joe Satriani y Chad Smith (ahora sustituido temporalmente por Kenny Aronoff mientras Chad trabaja con RED HOT CHILI PEPPERS). Conectamos telefónicamente con el simpático bajista amante del Jack Daniels para que nos ilumine sobre la actualidad de la banda y los problemas internos de VAN HALEN.

En la última ocasión, no pudisteis venir a España con CHICKENFOOT por una enfermedad casual.

“Échale la culpa a Chad Smith. Fue su culpa, te lo aseguro (risas)”.

De hecho, toda la gira europea fue un éxito, salvo por el fiasco español. De hecho, el disco fue disco de oro en Estados Unidos y allí también tuvisteis un enorme éxito.

“Ha salido todo a pedir de boca. Definitivamente iremos a España en ésta próxima gira para tocar material de los dos discos. La cuestión fue que Chad se hizo daño y lo principal era dejarle tiempo para ponerse bien. Pero si, nos lo pasamos en grande en Europa y tuvimos una reacción muy positiva del público”.

Dado como está el mercado para muchas bandas de rock y hard rock más o menos clásicas ¿os sorprendió que CHICKENFOOT tuvieran una acogida tan cálida con un primer disco?

“Lo fue, hasta cierto punto. Queríamos probar a la gente que éramos una banda y no lo que en Estados Unidos suelen llamar un “supergrupo”. Como si hubiéramos puesto en marcha la banda solo para un disco y una gira y recoger todo el dinero y la atención de la prensa para luego irnos todos por nuestro camino. Por eso, cuando tocamos en directo no tocamos canciones de VAN HALEN ni RED HOT CHILI PEPPERS ni nada por el estilo. Lo que tocamos es CHICKENFOOT y punto. Queremos que la gente nos vea como una banda y no como algo casual y circunstancial”.

Dada la absurda cantidad de supergrupos que han existido hasta la fecha ¿fue complejo hacer entender al personal ese aspecto?

“La gente fue escéptica al principio, no te lo negaré. El hecho de que hayamos sacado segundo disco y de que vayamos a hacer otra gira es un motivo suficiente para que la gente deje de creer que somos un asunto de una sola noche. Somos una banda establecida. Vamos a girar mucho con éste disco, “III”. En la gira anterior teníamos muchos conflicto de agenda que lo complicaban todo, especialmente debido a Chad y sus compromisos con los RED HOT CHILI PEPPERS. No obstante, dado que en ésta ocasión los RHCP están de gira y Chad con ellos, desafortunadamente no podrá estar acompañándonos. Sin embargo, Kenny Aronoff se va a ocupar de ello.”

Cuando comenzasteis a preparar este disco y gira ya sabíais que el tema de Chad era una patata caliente porque el nuevo ciclo de los RHCP estaba planeando sobre su cabeza. ¿Grabó Chad todo el disco? ¿Hubo alguna parte que tuviera que ser grabada por otro baterista ya que Chad estaba ensayando con su otra banda o algo así?

“Todo el disco lo ha grabado Chad. Esa es una de las cosas que realmente quiero que queden claras: Chad es quien toca en el disco y era integral para CHICKENFOOT que así fuera. Tuvo que montárselo para poder encontrar el tiempo, pero lo logró. No tuvimos mucho tiempo para preparar y ensayar la música de este disco. Cuando nos metimos al estudio, comenzamos a grabar mientras estábamos componiendo los temas. No sabíamos cuanto tiempo íbamos a tener a Chad disponible, ni cuál iba a ser la ventana de oportunidad. Todo el mundo hizo sus deberes desde casa y cuando llegamos al estudio todos teníamos nuestras ideas ya muy claras”.

Es muy extraño, porque las bandas que trabajan a distancia hoy en día tienden a editar discos de sonido frio y mecánico, como si el disco se hubiera ensamblado en un laboratorio –cosa que en muchas ocasiones sucede. Sin embargo, “III” suena muy cercano, muy vacilón. ¿Cómo lo conseguisteis?

“Pienso que la mayoría de la culpa la tiene la química entre los miembros de la banda. Haber hecho ya un disco y haber salido de gira ha hecho que todos nos conozcamos mucho mejor en el estudio y en el escenario. Debo atribuir ese aspecto a la química de la banda. Cuando estamos en una habitación a solas, eso sucede”.

“No es que podamos pasarnos tres meses trabajando en la música tranquilamente desde un local de ensayo. De esta manera, lo que hacemos es muy espontáneo. En ocasiones escucho mis propias pistas de bajo después de grabar el disco y digo “diantres, no recordaba haber grabado así”. Es algo que juega a nuestro favor, todo en esta banda es muy fresco”.

