Angelus Apatrida: “Intentamos hacer un cicle-pit en Japón, y el público se dio un abrazo”
El décimo aniversario de "Give 'em War", el disco que llevó a Angelus Apatrida a otro nivel, es un motivo tan bueno como cualquier otro para que el grupo salga de gira nuevamente (aunque nunca han dejado de estar de gira, de hecho). Les entrevistamos en Zaragoza antes de su reciente concierto en la capital maña.
Nuestros thrashers más internacionales, Angelus Apatrida, se encuentran celebrando una gira conmemorativa de su segundo disco, Give’Em War, que han reeditado por su 10º aniversario. Los de Albacete sólo realizarán cuatro conciertos para promocionar este concierto, y The Metal Circus aprovechó su primera parada, en Zaragoza, para charlar con su guitarrista David Álvarez acerca de este aniversario y la actualidad de la banda.
Hola, David. Esta entrevista la estamos realizando en Zaragoza, antes del primer concierto de vuestra gira especial por el 10º aniversario de Gim’em War. Esta es la confirmación de que este disco es ya un clásico del metal español por derecho propio, ¿no te parece?
Bueno, yo personalmente no soy muy objetivo con mi música, pero espero que así lo sea.
De momento sólo hay confirmados cuatro conciertos. ¿Anunciaréis más?
En principio no hay idea de hacer más, porque ya hay preparadas otras cosas. Pero, la verdad tampoco te voy a decir que no, porque tocar este setlist es diferente, es algo nuevo para la gente y nosotros estamos muy motivados.
Sorprende que se hayan quedado fuera Madrid y Barcelona.
¡Ya, pero cuando tocamos en Madrid o Barcelona es al revés! No podemos contentar a todo el mundo pero ojalá podamos ir pronto.
¿Vais a tocar el disco entero? La entrevista se publicará después de la gira, así que no haremos spoiler.
Algo vamos a hacer… No te lo puedo decir exactamente pero algo tenemos preparado. No va a ser en plan tocar el disco en orden, pero algo haremos… Creo que estos conciertos que tocan el disco en orden, de la 1 a la 10 le quitan algo de adrenalina al bolo. Está todo mezcladito.
La reedición de Give’em war, aunque bien recibida, nos ha pillado un poco por sorpresa, porque hace poco ya lo reeditasteis en una edición conjunta con vuestro primer disco. ¿No quedasteis entonces del todo satisfechos?
Sí, pero aquello era un poco como un recopilatorio de los primeros años. Para nosotros esos dos primeros discos significaron mucho. Y ahora lo hemos reeditado en vinilo, hemos renovado el arte… Si te gusta coleccionar estas cosas, es un buen disco.
Además, sois una banda con muchos lanzamientos. Discos, reediciones, singles, ep’s compartidos… ¿cómo se entiende eso en un momento en el que la venta de discos apenas existe?
Sabemos que no podemos alcanzar cierto nivel con las ventas de discos, pero también son buenas excusas para volver a la carretera. Y con la de Give’em War concretamente, nos pareció una buena idea reeditarlo así por el 10º aniversario, es un disco muy especial para nosotros, y por lo que dicen también lo es para nuestros fans.
¿Fui idea vuestra u os lo sugirió la discográfica?
Fue idea nuestra, por supuesto. Queríamos hacer algo especial.
¿Cabe esperar algún otro tipo de reedición? Elprimer disco en vinilo, por ejemplo, que es el único ue falta en este formato…
Bueno, ahora mismo no tenemos más planes en este sentido. Queremos terminar de editar el DVD, habrá que empezar a pensar en el nuevo disco, que yo creo que ya toca. Aún no hay fecha ni objetivos, pero ya estamos trabajando.
Creo que ahora es un buen momento para hacer memoria y echar la vista atrás, y recordar cómo eran los Angelus Apatrida de hace 10 años. ¿Recuerdas cómo compusisteis las canciones de Give’em War, la entrada al estudio, etc.?
