Desde que descubriera a esta banda hace unos pocos años no dejan de sorprenderme
lanzamiento tras lanzamiento. Si dijera que hoy por hoy OPETH son quizá la banda
más original e innovadora dentro del anclado panorama del metal “extremo” me
quedaría corto, OPETH son mucho más que todo eso.

Elegancia, personalidad, contraste, calidad, intromisión, brutalidad, melodía,
disonancia…¿ Cuantos adjetivos son extendibles a la banda que forman estos
4 genios de la música contemporánea? Más de los que soy capaz de imaginar.

En los tiempos que corren donde el 90 % de las bandas no son más que refritos
baratos de quinta regional que se dedican a fusilar a rajatabla los patrones
establecidos por los 4 grandes de cada género, OPETH han sabido crear un estilo
único y reconocible a primera escucha, ¿”Death metal” sofisticado y/o progresivo?
Sin duda.

La grandeza de OPETH está sobradamente contrastada, sin embargo creo yo nunca
serán una banda “mainstream” o dada a satisfacer los gustos de la gran masa,
su propuesta no es fácil de digerir a primera instancia, está claro que poniendo
a manos de un heavy estereotipado un disco de STRATOVARIUS y un disco de OPETH
a su lado, el de los finlandeses tiene todas las de ganar. OPETH no poseen melodías
de villancico asimilables a la primera escucha, ni estribillos ultra melódicos
repetidos hasta la saciedad que se te meten en la cabeza sin tú quererlo, no,
¿Y eso es bueno o malo? Pues la verdad, a estas alturas ni lo sé ni me importa,
cada cual con sus gustos y todos felices.

Los temas de OPETH a priori pueden dejarte un poco descolocado; si eres un
fan del metal extremo te costará asimilar sus flirteos con el rock sinfónico
de unos CAMEL, YES, RUSH… Y si por el contrario te va toda la movida sinfónica
de los 70 los alaridos de Michael Akerfeldt pueden descolocarte por completo.
Esto, a fin de cuentas, más que un vulgar atrevimiento es toda una seña de identidad
de esta banda que pese a lo dicho, aumenta su legión de fans año tras año y
eso no hace sino mostrarme que en esto del metal no está todo perdido, y aún
hay gente que sabe ver algo más que simples estribillos pueriles, dobles bombos
contínuos y letras irrisorias.

Nunca puse una nota tan alta ya no a un Dvd sino a un lanzamiento sea en el
formato que sea y lo cierto es que no me arrepiento. Tras habérmelo tragado
6 veces en 2 días puedo asegurar que estamos ante el mejor Dvd de todos cuantos
he visto este año, que no son pocos.

Su contenido está compuesto por el concierto íntegro que OPETH dieron en el
Shephard’s Bush Empire londinense hace relativamente poco junto con un documental
de casi una hora de duración acerca de la grabación de sus dos últimas obras
maestras, “Deliverance” y “Damnation”.

Empezando por el concierto, pues que os voy a contar, quien ya haya visto a
OPETH en directo en cualquiera de sus 3 últimas visitas a España (y sobretodo
en la última) ya sabe como se las gastan estos 4 suecos en directo.

Con un sonido espectacular mezclado por el propio Andy Sneap y sin mucho retoque
de estudio (¿Curioso a estas alturas no?), una iluminación perfecta de acorde
con el carácter intimista de la banda y una puesta en escena simple con un telón
de fondo con la “O” del logotipo de la banda, el Shepard’s Bush Empire se convierte
en el lugar idóneo para un recital de semejantes características.

Sorprendentemente, la sala está a reventar y eso en un lugar como Londres y
tratándose de una banda de estas características es harto meritorio. Por cierto,
que la sala muy pequeña no es que digamos.

De los 14 temas que conforman su setlist (ninguna de ellas baja de los 8 o
9 minutos), 9 comprenden la primera parte del show, de marcado carácter intimista
y relajado, poniendo sobre las tablas la totalidad de su última obra de estudio
“Damnation”. Sí, lo tocan enterito de cabo a rabo colocando por en medio “Harvest”
de “Blackwater park”.

Michael Akerfeldt se muestra muy tímido incluso algo nervioso ante la audiencia,
sin embargo eso no supone ningún problema puesto que los “errores” de la banda
se pueden contar con la mitad de los dedos de una mano.

Mikael canta de una forma magistral, sin apenas desafinar en ninguno de los
pasajes de los temas más complicados de cantar de la mima forma que sus punteos
son simplemente galácticos, ¿Cómo se lo monta este tipo para expresar tanto
con tan pocas notas?.

La compenetración y simbiosis existente entre el propio Mikael y el siempre
afable y con pintas de hippie razagado Peter Lindgren es espectacular. Cada
uno de ellos posee su estilo marcado y definido a la hora de ejecutar los solos
de guitarra y alternando las guitarras acústicas con todo tipo de eléctricas.

La base rítmica compuesta por los uruguayos Martin Méndez y Martin López es
inmejorable, sus conocimientos de música están por encima de cualquier duda,
y en vez de ser dos floreros que se dedican a hacer su trabajo para no ofuscar
la labor de los guitarristas, participan de la música aportando muchísimos detalles
de calidad a lo largo de la actuación.

Finalmente la formación la completa Per Wiberg (SPIRITUAL BEGGARS), quien se
encarga de tocar los teclados y añadir unos coros impresionantes mostrando un
rango de voces no propio de un simple corista y muy por encima de la media de
los cantantes actuales.