Ni tu ni ninguno de los músicos involucrados en CHICKENFOOT tenéis la necesidad acuciante de hacer música y girar por motivos económicos. Sammy vendió un porcentaje de su marca de tequila hace unos años por 80 millones de dólares y realizó una lucrativa gira de reunión con VAN HALEN. Tu tienes tu marca de salsas y las rentas de todo lo realizado en VAN HALEN. Chad Smith está en una banda mainstream como los RED HOT CHILI PEPPERS y Joe Satriani tiene una longeva y muy exitosa carrera en solitario. Ese matiz, el de cuatro tíos relajados que hacen algo porque quieren, está muy presente en la música de CHICKENFOOT.

“Por eso nos unimos en primer lugar y por eso estamos tan comodos haciendo esto. No necesitamos el dinero porque ya hemos hecho muchas cosas en el pasado con nuestras respectivas bandas que nos ha servido para tener ahorros. Hacemos las cosas para pasarlo bien y tocar juntos. Cuando fuimos al estudio en la primera ocasión, no planeábamos grabar un disco. Queríamos improvisar y ver que salía de allí. Y rápidamente la cosa comenzó a tomar forma. La música sonaba tan bien que llamamos a Andy Johns para producirnos y lo siguiente que sabemos es que tenemos un disco en la calle y que nos vamos de gira por el mundo. Guste o no a la gente, hemos hecho esto para nosotros mismos, para pasarlo bien. Nos gusta la música que hacemos juntos.”

“En ésta ocasión llamamos a Mike Fraser, quien ha coproducido el disco con nosotros. Grabamos todo el disco en el estudio de Sammy Hagar, porque Sammy había actualizado el equipamiento de su estudio y decidimos aprovechar la oportunidad. No fue ni siquiera un trabajo. Éramos cuatro amigos pasando el rato y divirtiéndonos”.

¿Cómo soléis trabajar? ¿Trabajáis con una discográfica con un contrato normal y corriente o financiáis todo vosotros mismos y lo licenciáis al mejor postor en distintos territorios?

“Grabamos toda la música en primer lugar y luego nuestro manager habló con un par de compañías distintas para que propusieran ofertas. Lo hacemos así porque no sabemos que es lo que depara el futuro de la banda. Esta podría ser nuestra última gira, hasta donde yo se. Espero que no lo sea, pero nunca se sabe, porque todo el mundo tiene otras cosas que hacer en su carrera. Ahora esto se ha vuelto un gran compromiso, al que hemos de dedicar mucho tiempo. No queremos meternos en un contrato a largo plazo con una discográfica, realmente. Queremos ir disco a disco y explorar las opciones en cada momento”.

¿Dirías que eres el que tiene más tiempo que dedicar la banda?

“Aparentemente sería así. Sammy vendió la compañía de tequila y no necesita el dinero, la verdad. Joe está muy liado con su carrera en solitario, donde él manda y hace lo que quiere. Ahora que Chad ha tenido que volver a su otra banda, tenemos algo más de libertad porque era su agenda la que comprometía los planes de la banda. Tuvimos suerte de que pudiera trabajar en el disco. Cuando tenga un descanso siempre será bienvenido para tocar en la banda de nuevo”.

Todo el mundo quedó sorprendido por el éxito de CHICKENFOOT en su primer disco y, de golpe, te encuentras con un montón de supergrupos saliendo de debajo de las piedras: BLACK COUNTRY COMMUNION, THEM CROOKED VULTURES… No habéis inventado los supergrupos, pero habéis facilitado la aparición de muchos más.

“Lo que es divertido es que muchas de estas bandas como las que has mencionado probablemente han visto el éxito que hemos tenido y se han lanzado a ello. Pero lo que pasa es que no solo se trata de juntar a cuatro grandes músicos, sino de que esos músicos tengan una verdadera química cuando se juntan a tocar. No puedes forzarlo, es algo que sucede y punto. En CHICKENFOOT ese elemento ha estado presente desde el principio y es el motivo que nos mantiene unidos, más allá de la amistad que tenemos entre nosotros”.

El primer disco de la banda estaba más basado en jams, especialmente en lo que respecta a las estructuras de las canciones. Este “III” parece mejor construido. ¿Era la intención?

“Te acabas de responder la pregunta, realmente (risas). El primer disco salió de un montón de jams que hicimos en el estudio y eso iba a quedar patente en el resultado final. En “III” queríamos tener un sonido muy “de directo”. Todos grabamos juntos en el estudio, no ejecutamos las partes por separado y eso es una rareza hoy en día. El resultado es mucho más potente. Podemos hacer eso porque todos nos sentimos cómodos unos con otros en el estudio y muchas bandas no emplean el tiempo en hacer algo así. El primer disco fue todo un proceso de aprendizaje para nosotros y ahora estamos mucho más cómodos en el estudio. Todo el mundo ha tenido algo que aportar. El disco tiene un sonido más profundo y evolucionado”.