Sí, salíamos de una época en la que desde la fundación de la banda estábamos tocando las canciones del primer disco. Aquel tardamos mucho en grabarlo, tuvimos varios problemas hasta que por fin pudimos tener nuestro primer disco, pero aún así había que darle un poco como un lavado de cara. A pesar de que aquel material era nuevo para mucha gente, para nosotros era muy antiguo, llevábamos mucho tiempo con él. Y queríamos darnos una oportunidad con nuevas composiciones. La verdad es que recuerdo que fue todo muy rápido: lo compusimos muy rápido, estábamos muy inspirados y teníamos muchísimas ganas. A pesar de los tropiezos que dimos con nuestro primer disco estábamos superanimados así que dijimos “¡palante!”.
Ahora os dedicáis profesionalmente a la música. ¿Qué hacíais entonces?
Antes cada uno tenía su curro y demás… Yo ya llevo muchísimo tiempo dando clases de guitarra e intentando hacer alguna cosilla. Antes trabajaba en algunas fábricas del polígono industrial de Albacete. Pero sobre todo me acuerdo de que invertíamos todos nuestros sueldos en la banda: instrumentos, los primeros merchan, los primeros kilómetros… costaba pero lo hacíamos con una ilusión tremenda. ¡Y lo seguimos haciendo hoy! ¡Lo bueno es que no tengo que volver a la fábrica!
Para hacernos una idea de lo que es dedicarse profesionalmente a la música: ¿Cuántos conciertos realiza al año una banda como Angelus Apatrida? ¿Cuántos de ellos en España?
En España lo único que no te puedes plantear es hacer conciertos entresemana, no es habitual. Y llega un punto en que la Península tiene unos límites también y no puedes estar quemando todos los sitios… Ahora estamos un poco más parados, pero el año pasado además de la gira del “Hidden Evolution” hicimos dos giras europeas, estuvimos en Sudamérica, Asia… ese año hicimos tranquilamente entre 100 y 150 conciertos.
Tenéis mucho tirón fuera, y creo que habéis tocado en todos continentes.
Sí… cuando pusimos el pie en Australia nuestro mánager, Paco, dijo “¡eh, ya hemos tocado en todos los continentes!”, y fue como “buah, qué brutal”. Pero también recuerdo que estábamos en la recta final de la gira, y lo que queríamos era ya volver a casa, estábamos muy cansados… ¡Pero, vamos, es una pasada! Hace 10 años, justamente cuando sacamos “Give’em War”, ni en el mejor de nuestras metas hubiéramos imaginado esta historia.
¿Qué países son donde tenéis mayor tirada?
Hay de todo, pero siempre hemos notado que en Alemania, y en Europa en general, funcionamos bien; en Sudamérica también muy bien; hemos visitado dos veces Japón y la recepción ha sido brutal…
¿Cómo es un concierto en Japón?
¡Muy curioso! Lo de las mascarillas me llamó mucho la atención, porque la gente las llevaba todo el tiempo, por el tema de las enfermedades; pero aún me chocaba más ver a la gente vestida de traje, de oficina. Ellos mismos nos contaban que allí trabajan mucho, y no van a casa, se preparan y van al bolo. Van directamente de la oficina, e incluso volver a ella después del bolo.
¿Hacían pogos o Walls of Death?
¡Qué va! Y si lo hacen sería muy ordenado. Sí que recuerdo que una vez intentamos hacer uno, Guillermo empezó a hacer señas para hacer un circle-pit, y el público se dieron un abrazo. No lo entendían pero nos hizo mucha gracia. Fue cojonudísimo.
La reedición de Gim’em war se ha adelantado al lanzamiento de vuestro disco en directo. ¿En qué estado se encuentra? ¿Puedes darnos alguna fecha?
