Primer día del Rock Fest Barcelona: King Diamond reina, Kreator arrasan y Mago De Oz lo peta, aunque os sepa mal.
Tercera edición ya de Rock Fest en Santa Coloma de Gramenet y esta vez a lo grande. Unas 16000 personas estuvieron ayer disfrutando de un festival que crece y crece a la vez que mejora subsanando los pequeños detalles y flecos sueltos de las anteriores ediciones.
Tercera edición ya de Rock Fest en Santa Coloma de Gramenet y esta vez a lo grande. Unas 16000 personas estuvieron ayer disfrutando de un festival que crece y crece a la vez que mejora subsanando los pequeños detalles y flecos sueltos de las anteriores ediciones. Ambiente muy festivo y mucha comodidad, lejos de algunos festivales hispanos, espartanos, en medio de la nada. A día de hoy podemos afirmar que la mayoría de festis se han puesto las pilas, y el mejor ejemplo de ello es el Rock Fest, camino de asentarse definitivamente dentro de la multitud de festivales veraniegos en Barcelona.
El hecho de poder conseguir las pulseras en los dos días anteriores al festival hizo que la entrada fuera fluida y sin colas. Quizá era la única asignatura pendiente del año pasado. Un paseo por el recinto ya nos da pistas de que las mejoras son patentes. Más variedad de comida, un mercadillo que hace las delicias de todo coleccionista y detallazos como la carpa de Motörhead (el Mötortent) en la que sólo se sirve Jack Daniels con cola, lo que se viene llamando «un Lemmy». El señor Kilmister estaría encantado. Movistar se ha sumado a la fiesta aportando el trono de hierro de «Juego de Tronos» y en la vertiente más ociosa la organización ha añadido un castillo, una guitarra gigante y una batería gigante que acompaña al ya clásico inflable. El tema de los lavabos ha sido reubicado en una macro carpa aunque hay alguno más en el lateral derecho de los escenarios. Las colas para las firmas de discos avanzan bastante rápido en comparación con el año pasado.
El punto flaco de la primera jornada, no obstante, fue el del sonido. Ocasionalmente enmarañado y poco brillante, algo en lo que nos consta que se está trabajando intensamente hoy para mejorar. Más allá de eso, quizá fue triste que no todo el mundo se quedase a ver a King Diamond, demostrando que pese a que en las redes sociales los heavies se llenen la boca pidiendo bandas que consideramos «de culto» o «legendarias» en la práctica y en la realidad, esas bandas interesan a muchas menos personas de las que pensamos. Quizá 7.000 personas se quedaron a ver al rey Diamante hacer un concierto tremendo.
NONSENSE
Con la difícil papeleta de tener que abrir el festival, los catalanes NONSENSE se presentaban ante un público no muy poblado que pese a la tempranía recibió con una cálida ovación a los encargados de abrir la velada. Pese a su juventud, NONSENSE sin hacer en absoluto honor a su nombre mostraron unas sólidas credenciales con su metal melódico fresco y actual anclado en a partes iguales en el metal core más candente y esa herencia de los METALLICA de los años 90 tan evidente a lo largo yancho de sus temas. Gozando de un sonido más que decente, NONSENSE desgranaron parte de su repertorio en los escasos 20 minutos de los que gozaron, tiempo suficiente para darle cera a su nuevo disco “Another Way to Escape” con guiño al “The Trooper” de IRON MAIDEN incluido.
ORPHANED LAND
ORPHANED LAND eran el primer plato fuerte del día y es que pese a sus 25 años de actividad, a nadie le gusta tener que tocar a la 1 del mediodía. No obstante, Kobi Farhi y los suyos desgranaron un set interesante centrándose eso sí en sus últimas obras y olvidando casi por completo sus primeros trabajos, los más laureados para un servidor. Pese a la marcha de su líder musical Yossi Sassi, la banda de Israel ha sabido reponerse y proseguir su andadura perpetuando su hasta hace no mucho justa actividad en directo y dejándose ver más que nunca por todos los escenario del mundo. No hace ni un año que se dejaron caer por aquí sin embargo la acogida del público del Rock Fest fue más que notable. Abrieron ORPHANED LAND con “Ocean Land” de su ya lejano “Mabool” para recrearse sobretodo en sus últimas 3 obras de estudio. Como era de esperar, “Norra el Norra” encabezó el tramo final de su concierto ante un público ya algo más poblado y con ganas de corear y cantar los temas de la mítica banda israelí.
