El segundo album de la joven banda de Pennsylvania sigue la estela de su trabajo de presentación, con un Metal Progresivo fresco y moderno, con tintes Metalcore. Intentando sacudirse la coletilla de "la banda del hijo de Mike Portnoy" se han atrevido con la auto-producción.

El segundo album de la joven banda de Pennsylvania sigue la estela de su trabajo de presentación, con un Metal Progresivo fresco y moderno, con tintes Metalcore. Esta vez se han atrevido con la auto-producción buscando un sonido duro, seco y, a la vez limpio. También incorporan a la formación a un nuevo guitarra, Derrick Schneider, substituyendo a su predecessor Ryland Holland, que dejó la banda para asistir a la Berklee College Of Music. Después de su álbum de debut, “A light In the Dark” (2015) intentan sacarse la coletilla de “la banda de Max Portnoy, hijo de Mike Portnoy” mostrando un fleco más innovador dentro del género. No obstante, el talento que demuestra a su corta de edad (apenas 17 años) y el padrino que tiene son el reclamo para darles una escucha.

La banda ha rodado abriendo los shows de Haken y también se anuncia como banda de apoyo de (Oh, sorpresa!) Mike Portnoy’s SHATTERED FORTRESS . Mientras “maduran” como artistas hacen trabajos de una sorprendente solidez, dado que varios de ellos comparten su tiempo de ensayos y grabaciones con la escuela.

El tema de obertura “13” es toda una declaración de principios en 50 segundos. Compagina la guitarra sobredistorsionada con la delicada harmonía del piano y nos lanza a “Answer Me”, un prog-core asequible con intervalos de voces claras y rasgadas propias del género con la incorporación del piano como nota distintiva.

Con “The Apple”, Portnoy, intenta denunciar, con cierto sentido del humor, las críticas que reciben sobre la relación “padre e hijo” con el leit-motiv que las manzanas no caen lejos del árbol, lo que, en nuestra lengua, vendría a ser “de tal palo, tal astilla”.

A “Beg”, uno de los cortes mas rudos y directos, le sigue “Alone” con el piano nos introduce a un tema lento y oscuro, con variaciones más progresivas, pasajes con un toque de humor y duelos de solos teclado/guitarra.

A falta de un tema para completar el álbum a Thomas Cuce, principal compositor y letrista, se le ocurrió abordar la recien estrenada versión de King Kong para escribir “Kek”. El tema alarga pasajes innecesariamente, dura en exceso, parece que buscando encajar en la fórmula típica del prog. Quizás le falta un poco más de cariño en la producción para acabar de amoldar las ideas expuestas, pues los cambios no acaban de encajar y el tratamiento de las diferentes texturas que aportan el teclado y la guitarra no convence.

“Clarity” y “Pause” tienen estribillos más melodiosos y la duración los hace más asequibles. El piano de “Isolation” sirve de obertura a “Denial” un tema más metal-core. En el tema final, “The Wanderer”, de cerca de 20 minutos (que como su duración nos indica es el más prog-metal del disco y su pieza clave) se nota un esmero tanto en la composición, variaciones, tempos y pasajes (incluyendo algun fraseo surfero bien insertado) que levanta la valoración de la banda y del disco.

En definitiva, el álbum empieza y acaba bien, pero carece de la mano de un productor, como tuvieron en su primer trabajo, que les permitiera dar el empaque necesario al conjunto, pulir desajustes en los cambios y nivelar mejor cada instrumento. Las ganas de mostrar de lo que pueden hacer los han precipitado a entregar un producto excesivamente crudo pero nos muestra un grupo valiente y capaz.

Grupo:Next To None

Discográfica:InsideOut

Puntuación:7

Canciones:

  1. 13
  2. Answer Me
  3. The Apple
  4. Beg
  5. Alone
  6. Kek
  7. Clarity
  8. Pause
  9. Mr. Mime
  10. Isolation
  11. Denial
  12. The Wanderer

Año:2017-07-07

Votación de los lectores:6