Más que interesante propuesta la que han llevado a cabo la gente de SHEMHAMPHORASH y FOSCOR para darse a conocer, obviamente, y mostrar al público algunas de las más diversas e interesantes propuestas musicales extremas del panorama europeo actual.

Durante el fin de semana del 12 y 13 de Octubre se dieron cita en la sala Mephisto de Barcelona 10 grupos de lo más variopinto abarcando así las diferentes tendencias dentro del basto campo del metal extremo. Situado justo en medio de una vorágine de conciertos capaz de liquidar los bolsillos más copiosos, el Satan Lives Fest congregó en ésta su segunda edición a un buen número de seguidores, más de los que –si he de serles sensato- habría esperado, que no deseado.

Si bien la jornada del primer día fue un tanto menos poblada, rozando las 150 personas deduzco en los momentos álgidos, durante el sábado se podría decir que el Mephisto estuvo llenito desde que se abrieron puertas hasta que éstas cerraron alrededor de la 1 de la mañana. Sin ánimo de querer mostrarme crítico hacia la organización, creo honestamente que deberían replantearse de cara al futuro la posibilidad de mover el festival a otra sala. No me malinterpreten, el sonido fue fabuloso durante gran parte de la velada, pero es lógico que la gente es humana, lo que conlleva padecer cansancio, calor, hambre y sed. Y todas estas reacciones tan propias de nuestros organismos no suelen encajar muy bien dentro de la filosofía de la sala Mephisto. Si lo que se desea es congregar al mayor número posible de personas durante la mayor parte del transcurso de ambas jornadas, no tiene sentido que desde las 7 de la tarde hasta la 1 de la mañana el personal no pueda salir de la sala siquiera a respirar algo de aire fresco o comerse un modesto bocata de fuet. Puedo entender de la misma forma que los responsables de la sala opten por no dejar salir al personal para que así se queden dentro y consuman, pero eso –si se paran a pensarlo- es contraproducente porque tal y como se comprobó, muchos vinieron, vieron a un par de bandas y se largaron. De haberse podido dar el caso de poder entrar a la sala de nuevo tras salir, muchos –estoy convencido- habrían vuelto tras cenar y habrían saboreado, en un estado mucho más confortable, el resto de descargas. Sea como fuere, éstas son mis opiniones, que desde luego, no tienen que ir ligadas con las de los responsables de la sala ni con los promotores del evento.

A nivel de organización, nada que reprochar. Las bandas fueron puntuales, todo salió como se suponía que debía salir, el merchandising estuvo a la altura de las circunstancias y el nivel mostrado por las bandas fue de notable alto, por lo general. Sí me extraño –he de decirlo- la cantidad de personal acreditado luciendo un bonito pase colgado del cuello. Conociendo de primera mano la filosofía de los organizadores, alabo el desinteresado ánimo de lucro por su parte, pero ello no implica que se deban otorgar pases e invitaciones a doquier como a un servidor le dio la impresión. Ni que decir cabe que incido en esto con toda la modestia del mundo, pues los que a esto nos dedicamos sabemos la cantidad de caraduras que pululan por ahí capaces de justificar lo injustificable con tal de conseguir tan preciados pases. A la hora de la verdad –y lo digo por experiencia propia- la mitad de los acreditados no suelen publicar reseñas ni nada que se le parezca. Creo que como mero observador de este tipo de conductas, debía remarcarlo, sin más.

Abrieron fuego alrededor de las 7 y media de la tarde del viernes los emergentes SHEMHAMPHORASH, en cuyas filas militan el 50 % de FOSCOR. A pesar de no contar con una audiencia muy poblada, dieron un recital notable con un sonido que desde luego, fuera de lo común, ayudó a que su propuesta Black Metal sonara como es debido. Su repertorio se basó, principalmente, en repasar los temas de lo que será su nuevo trabajo a publicar en breve vía Temple Of Darkness Records. Añadieron, de la misma forma, viejos temas de su primer Lp de nombre “Dementia” tales como “Matrunka” o “Mystical Ceremony”. No cabe duda que SHEMHAMPHORASH se desenvuelven muy bien en directo y desde luego, habrían obtenido mayor respuesta de haber estado situados más alto en el cartel. Qué demonios, ¡Señores!, que la modestia está muy bien, pero siendo los organizadores del sarao, ¡Deberían haberse colocado en hora punta! (Mismo caso aplicable a FOSCOR el día siguiente).

Tras unos breves minutos, salieron a escena los italianos KULT. Me habían hablado muy bien de esta gente –a pesar de que no había podido escucharles con anterioridad- no obstante, he de decir que en directo no me convencieron ni ellos ni su música. Probablemente “Winds Of War”, publicado por la Debemur Morti Productions a finales del año pasado, sea fabuloso, pero en directo no transmitieron mucho la verdad. Sus temas me parecieron simplones, tópicos, monótonos y sosos, a diferencia de SHEMHAMPHORASH por ejemplo, cuya propuesta es mil veces más feroz, sólida y extrema. Cuestión de gustos.

