The Night Flight Orchestra: Sometimes The World Ain’t Enough

'Sometimes The World Ain't Enought' es el cuarto disco de estudio de The Night Flight Orchestra. Verá la luz el próximo 29 de junio con doce temas impregnados de mucho hardrock y rock de los setenta y ochenta.

No sé a ti. Pero a mi me encanta cuando los músicos muestran cada faceta de si mismos, se desetiquetan y van a por todas con un proyecto totalmente diferente a lo que han hecho hasta el momento. Este es el caso de Bjorn Strid y The Night Flight Orchestra, una banda con una propuesta elaborada sobre una base muy fuerte de hardrock de los ochenta con órganos rítmicos, guitarras alegres y estribillos pegadizos, formada por músicos que han tocado en otras bandas como Soilwork o Arch Enemy.

Curiosa mezcla en The Night Flight Orchestra

The Night Flight Orchestra es un proyecto llevado a cabo por músicos muy diferentes con pasados y presentes musicales muy diferentes también. Se trata de una curiosa mezcla de fanáticos de la música ochentera y el hardrock que han buscado esta experiencia en común para completar sus espectro, corazones y carreras.

Bjorn Strid, por ejemplo, es uno de los vocalistas de death metal melódico más célebres y trabaja en paralelo con Soilwork. Ambas bandas tienen igual importancia para él, a pesar de ser tan diferentes. El bajo corre a cargo de Sharlee D’Angelo que ha trabajado además con Arch Enemy o King Diamond. D’Angelo junto con Strid y David Andersson ha encontrado en The Night Flight Orchestra, la banda sonora de su vida recogiendo influencias de Toto, Abba o Foreigner ¿Curioso eh?

Teniendo toda esta información bajo la manga, podemos entender qué es esta banda, qué buscan y qué podemos esperar de ‘Sometimes The World Ain’t Enough’. Con este álbum, del cual Arya Blues os da todos los detalles, los suecos pretenden recuperar el sonido que habían perdido con su trabajo anterior ‘Amber Galactic’ que rozaba más el heavy metal que el hardrock ¡Y lo han conseguido!

¡Vámonos de viaje!

‘Sometimes The World Ain’t Enough’ es el hilo musical de un Mustang del 69 descapotable en la Costa Oeste de EE.UU el año que se estrenó Star Wars Episodio V, Jack Nicholson rompía con el hacha la puerta del baño o Robert De Niro era más Toro que padre de ella. Pocos años quedaban para el estreno de Regreso Al Futuro y un sin fin de películas cuya banda sonora forma parte ya de nuestra cultura popular.

«This Time» entre sintetizadores de apertura y órganos más bien nórdicos ¡Pero no te equivoques! En menos de un minuto, rompe con estribillos fuertes y algún que otro gorgorito que convierte el tema en el opening de una serie de televisión como fueron los Power Rangers. Además, de un solo de piano que acaba en solo de guitarra muy Toto.

Conducimos hasta la Costa Este «Turn To Miami». Esta sí, comienza directamente con sintetizadores muy yankies que derivan en un órgano totalmente influenciado por grupos como Génesis. También se vislumbran pinceladas a los Kiss del álbum Crazy Nights. Incluso, la voz podría recordar en pequeñas cantidades a los Caballeros al Servicio de Satán. Le sigue la composición más funky de ‘Sometimes The World Ain’t Enough’, «Paralyzed», mucho las 70’s que la mayor parte de la lista de tracks.

«Sometimes The World Ain’t Enough» da título a este cuatro álbum. Si le das al play durante tres segundos ¿A qué te suena? A «Runaway» de Bon Jovi, aunque en seguida se torna en ABBA para volver a un hardrock americano hasta el estribillo de nuevo pop y nórdico. Los condimentos de Toto, Meatloaf o Def Leppard construyen «Moments Of Thunder», que podría sonar perfectamente en cualquier prom donde el primer beso crea un huracán de momentos inolvidables.

Llegando al ecuador de esta joya, abre «Speedwagon», la canción con uno de mis estribillos favoritos (si le importa a alguien). Tiene lo necesario para soñar y viajar a un pasado cercano donde todo parecía posible. Un chorus pegadizo, un tono power, una batería bailarina, un órgano movidito y un solo cantable.

Sin duda finales de los ’70 y principios de los ’80

Las baladas de los ochenta nunca son tristes. Aunque las letras te envuelvan de melancolía, los ritmos no dejan que te vengas a bajo en ningún momento. Esto ocurre con «Lovers In The Rain», un buen homenaje a canciones como «I Want To Know What Love Is» de Foreigner o «Head over Heels» de Tears for Fears con toques de «Is This Love» de Whitesnake.

¡De nuevo ocurre! Los primeros segundos de «Can’t Be That Bad» suenan a los más puros Def Leppard, para después mostrar un toque más pop. Si tienes un mal día ¡Apunta! Porque esta es la canción con la que superarás la desesperación. Brochazos más electrónicos llegan con «Pretty Thing Closing In». Volvemos al disco. Junto con «Barcelona», sentimos aquí a los grandísimos Bee Gees y de nuevo a los suecos ABBA. Son quizá las canciones más setenteras de ‘Sometimes The World Ain’t Enough’ (The Night Flight Orchestra).

«Winged And Serpentine» deja de lado los años setenta, para volver los primeros ochenta ¡Menos mal! El título ya deja caer de qué va a ir esto. Yo no puedo evitar imaginarme una habitación en una fiesta pijama de chicas donde antes se cantaba Steve Nicks y ahora «Winged And Serpentine». Para cerrar este recopilatorio de homenajes continuos y amor por una época pasada llega «The Last Of The Independent Romantics» ¡Con 9:17 minutos de música sin parar! Un cierre perfecto para resumir cada una de las influencias de The Night Flight Orchestra – Sometimes The World Ain’t Enough.