Las comparaciones con VAN HALEN siempre van a estar ahí, pero quiero llevarlo más allá. Las redes sociales juegan un importante papel en el esquema de CHICKENFOOT: desde la manera en que anunciáis vuestros planes, comunicáis o presentáis los avances sobre el disco o mantenéis a los fans informados. VAN HALEN siempre han sido una banda muy secreta mediáticamente: no hacen declaraciones, no están muy presentes en internet, no actualizan demasiado su página web y la especulación reina.

“Pero eso es algo que no sale de la banda. La tecnología está ahí y las puertas están abiertas de par en par. Mañana estoy haciendo una cosa desde mi casa para Google+, que es algo bastante nuevo. Lo que haré será hablar con gente de todo el mundo a través de mi ordenador. La gente puede preguntar cosas y pasar un rato conmigo en internet. Ya hicimos eso mientras grabábamos el disco y tuvo muy buen resultado. Es una herramienta más para comunicarse con los fans. No tengo la menor idea de porqué VAN HALEN no hace estas cosas, pero en CHICKENFOOT creemos que hay que tener a los fans informados y facilitar el contacto entre ellos y los músicos. Cuando yo estaba creciendo y escuchando bandas, yo quería saber todo sobre la banda e informarme. Si no les informas, se olvidan de ti y se preocupan de otra banda. Eso es así. He de reconocer el merito al equipo que trabaja con nosotros, entre webmasters y community managers, porque siempre andan proponiéndonos ideas. En ocasiones parecen ideas estúpidas o innecesarias y mira, siempre acaban siendo divertidas. Es el tipo de banda que somos. No nos da miedo atrevernos con cualquier cosa. Además de los fans que hemos conseguido a lo largo de los años en nuestras respectivas carreras, también hay un segmento de gente que nos escucha sin conocer quien somos, es decir, somos CHICKENFOOT, no la banda del tío que estaba en VAN HALEN y del tío aquel de los RED HOT CHILI PEPPERS, ya me entiendes.”

Recientemente estaba releyendo la entrevista que realizaste hace unos años con la revista japonesa “Burrn” sobre tus años en VAN HALEN y toda la situación actual de la banda.

“Si, en esa entrevista dije muchas cosas y me abrí mucho sobre los conflictos de la banda”.

Cuando releía la entrevista, sentí cierta tristeza por la manera en que los hermanos Van Halen se habían comportado contigo. No obstante, ahora tu pareces estar en un lugar mucho mejor como persona mientras que ellos siguen en su particular caótico universo. ¿Te sientes aliviado al no tener que lidiar con esa banda nunca más?

“En este punto de mi vida no quiero más dramas. Quiero divertirme y estar con gente positiva. CHICKENFOOT me hizo darme cuenta de porqué me metí en este negocio y fue por el amor a la música, porque me gusta componer y tocar. Estar en una banda durante muchos años es como estar en cualquier trabajo profesional. Los discos venden, los conciertos agotan entradas y te conviertes en una maquinaria muy bien engrasada y todo funciona bien. Pero llega un punto en el que todo se vuelve tremendamente empresarial y pierdes el norte de porqué comenzaste a hacer esto en primer lugar. Ahora he vuelto a los orígenes en ese sentido. La razón principal por la que hemos montado CHICKENFOOT es porque queremos tocar música sin compromisos. Además, poder tocar con gente como Chad y Joe es fantástico. He podido tocar con MUY buenos guitarristas a lo largo de mi carrera y Joe lo lleva todo a otro nivel. Nunca dejo de aprender con ellos”.

La palabra clave es “drama”. ¿Cuál es el problema de VAN HALEN? ¿Porqué la banda tiene una nube negra sobre su cabeza desde hace quince años?

“Hablo por hablar…pero te diría que es por la personalidad de los miembros de la banda. No se como  estarán chocando esas personalidades en la actualidad, pero todo el asunto es triste. Los fans llevan pidiendo música nueva mucho tiempo. Me meto en internet y leo lo que los fans dicen. Muchos de los fans a muerte de VAN HALEN quizá no disfrutan de CHICKENFOOT en concreto, pero saben que nos esforzamos en comunicarnos con ellos y hacerles saber lo que estamos realizando. Mantenerlo todo en secreto no es la manera de generar interés.”

“Te diría que el problema reside en las personalidades de la banda. ¿Cuánto tiempo hace que tendrían que haber editado un disco?”

Diez años?

