Embellish: A Thousand Light Years From You
Estoy convencido de que “A Thousand Light Years From You” es el mejor disco de Embellish hasta la fecha, manteniendo intacta la esencia que ya demostraban en sus primeras composiciones pero aportando de forma muy inteligente y madura todos los ingredientes y experiencias que han ido recogiendo por un camino que no ha sido especialmente fácil. Ahora solo queda disfrutarlo en directo, donde siempre han demostrado todo su talento y potencial, y puestos a pedir, que no nos hagan esperar tanto tiempo para un próximo trabajo.
Los catalanes Embellish fueron una de las bandas pioneras en el país del denominado gothic metal que tan fuerte pegó en toda Europa a finales de la década de los 90 y principios del nuevo milenio. Ahí tenéis a grandes ejemplos como H.I.M., The 69 Eyes o To/Die/For, por citar tan solo algunos de ellos. Pero antes de convertirse en el grupo que hoy conocemos, David Gohe y los hermanos castilla ya compartieron aventuras musicales bajo el nombre de Abokajarro con el thrash metal como bandera y posteriormente bajo el de Las Sombras, ya más cercano a su sonido actual.
Pioneros del gothic metal nacional
Así, en 2005 nos sorprendieron a todos con su debut en forma de álbum, “Black Tears and Deep Songs for Lost Lovers”, que surgía como la culminación de todas las composiciones y experiencias que les habían llevado hasta ese momento. No es casualidad que por aquel entonces telonearan a los grandes del género como algunos de los anteriormente nombrados, Entwine o Leave’s Eyes.
Como suele pasar en los cuentos de hadas, tras un prometedor arranque discográfico llenos de maletines y falsas promesas, siguieron luchando para publicar su segunda obra, “Blindead”, que aún manteniéndose fiel a su estilo reflejaba nuevas influencias y una rabia sonora fruto de la cruda realidad que viven tantas bandas en nuestro país para hacerse un hueco en el panorama.
Pero tras tres años trabajando en nuevas composiciones, girando y sacando adelante su proyecto crowdfounding, Embellish nos presentan su tercer disco, “A Thousand Light Years From You”, en el que han invertido dinero, tiempo, cariño y, sobretodo, mucho esfuerzo, para volver con fuerza recuperando la esencia sonora de sus inicios pero llevándola a un nuevo nivel, con un sonido y estilo más actual al que han contribuido la grabación de Carles Salse y la mezcla y masterización posterior de Henrik Gennert en Suecia.
Reinventarse desde el interior
La cálida melodía ambiental fruto del sonido del teclado sirve de perfecta antesala a los matices electrónicos de “From Inside”, que juguetean por encima de la electricidad de las guitarras de Miguel Castilla y Marcos Martín, todo bien arropado por la aguda voz de David Gohe y un estribillo que recuerda al de los Linkin Park de los últimos tiempos.
En una línea más cercana a sus primeras composiciones encontramos el siguiente corte, “It’s Too Late”, un increscendo de tintes góticos tan reconocible para cualquiera de sus seguidores. Un ritmo netamente rockero que explota en un intenso puente y un melódico solo de guitarra son algunos de sus mayores valores para convertirse sin duda alguna en uno de mis temas favoritos del compacto.
“A Thousand Light Years From You” (Embellish) es el elegido para dar título al disco y además supuso el primer adelanto del mismo. Dudo que sea algo casual, ya que entra fácilmente en una primera escucha gracias a unas preciosas armonías electrónicas omnipresentes durante todo el corte que alcanzan su clímax en un estribillo tremendamente pegadizo y emotivo que funcionará especialmente bien en sus futuros directos.
La fugaz calma inicial de “Disappear” poco a poco se va convirtiendo en un compás repleto de matices impulsados por la firmeza rítmica imprimida por el bajo y la batería de Ernesto Castilla y Abel Sequera, respectivamente. Menos eléctrico de lo que estamos acostumbrados hasta esa explosión final que sirve de preludio al último estribillo al que nuevamente el suave pero intenso registro vocal de David imprime su personalidad.
Noche y oscuridad como aliados
Vuelven a los terrenos más próximos al gótico en “Let’s Burn The Night”, en el que las guitarras de Miky Diablo y Ernesto Castilla asumen mayor protagonismo y nos dejan algunos de los pasajes más eléctricos del álbum acompañando a un David Gohe a las voces que por momentos parece poseído por el espíritu del propio Billy Idol. Bajan las revoluciones con “Into The Shadows”, tema que nos invita a cerrar los ojos, despejar la mente y dejarnos guiar por los oscuros y densos tejidos que se esconden tras las telarañas de su esencia sonora. Curiosamente más metálicas resultan algunos dibujos de guitarra con los que se componen una curiosa mezcla que funciona sorprendentemente bien.
No se alejan demasiado de este patrón en su siguiente corte, “I’ll Be Waiting”, en el que las melodías electrónicas vuelven a ser parte crucial de su estructura antes de la llegada del delicado estribillo que alterna fuerza con emotividad con una facilidad abrumadora. Las pistas con diversas líneas vocales y diferentes registros se unen en un final muy potente que apuesta por una mayor agresividad que encaja a la perfección.
“Nothing You Can Do” he de confesar que es una de mis debilidades, y que tras un arranque electrónico al más puro estilo Paradise Lost alcanza una violencia hasta ahora prácticamente desconocida a base de riffs de guitarra muy duros, casi violentos, con un excelente trabajo por parte de Miky y Marc, y con una batería que imprime una fuerza a la que el rasgado de garganta de David acompaña como si de un híbrido entre Nick Holmes y James Hetfield se tratara. No os lo voy a negar, echo en falta algún tema más en esta línea.
Una bella despedida
Y cierran el disco con “Beautiful” que como no podría ser de otra manera a juzgar por su título, vuelve a los derroteros más familiares y cómodos por los que se suele mover el sonido de la formación. A destacar la intensidad y belleza de un estribillo que prácticamente nos arropa en un in crescendo constante ideal para poner punto y final a un trabajo como el que nos ocupa, cuyo mayor defecto es que se hace excesivamente corto. Tocará darle al play una vez más…
Estoy convencido de que “A Thousand Light Years From You” es el mejor disco de Embellish hasta la fecha, manteniendo intacta la esencia que ya demostraban en sus primeras composiciones pero aportando de forma muy inteligente y madura todos los ingredientes y experiencias que han ido recogiendo por un camino que no ha sido especialmente fácil. Ahora solo queda disfrutarlo en directo, donde siempre han demostrado todo su talento y potencial, y puestos a pedir, que no nos hagan esperar tanto tiempo para un próximo trabajo.
Grupo:Embellish
Discográfica:Autoeditado
Puntuación:9
Canciones:
- From Inside
- It’s Too Late
- A Thousand Lightyears From You
- Disapperar
- Let’s Burn The Night
- Into The Shadows
- I’ll Be Waiting
- Nothing You Can Do
- Beautiful
Año:2018-07-27
Votación de los lectores:5
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