GRAVE DIGGER
El tiempo no se ha portado bien con GRAVE DIGGER. Mientras muchos de sus coetáneos gozan de una salud y recepción envidiable, la banda liderada por Chris Boltendhal nunca ha vuelto a recuperar el status del que gozaban poco menos de 2 décadas atrás. Pese a ello, una nutrida audiencia les acogió con los brazos abiertos con ganas de corear aquellos lejanos himnos que amenizaron los aburridos años 90 donde bandas como GRAVE DIGGER ayudaron a mantener el Heavy Metal pese a las adversidades. Ciertamente a Chris y los suyos no parecía afectarle que fuesen las 2 de la tarde y que el sol atizara de lo lindo; A base de cabezonería y tesón lograron entretener que a fin de cuentas es de lo que se trata. Con un sonido que fue de menos a más, GRAVE DIGGER recuperaron muchos de sus grandes hits de ambas épocas del grupo, los 80 y los 90, entremezclados con cortes nuevos que casaban a la perfección dentro de su propuesta clásica y atemporal. De este modo, la banda germana entró con fuerza con “Headbanging Man” y arrancó los primeros vítores a ritmo de “The Dark of the Sun” de su mítico ·”Tunes of War” de 1996, el disco que les puso en el mapa de nuevo. Su set se centró principalmente en viejos clásicos algo comprensible teniendo en consideración que su última obra hasta la fecha es “Exhumation (The Early Years)” es un disco de antiguos cortes regrabados. Del mismo modo y con la misma entrega, himnos como “Excalibur” y “Rebellion” fueron acogidos con gran entusiasmo ante el estallido final que supuso la legendaria “Heavy Metal Breakdown”. Seguramente nunca más GRAVE DIGGER vuelvan a gozar de la salud que tenían 20 años atrás, pero quien tuvo retuvo y todos los allí presentes acabamos disfrutando de un show entretenido y ameno.
MOONSPELL
No engaño a nadie si reconozco haberme desconectado completamente de MOONSPELL, de hecho apenas he seguido su trayectoria en los últimos casi 20 años. La banda lusitana tuvo su momento pero tantas idas y venidas de estilos y modas acabaron por confundir a su público, por lo menos al que los seguía desde sus primeros días. Sin embargo, en directo la banda conserva todo su encanto, sobretodo cuando deciden centrar su setlist en sus dos obras más laureadas y recordadas, “Wolfheart” y “Irreligious”, ambos editados 20 años atrás. La banda de Fernando Ribeiro arancó con un par de cortes nuevos para dar paso a “Opium”, ese himno de mediados de los 90 que suena tan fresco como el primer día. Pese al sol y calor, MOONSPELL tiñeron de negrura el RockFest tirando de viejos himnos como “Awake”, “Ruin & Misery”, “Ataegina”, la sempiterna “Alma Mater”, “Full Moon Madness” (Con la que cerraron) o “Vampiria” donde curiosamente Fernando Ribeiro hizo el mismo comentario en alusión al calor que 20 años atrás en su segunda descarga en España en el marco del Doctor Music Festival, aunque esta vez sin la capa, eso sí. Su show gustó y asentó la credibilidad del grupo acrecentada a base de retomar su estilo más agresivo y duro tras unos años de confusión musical. MOONSPELL legaron sin hacer mucho ruido y se fueron por la puerta grande siendo uno de los platos fuertes del día.
DRAGONFORCE
Si la última vez que los vi presentando “Maximum Overload” dije que el grupo estaba avanzando en la dirección correcta huyendo un poco de la velocidad absurda y la ultra-melodía parece ser que en los shows de festivales han optado por volver a tirar de lo clásico de su repertorio. Inicio speedico con “Holding On” y la celebrada “My Spirit Will Go On” con un sonido algo tambaleante. El bombo de Gee Anzalone sonó como una ametralladora. Pueden gustarte o no, pero la exhibición técnica es rotunda, especialmente por parte de Sam Totman y Herman Li. Pronto hubo la ya clásica bromita entre el público “¡tocad una rápida!”… Marc Hudson nos ha hecho olvidar a ZP Theart y tiraron de posturitas en “Heroes of Our Time” y “Operation Ground and Pound”. Lo mejor de su directo “Symphony of the Night” y la final “Through the Fire and Flames”, muy bien recibida entre la gente. Perfecto show de festival aunque media hora más de Nintendo Metal puede llevarte al hartazgo. A destacar siempre la labor del gran Vadim a las teclas y del habilidoso Frédéric al bajo. No es nada fácil tocar las cuatro cuerdas en una banda como Dragonforce…
CORONER
Siendo quizá la banda que más ganas tenía de ver, he de decir que salí bastante decepcionado de su concierto. CORONER nunca fueron una banda con solera y renombre, para que engañarnos. Si bien es cierto, desde que se reunieran un lustro atrás su nombre y prestigio han ido en aumento y diversas son las ocasiones en las que se han dejado ver por los escenarios de los mayores festivales europeos (aunque esta fuera su primera cita en España desde los lejanos primeros años 90) La expectación era notable, casi tanto como el desencanto tras ver que tema tras tema los suizos insistían en recuperar su última época, vestigios de un pasado lejano que dejaron con un sabor de boca agridulce a todos aquellos que no mucho tiempo atrás habían entrado literalmente en trance de la mano de “RIP”, “Punishment for Decadence” o “No More Colour”, discos que pasaron completamente inadvertidos en su setlist, el cual se centró principalmente en sus dos últimas obras antes de separarse, “Mental Vortex” y “Grin”. Para los acérrimos de sus primeras obras, CORONER apenas nos obsequiaron con “Masked Jackal” desengranando su lugar temas tediosos sobretodo de “Grin”, el trabajo menos recordado de ellos. Vicisitudes del setlist a parte, la banda se mostró seca y distante en todo momento articulando un show mecánico y aburrido que no logró despegar en ningún momento. El sonido tampoco acompañó lo que ya de por sí acabó de rematar un concierto para olvidar. CORONER tenían una ocasión de oro para asentarse y seducir a un público que mayormente los desconocía y malbarataron la ocasión. Otra vez será.