“Algo así (risas).Y si no van a hacer nada, al menos que se lo hagan saber a los fans para que no estén esperando algo que quizá nunca llega. Como dices, estoy por encima de eso ya. Estoy concentrado en CHICKENFOOT y si alguna vez volviera a tocar música con VAN HALEN sería porque todos los miembros volvemos a estar teniendo una buena relación mutua y nos entendemos. Nunca volvería a la banda solo por el dinero. Nunca quiero salir a tocar ante los fans y engañarles.”

Probaste ese punto en la gira de reunión del año 2004, cuando convenciste a los hermanos Van Halen para tocar en la gira a cambio de un importante recorte en tus condiciones económicas y otras rebajas contractuales.

“Justo… regalé mucho en esa gira. Quería tocar para los fans y quería que, si esa era la última gira de VAN HALEN, yo pudiera ser parte de ella. Desafortunadamente, la gira acabó de manera muy mediocre. Deberíamos haber girado por todo el mundo al menos un par de veces y no hubo nada de eso. Después de ochenta shows tuvimos que dejarlo estar”.

VAN HALEN en los 70 y 80 eran una banda positiva, musical y letrísticamente. Era una banda que te daba ganas de irte de fiesta. ¿Crees que esa premisa se mantiene en CHICKENFOOT? Ya sabes, el rollo party-rock…

“Digamos que seguimos haciendo party-rock pero que hemos madurado con estilo (risas). No puedo estar pretendiendo que sigo teniendo 24 años toda la vida. Vamos, no bebo el mismo Jack Daniels ahora que cuando tenía 24 años. Estaría muerto en ese caso (risas). Tocamos lo que tenemos en el corazón, que es lo que escuchábamos cuando crecíamos: CREAM, THE WHO, LED ZEPPELIN, Jimi Hendrix…son las bandas que marcaron nuestros primeros años y siguen permeando en nuestra música. Te puedes volver profundo y en el nuevo disco tenemos algunas baladas, si, pero la música debe ser divertida”.

Imagina por un momento que estas en un barco y tienes acompañándote a los dos hermanos Van Halen y David Lee Roth. Solo tres  personas pueden quedarse en el barco para evitar que se hunda. ¿A quien echarías al agua?

“Oh Dios…me acabas de joder vivo. Solo nosotros cuatro en el barco no?”

Exacto.

“¿Y uno ha de irse, no?”

Justamente.

“Me lo pones difícil. Déjame que diga algo antes que nada: en todo mi tiempo en VAN HALEN lo pasé bien. No me arrepiento de nada y algunas cosas malas pasaron entre nosotros como en cualquier matrimonio. Siempre recuerdo los tiempos en VAN HALEN con mucho cariño. Éramos una de las bandas fiesteras originales. Pero te diría que echaría al mar a Eddie Van Halen. Solo porque es el que mueve las cuerdas en muchas cosas y toma muchas malas decisiones que afectan a la banda. Tiene muchos demonios interiores. Le deseo lo mejor y espero que esté bien. Pero espera, ahora que lo pienso, quizá sería mejor que saltara yo del barco. ¿Qué te parece? Me lanzaría a mi mismo. Si, sin duda”.

En cierta manera lo has hecho con CHICKENFOOT.

“Me caí del barco y me subí a un yate, por así decirlo. Me lo estoy pasando bien ahora y estoy en un mejor lugar en mi propia vida. Y sobretodo, quiero asegurarte que vamos a volver a España y espero que la gente venga a vernos.”

¿Tienes alguna idea de cuando será la gira europea?

“Vamos a hacer unos pocos shows en Enero para promocionar el disco, lo que será el ‘Road Test Tour’. Probablemente en abril y mayo saldremos a hacer la gira como Dios manda. Espero que podamos tocar en los festivales europeos y en algunos recintos cerrados también.”

¿Vas a ver a Kenny Aronoff esta semana?

“Si, hemos quedado para ensayar esta semana, el día 20. Es un baterista impresionante”.

Dale recuerdos de Sergi El de la hostia en moto, que imagino que lo recordará más fácilmente.

“(Risas) Vale, se lo diré. Oye, ¿te gusta el fichaje de Kenny para CHICKENFOOT?”

Si, de hecho es lo mejor que podías haber hecho para sustituir a Chad. Tiene el mismo enfoque pesado y profundo a la hora de tocar que Chad, el cual está a su vez influenciado por John Bonham. Es el tío ideal para el puesto, estoy seguro.

“Oh, me alegra que veas ese factor. Ha sido uno de los determinantes. Podríamos haber elegido a otros bateristas, pero necesitábamos a alguien con una gran personalidad y Kenny encaja mucho con nosotros. Ya lo verás cuando vayamos a tocar a tu país”.

Digo…no habrá peleas por un peine en esa banda no?

“Que cabrón…no, la verdad es que no (risas).”.