No hay fecha. Lo estamos editando nosotros por nuestra cuenta y como al final nos hemos enrolado en conciertos de verano, luego hemos tenido que hacer ensayos para esta gira, porque había temas que hacía mucho que no tocábamos… Pero espero que a finales de este año pueda estar ya.
Supongo que aquellas dos noches fueron inolvidables. ¿Hay algún momento que tengas grabado en especial?
Sí. Nosotros no nos podemos quejar nunca de nuestro público, pero la reacción del público el primer día en Madrid, desde el principio… Sabían que iba a ser un concierto especial, que iba a ser grabado, y que había que darlo todo. Y al día siguiente en Barcelona, igual. Fueron dos noches, de verdad, una auténtica pasada.
¿Cuál será el siguiente paso de Angelus Apatrida? ¿Una gira para presentar el directo, un nuevo disco de estudio?
Lo correcto sería ir ya a por el nuevo disco. Pero no te lo puedo asegurar.
¿Tenéis algo avanzado?
Sí, hay cosas. Ya estamos trabajando en ideas pero no tenemos aún fechas. Queremos tomarlo con tranquilidad. Un nuevo disco, para todas las bandas, es siempre otro paso más, que se va a quedar ahí para toda la vida, entonces lo último que deseas es hacerlo corriendo.
David, todos los años apareces en los ránkings como mejor guitarrista del país. Imagino que en todas profesiones, vives en un aprendizaje constante. ¿Qué haces para mantener el nivel y seguir mejorando cada día?
Bueno, yo creo que eso es muy exagerado…
¡Pero apareces en los ránkings!
¡Señores, lávense los oídos! Bueno, ilusiona muchísimo que la gente valore tu trabajo. Mi vida es la música, estoy todo el día tocando la guitarra. Y soy muy muy poco conformista. Siempre estoy retándome a mí mismo como músico e intentando mejorar. Creo que ese tiene que ser siempre el paso a seguir avanzando. Cuando sientas que ya eres bueno, si llegas a sentir eso, yo creo que se te está apagando la mecha, y el gusanillo de la música. ¡Y muchas gracias a quien me haya votado!
Y en tu ránking de guitarristas, ¿a quiénes pondrías? ¡Vamos a hacer nacional e internacional!
De nacionales, una de mis referencias siempre ha sido Ekaitz Garmendia, de Legen Beltza. Y cuando tuve el accidente no tuve duda en llamarle porque sabía que era un tío con el que se podía hacer las cosas y que iba a dar la talla. Realmente hay mucho nivel. También del País Vasco se me ocurre Borja Mintegiaga, que ahora toca en Lamprea, y en Barcelona está Jordi Foraster, que fue guitarrista de DragonSlayer. Los tres primeros de aquí que se me ocurren son esos. Y de internacionales la pelea estaría siempre entre Eddie Van Halen y Dimebag Darrell, son los guitarristas que más me han influido. Se me ocurren muchísimos más, pero en mi top siempre estarían ellos.
En el concierto de hoy compartís cartel con otros monstruos de la escena como Vita Imana. ¿Los sigues, qué te parecen como banda?
Sí, claro, claro. Los conocemos desde hace un montón de años, y ver que también han hecho su camino, que han ascendido… no te queda otra que alegrarte. Creo que han cambiado mucho las cosas en este país, y que hay muchos grupos con mucha calidad, entre ellos Vita Imana.
Te voy a pedir que te mojes (que sepas que luego les preguntaré lo mismo a ellos): ¿Cuál es tu disco favorito de Vita Imana?
El último aún no lo he escuchado tanto, pero “Oceanidae” me gustó muchísimo. Me gustó especialmente el sonido, creo que está muy bien mezclado y masterizado.
La última: ¿Por qué “Davish”? ¿De dónde viene el apodo?
No sé, tío… No es por nada en especial. ¡Me llamaban así y así se quedó! ¡Algún día debería madurar y cambiar el nombre en el Facebook!
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