El caso de los vascos CEREBRAL EFFUSION resultó completamente diferente. Sin ser éste un estilo que me apasione –de hecho, no suelo considerarlo muy afín a mis gustos personales- he de reconocer que dieron un conciertazo. Su Brutal Death tosco a la par que técnico arrasó por completo la sala Mephisto. De nuevo, el sonido ayudó muchísimo a que una banda de estas características resultara incluso interesante a oídos de alguien que aborrece el estilo. No tengo muy claro qué tocaron y qué no, básicamente porque es harto complicado distinguir un tema de otro en un estilo donde no hay melodía ni solo alguno, pero está claro que actuaron cual apisonadora pasada de revoluciones. Seguramente fueron la banda que más público trajo porque tras irse ellos del escenario, gran parte de la audiencia fue desapareciendo progresivamente. Toda una lástima porque lo mejor estaba por llegar. Me quedo, a modo de anécdota, con los comentarios de su vocalista Cosme, aquel sobretodo que citaba a un adicto que empleaba su tiempo en jalarse a la peña. Precioso y conmovedor. Tanto que incluso aterró a cierta camarera de la sala –incauta ella- que estaba prestando debida atención a las confabulaciones antropológicas del colega Cosme. Verlo para fliparlo.

Tras el atracón de riffs y vísceras cortesía de Cosme y sus camaradas caníbales, HANDFUL OF HATE salieron a escena. Con la única referencia de su “Hierarchy 1999” en mi mente –un disco que recuerdo parco y tópico hasta la extenuación (Y eso que hablamos de 1999. Bien, mi memoria parece recuperarse poco a poco)- estos italianos dieron una magistral lección de cómo se ha de tocar Black Metal sobre un escenario. El sonido fue de órdago y la banda se mostró entregadísima, a pesar de ser prácticamente desconocidos. Tras casi 15 años en actividad, HANDFUL OF HATE denotan tener tablas y experiencia, tanto compositiva como escénica. Toda una grata sorpresa.

AES DANA, sin embargo, me decepcionaron. Los franceses, encargados de cerrar el festival, repasaron el material de sus dos únicos discos publicados hasta la fecha “La Chasse Sauvage” y “Formors” de forma impecable. Los temas sonaron, supongo, calcaditos al disco y de nuevo, el sonido fue fabuloso, pero está claro que en ningún momento llegaron a cuajar con la audiencia. Su propuesta ya de por sí descafeinada –un black metal muy ligero cargado de sonoridades celtas, flauta incluida- resultaba un tanto monótono. Casi todos los temas parecían cortados por el mismo patrón. No me hagan mucho caso de cualquier forma, a esas horas de la noche y tras 5 horas de pie sin apenas sentarse, uno solo piensa en el final del evento y desde luego, deja de ser receptivo hacia nada.

Tras un merecido descanso, volvimos de nuevo al Mephisto para presenciar la segunda jornada del Satan Lives Fest, mucho más atractiva a priori, en mi opinión, que la primera y desde luego con una acogida brutalmente superior a la del primer día.Con la sala prácticamente llena –que no abarrotada- FOSCOR salieron al escenario e hicieron lo que mejor saben hacer, tocar. En mi humilde opinión, creo que fueron de las bandas triunfadoras de todo el festival. Su Black Metal complejo, disonante y veloz gustó y convenció. La ejecución de su repertorio fue intachable igual que el sonido y su puesta en escena. Si a ello le sumamos que gran parte de su setlist se centró en su último y soberbio trabajo “The Smile Of The Sad Ones”, obtenemos un concierto de esos que uno saborea de principio a fin. Bueno, seamos sinceros, de principio casi hasta el final pues no pude ver sus últimos 2 temas por tener que salir pitando hacia el Razzmatazz para ver a mis queridos ANNIHILATOR rebajarse de nuevo a la condición de teloneros e interpretar por enésima vez las mismas 6 canciones de siempre. Jeff, o vienes de cabeza de cartel y tocas 2 horas o la próxima vez te va a ir a ver el tato. Opinión ésta, por cierto, bastante generalizada.

Debido a mi ausencia, no pude más que ver el final de la actuación de los galos Black Metaleros OTARGOS. Sorpresa grata me llevé cuando estos, en la recta final de su actuación ejecutaron el “Altar Of Sacrifice” de SLAYER y una todavía más sorprendente versión del clásico “The Secrets Of The Black Arts” de los suecos DARK FUNERAL, una canción que a título personal, le tengo bastante aprecio pues recuerdo que fue uno de mis primeros himnos de naturaleza Black Metal allá por sus días de publicación en 1995 (Entrañable videoclip. Entrañable Headbangers Ball. Entrañable Into The Pit. Entrañable Vanessa Warwick… ¡Algunos afortunados con antena parabólica de las de antes sabrán de lo que hablo!). Sea como fuere, los allí presentes, dieron el visto bueno a la actuación de los galos que venían a presentar su última obra “Kinetic Zero”, editado por la Rupture Music recientemente.

