VARGAS BLUES BAND

¿Qué vamos a decir a estas alturas de Javier Vargas?. El trotamundos español-argentino-venezolano-estadounidense lleva ya varias décadas dedicado en cuerpo y alma a la música, y nos son pocas las variantes sónicas que ha ido desarrollando a todo lo largo de su longeva carrera. El año pasado celebró el veinte aniversario de su VARGAS BLUES BAND publicando “Vargas Blues Band & Company”, y a punto está de sacar a la venta su nuevo disco “Heavy City Blues”  con las colaboraciones de Carmine Appice, Bobby Alexander  y Paul Shortino como suele ser habitual. Entre medio, una gira por toda Andalucía en este caluroso mes de Agosto, incluyendo una parada en la capital malacitana con un público que respondió llenando el aforo.

Tardaron poco en subirse al escenario el propio Javier Vargas, el batería holandés Van den Berg y el bajista argentino Luis Mayo. ¿La sorpresa? No había vocalistas. La parte rítmica del trío presente sobre la tarima se encargó de poner sus voces en alternancia, y si bien su calidad vocal no llega a la altura de Shortino o Alexander por poner un ejemplo entre los habituales en el puesto, si imprimieron esa calidez y emotividad que necesitaba el blues rock que expusieron en sus dos horas y media de concierto aproximadamente. Porque precisamente eso es lo que hubo durante su tiempo de show: rock y blues al cincuenta por ciento. Quien esperase alguna pincelada de su faceta más chill out o aflamencada, saldría decepcionado con toda seguridad. No hubo ni rastro. Lo que si hubo fueron versiones. Muchas versiones. Una gran selección de clásicos de hard rock y blues que el sudoroso público no dejó de corear en cada momento.

“Same Old Thing”, “Stop Breaking Down” y “Black Cat Boogie” sirvieron como potente tridente de partida para comenzar a poner la sala en ebullición. Y por si no habíamos tenido bastante, “Love Me Two Times” de THE DOORS y un emotivo “Parisienne Walkways” de Gary Moore fueron descargados a continuación. Mensaje con sentido recuerdo al guitarrista irlandés, ya que fue en el pueblo malagueño de Estepona donde perdió la vida hace ya dos años y medio.

El listado de canciones que despacharon a continuación, fue un compendio de temas propios y versiones, destacando “Man On the Run”, “Body Shock”,  “Sweet Love 2 U” o “Back Alley Blues” y tributos a DEEP PURPLE, B.B. King o Jeff Beck entre otros grandes nombres de la historia de la música. En todo el concierto, el propio Vargas se encargó de crear un ambiente cordial y cercano con todos presentes que agradecían una y otra vez todas sus palabras.  Tras un pequeño descanso, siguieron con la misma dinámica y consiguieron emocionar al público con temas como su popular  “Texas Tango” o “Blues Latino”. Mención especial a esa sentimental balada llamada “Do You Believe in Love” que Mayo interpretó vocalmente de forma soberbia. Y sí; más versiones sacaron a lucir, sin faltar esa pleitesía que el guitarrista siempre ha sentido por el rock argentino, recordando la figura de Norberto Napolitano “Pappo” con “Sucio y Desprolijo”. Pero las mejores balas siempre se reservan para el final, y si hay que rendir tributo y homenaje a un gran guitarrista de la historia, Jimmy Hendrix no se podía quedar fuera. Encadenaron  “Purple Haze” y “Red House” con un desparpajo al más puro estilo jam session con el que nos dejaron boquiabiertos. Final de infarto con el que VARGAS BLUES BAND dejaron claro que no necesitan muchos ornamentos escénicos ni muchos miembros en sus filas para hacernos sentir el blues y el rock en su forma más básica.  Melancolía y pasión.