La manera con la que OPETH interpretan los temas de “Damnation” es casi “quirúrjica”
y precisa al 100 %, no hay espacio para la interpretación y mucho menos para
los errores. Su música está calculada al milímetro, cada solo, la manera de
repartirse las labores entre ambos guitarras, las melodías de voz, los coros,
el sonido y los efectos específicos de cada tema… Todo es perfecto.

Si OPETH fueran una banda de rock & roll o heavy macarra quizá se les podría
recriminar su “perfección” y fidelidad a lo plasmado en el disco sin embargo,
visto el contenido de “Damnation” creo que en directo hacen lo que han de hacer
y como lo han de hacer, no hay más, cualquier otra cosa creo yo no favorecería
el clima intimista que se crea durante su actuación.

Tras “Weakness”, OPETH desaparecen de escena unos minutos y vuelven para descargar
su material pesado. Mikael Akerfeldt aparece ante el público con los brazos
en alto haciendo cuernos con las manos y diciendo que quiere ver a todo el público
completamente loco y desfasado, la respuesta del mismo no se hace esperar ante
los primeros acordes de esa joya llamada “Master’s apprentices”, todo un homenaje
a sus idolatrados MORBID ANGEL.

A continuación interpretan el que creo yo es el mejor tema de OPETH, “The drapery
falls” donde curiosamente, ¡Mikael comete un error con su guitarra!, de no haber
sucedido dicho error mis sospechas sobre si este tipo era extraterrestre o no
se habrían acrecentado, nada más lejos de la realidad, este tipo es de carne
y hueso y nació con una guitarra bajo los brazos.

Con todo el público desfasado y entregado a la causa, OPETH interpretan los
3 últimos temas de su actuación, las nuevas “Deliverance” y “A fair judgment”
y el ya clásico “The leper affinity”.

Quizá lo único reprochable a estas alturas reside en el porqué de no haber
tocado nada de sus 4 primeros trabajos. Vale que están los 9 temas de “Damnation”
sin embargo haber tocado 3 o 4 temas más de sus primeros discos habría supuesto
un colofón sin igual a una actuación que de todas formas roza la matrícula de
honor. En esta ocasión les perdonamos haberse dejado en el tintero “Demon of
the fall”, “Black rose immortal”, “Advent”, “April ethereal” o “Godheads lament”.

La segunda parte de este Dvd la compone un pequeño documental de 1 hora de
duración donde vamos a ver a OPETH en el estudio de grabación creando sus dos
últimas obras, “Deliverance” y “Damnation” junto con largas y entretenidas entrevistas
con cada uno de los miembros de la banda y con el productor Steve Wilson (PORCUPINE
TREE) quien es en parte “culpable” de muchas de las ideas plasmadas en ambos
trabajos.

Pese a estar en inglés, muy entendible por cierto, las entrevistas se alejan
de los tópicos de siempre que los músicos suelen soltar ante preguntas insulsas
y vacías para decantarse más por aspectos más personales de cada uno de los
integrantes de OPETH.

En ellas, Mikael, Martin, Peter y el otro Martin hablan de sus inicios como
músicos, de como entraron en OPETH, de sus gustos musicales, de sus manías,
de sus aspiraciones, de aspectos técnicos relacionados con sus instrumentos…etc…

Desde el placer que le supone a Mikael Akerfeldt poner el aire acondicionado
a tope en el estudio hasta la orientación del próximo disco de OPETH (black
metal progresivo), todo tiene cabida en los estractos de las entrevistas que
aparecen a lo largo de todo el documental.

Armado con su camiseta de BATHORY, Mikael Akerfeldt se revela como el tipo
tímido e introvertido que es al igual que Peter Lindgren. Su naturaleza nórdica,
pese a la calidez de su música más reciente se hace notoria en todo momento
mientras que por otro lado ambos Martins, de origen hispano, se les ve más abiertos
y sin reservas a la hora de enfrentarse a la cámara.

Si eres músico o en su defecto enamorado del sonido y la producción musical
gozarás como un bellaco con este documental donde verás a todos los miembros
de OPETH grabando esas frases, solos y patrones de batería que tanto te enloquecen
en el disco. El equipo que utilizan, las técnicas de captación sonora, las ideas
que Steve Wilson aporta de cara sobretodo al trabajo de voces y teclados…
Todo es una auténtiza gozada si lo tuyo es el mundillo de los cables y los decibélios.

No me queda nada más que añadir, si eres fan de OPETH esta joya NO PUEDE faltar
en tu estantería. Por el contrario, si crees que no estás preparado para un
Dvd de death metal, prueba siquiera con la primera mitad del concierto con sus
temas más “suaves”, puedes llevarte una sorpresa.

Javi Metal

Grupo:Opeth

Discográfica:Music For Nations/Mastertrax

Puntuación:10

Canciones:

    1. Windowpane
    2. In My Time Of Need
    3. Death Whispered A Lullaby
    4. Closure
    5. Hope Leaves
    6. To Rid The Disease’
    7. Ending Credits
    8. Harvest
    9. Weakness
    10. Master's Apprentices
    11. The Drapery Falls
    12. Deliverance
    13. The Leper Affinity
    14. A Fair Judgement

Año:2003

Votación de los lectores:9.57143