Banda de “emo” que dice no serlo conquista Inglaterra y Estados Unidos, se hace famosa en todo el mundo y expande su imagen allá donde va. Con esa pequeña reseña podríamos definir a grandes rasgos a MY CHEMICAL ROMANCE. Y es que el estratosférico éxito de estos cinco chicos de New Jersey no ha pasado desapercibido para la mass media de todo el planeta. Labrar una carrera tan rápidamente es lo que tiene: el nivel de exigencia es atroz y tienes que estar a la última en todo.

Es por eso que estos chicos, o bien aconsejados por su compañía y departamento de marketing; o bien porque son amantes de las excentricidades, presentaron este “The Black Parade” en el Hammersmith londinense con un séquito de encapuchados caracterizados para el particular desfile “oscuro” de MY CHEMICAL ROMANCE. ¿Tiene esto algo de musical? Pues no. Pero así funcionan las cosas con esta clase de bandas apoyadas por un aparato tan potente de mercadotecnia. Indudablemente el combo americano artífice de sus propias composiciones, que podrán ser mejores o peores; pero es indudable que la música en estos casos, va acompañada de una importante componente comercial que se basa en las campañas llamativas, en la estética y en la actitud de los propios componentes del grupo. 

Una generación que ha vivido al amparo de la escena de hardcore melódico de bandas como MILLENCOLIN, LAGWAGON o NOFX y que vio cómo el relevo lo tomaban formaciones como BLINK 182, SUM 41 o SIMPLE PLAN para dar paso a la eclosión del movimiento “emo” de bandas como MY CHEMICAL ROMANCE. Bien es cierto que nadie tiene la culpa de que el pintauñas negro, el rimel y los leotardos bicolores puedan adquirirse en cualquier tienda mínimamente equipada. Tampoco es motivo de crítica el que un “grupo social” se haga con estos elementos como insignia de “algo” que no acaba de tener una base sólida. Pero en cualquier caso, la evidencia es la evidencia, y si una apuesta musical es floja, poco original y empalagosa hasta límites insospechados, hay que decirlo. Y este es el caso de MY CHEMICAL ROMANCE. No se les puede achacar nada en el aspecto de producción, medios y calidad final del producto. Pero donde flaquea y hace aguas es en la propia definición musical.  

Sin embargo, lo que realmente produce un picor y malestar irremediable es el hecho de que se les compare con bandas como THE CURE, MISFITS, MORRISSEY o la banda de este último, THE SIMITHS. La base es rock, acelerado, melódico por momentos (los más) y rápido en otras ocasiones (las menos); todo ello aderezado con unas gotas de pop con regustillo británico y cierto toque lejano a FRANZ FERDINAND, encubiertos con partes a lo MAD CADDIES y demás formaciones de hardcore/punk melódico. 

Voces agudas, coros de cara a la galería y ciertos guiños de perversidad son lo que nos vende MY CHEMICAL ROMANCE en este “The Black Parade”.

Como si de un carrusel se tratase, encontramos temas como “Mama”. Otro punto a revisar…títulos como este, “Teenagers” o “I Don´t Love You” y sus respectivas letras no acaban de dar la imagen de consistencia que una banda persigue si pretende mantenerse en el candelero más de cinco o seis años.  

Ni que decir tiene que la duración de los temas no supera en su mayoría los tres minutos y que cada tema es “de su padre y de su madre”. Del tono baladístico de “Cancer” se puede pasar a la velocidad de “House Of Wolves” en cuestión de segundos. Puede que ahí resida otra de las claves del éxito, pese a ser modelos repetidos hasta la saciedad. 

En definitiva, un álbum con catorce temas para espíritus con poca exigencia y que tratan de encontrar música divertida de una forma rápida y accesible.

Alejandro Pérez

Grupo:My Chemical Romance

Discográfica:Warner / Reprise

Puntuación:6.2

Canciones:

  1. The End
  2. Dead!
  3. This Is How I Disappear
  4. The Sharpest Lives
  5. Welcome To The Black Parade
  6. I Don’t Love You
  7. House Of Wolves
  8. Cancer
  9. Mama
  10. Sleep
  11. Teenagers
  12. Disenchanted
  13. Famous Last Words
  14. Untitled Track (Bonus)

Año:2006