Justo después del show de OTARGOS, los catalanes ENTROPIA se apoderaron del escenario. Se notaba, desde luego –tal y como sucedió el día anterior con CEREBRAL EFFUSION- que mucho público había venido a ver sobretodo a las bandas de este tipo pues los propios ENTROPIA junto a los siguientes MACHETAZO, fueron los que más gente congregaron. Nunca antes había visto a estos tipos en directo, aunque me habían hablado muy bien de ellos. No sé muy bien qué decirles. Primeramente –vaya la verdad por delante- no me gustó su música. De hecho, como he reconocido muchas veces, no entiendo muy bien esta clase de Brutal Death/ Grindcore donde más allá de toda la parafernalia extra musical, poco hay a recalcar. Contaron además los catalanes con un sonido aberrante que no ayudó en absoluto a lucirse, aunque supongo que al público amante de esta tipo de bandas eso debió darle igual pues parecían disfrutar de lo lindo. Sea como fuere ENTROPIA desarrollaron su espectáculo que consiste básicamente en salir vestidos al escenario con trajes militares y las caras camufladas, así como decorar todo el tablado con símbolos anarquistas y tirar justo en medio de su actuación corazones o pulmones de dudosa procedencia al público (Que fueron o bien devueltos a sus propietarios o recogidos por los tipos de FOSCOR escoba y recogedor en mano, qué lindos ellos). Complementaron el cotarro sacando a lucir a un par de mozas ligeras de ropa que se dedicaron a realizar bailes exóticos al principio y final del show. Amenizaron su concierto ENTROPIA con discursos entre tema y tema suficientemente entretenidos, sobretodo para los que no sabemos ver ni apreciar nada en su grindcore cafre y alocado.

Los siguientes en salir al escenario fueron los gallegos MACHETAZO cuyo Death Metal resultaba bastante más entretenido que el de sus predecesores. Siendo una de las bandas con mayor experiencia de las presentes en todo el festival –llevan desde el 94 dando guerra habiendo publicado una ristra de Splits, discos y Eps que quita el hipo- se llevaron al público de calle. Incluso se atrevieron con una veloz y feroz versión de los MASSACRE, que no es moco de pavo. Poco más puedo contarles pues aproveché parte de su show para irme a zampar un buen bocadillo, que buena falta hacía.

De cara a la recta final del show, y con una presencia de público ligeramente inferior, salieron los teóricos cabezas de cartel del festival, FORGOTTEN TOMB. Siendo menor la concurrencia, estaba claro que los allí presentes conocían al grupo de sobras y habían venido a ver justamente lo que querían. Otra cosa bien diferente es que yo no logre entender muy bien el tirón que un grupo como éste puede tener entre todos los seguidores más acérrimos del Black Metal Underground pues –seamos sensatos- su propuesta no es que sea realmente muy extrema. (Parcheros que uno les llama; Dícese de aquellos que llenan sus cazadoras de logos de grupos de Black Metal lo más desconocidos e indescifrables posibles. Ahora ya no se lleva aquello de declararse fan de la vieja guardia tipo Marduk, Immortal, Satyricon o Emperor. Éstas se han convertido en bandas de dominio público y ya no es Cool declararse fan. En su lugar han sido sustituidas por otras que no las conoce ni el tato. Supongo que ahí está la gracia…), Como les decía, FORGOTTEN TOMB facturan una música jodidamente buena y de calidad, pero muchos de sus temas bien podrían haberlos firmado los KATATONIA de hace no muchos años con una voz gutural. Hay cosas que nunca entenderé. En ningún momento resto méritos al grupo, ni mucho menos, de hecho ya alabé por aquí a modo de review su ya algo lejano “Love’s Burial Ground”, disco que a estas alturas sigue pareciéndome una joya y del cual, junto a su predecesor “Springtime Depression” (Genial título, por cierto), algún tema rescataron como la monumental “Alone” que fue de las más esperadas y coreadas. A pesar de echar la vista atrás en muy contadas ocasiones, FORGOTTEN TOMB centraron básicamente su repertorio en repasar su última y más ligerita a la vez que digerible obra “Negative Megalomania”. Herr Morbid y sus huestes demostraron tener una propuesta escénica sólida y efectiva, aunque sus voces limpias deben mejorar mucho en el futuro pues flaquearon de forma notoria. Por lo general, la banda rozó el notable alto, sobretodo su guitarra solista Razor SK: Uno de los más limpios, técnicos y sólidos de todo el festival.

Con la actuación de los italianos se daba por concluida esta segunda edición del Satan Lives Fest, propuesta más que interesante, cuya acogida parece haber sido notable pues diversas fueron las personas que incluso se movilizaron desde diferentes puntos de la península para acudir a la cita.

Poco o nada que reprochar a la organización salvo lo puntualizado respecto a la sala algunos párrafos más arriba. Cartel variopinto, quizá en exceso, que de cualquier forma –gustos a parte- pareció satisfacer a gran parte de la audiencia. Sin más, les emplazamos a todos en la próxima edición que espero, deseo y confío, supere aún más el nivel mostrada en ésta. Ahí nos vemos, por supuesto.

Texto y fotos - Javi Félez (Javimetal@themetalcircus.com)

Promotor:Foscor y Shemhamphorash

Asistentes:300

Día:12/10/2007

Sala:Mephisto

Ciudad:Barcelona

Puntuación:8