TYKETTO
Era uno de los lujos del festival para todos aquellos que buscan bandas menos habituales. Danny Vaughn estuvo en Vilanova hace cosa de un mes interpretando temas de los Eagles, pero no es lo mismo. Celebraban los 25 años de “Don’t Come Easy” y con ello se olvidaron de todo su material más reciente. El fan lo agradece aunque quedó algo raro eso de tocar entre Coroner y Heaven Shall Burn. Hard rock elegante y de quilates de la mano de “Sail Away” y “Streap Me Down”. Danny lució garganta moviéndose e interactuando con el público aunque no conectó del todo más allá de las bulliciosas primeras filas. “Nothing But Love” y “Walk on Fire” combinaron eléctricas y acústicas pero el gran protagonista del concierto sería su teclista. Espectaculares coros (reales) y mucho feeling en “Lay Your Body Down” y “Seasons”. La cosa iba perdiendo fuelle pero tras “Wings” cayó la joya de la corona: “Forever Young”. Aquí sí que la gente conectó, cantó y disfrutó. Correcto show para un festival pero estoy seguro que en una sala la propuesta de Tyketto puede transmitir más que bajo el sol de la tarde.
HEAVEN SHALL BURN
Tras 6 conciertos seguidos y de pie, con un sol abrasador, opté por ver a los germanos HEAVEN SHALL BURN desde la distancia sentadito y comiendo algo. Pese a estar estilísticamente en las antípodas de la mayoría de bandas presentes en el cartel del jueves, es innegable que HEAVEN SHALL BURN poseen una posición privilegiada dentro de la escena Deathcore y arrastran a bastante gente. Con la excepción de KREATOR eran sin duda la banda más extrema de la jornada y arrasaron como era de esperar. Centraron su repertorio en su última obra hasta la fecha, “Veto”, un disco con ya 3 años de edad y pese a que casi nadie se percató, descargaron la célebre versión de EDGE OF SANITY “Black Tears” dejando un muy buen sabor de boca entre sus seguidores y curiosos.
MÄGO DE OZ
Curiosa la situación de Mägo de Oz. Tocaban en uno de los festivales más metálicos habiendo sido acusados de alejarse de del heavy metal. Muchos fans entre el público y muchos detractores, pero nadie se quiso perder su show con esa cabeza de payaso hinchable y la batería roja y negra con pentáculos, sobre una plataforma. Salieron con todo y a por todas pues parecía una reválida. No era un show cualquiera y muchas caras nuevas para el fan anterior a los “Gaias”. Fuego y confeti para recibir a “Satania” tras una intro impactante. Nueve personas sobre el escenario y un Zeta que capeó bien el temporal. Poco a poco la gente se fue metiendo en el concierto y muchos recordaron que en su día fueron fans. El único momento bajo fue que “La Cruz de Santiago” fue cantada varios tonos por debajo en el estribillo, el resto impecable. “Pensatorium” fue la única concesión (necesaria) para luego hacer botar al gentío con “La danza del fuego”. Brillante como siempre Patricia Tapia en “Astaroth”, una de las gemas del “Finisterra”. “Molinos de viento” era obligada en un show como este, con polla-man incluido y el colofón llegó con “Finisterra” con otro dueto entre Zeta y Patricia. Buena elección de temas y un acierto dejar fuera la cansina “Fiesta pagana”. Pocos parlamentos, buen repertorio y una larga cola para firmar autógrafos en la carpa solidaria.
KREATOR
Los siguiente en actuar fueron KREATOR, un comodín típico de los festivales españoles, interpretaban sus primeros acordes. Como digo, KREATOR son una apuesta segura y pese a que no dieron su mejor concierto, mantuvieron el listón relativamente alto, sobretodo para quien no los había visto nunca. Incido en ello básicamente porque el gran problema que tienen los germanos a día de hoy es que son previsibles hasta el hartazgo, desde su setlist hasta los comentarios entre tema y tema. Como era de esperar, Mille y los suyos arremetieron con temas nuevos entremezclados con sus habituales “Terrible Certainly”, “Phobia”, “Violent Revolution” o “Pleasure to Kill”, temas por otro lado que aún habiendo presenciando en millones de ocasiones, siguen teniendo su encanto. A la espera de que “Phantom Antichrist” tenga un descendiente y KREATOR vuelvan de nuevo de gira por aquí como cabezas de cartel, cosa que no sucede si no me falla la memoria desde hace 5 años, el show de los germanos en el Rock Fest les mantiene en el candelero y confirma que nadie le hace ascos a una buena dosis de Thrash Metal teutón en el marco de un festival veraniego.
MICHAEL SCHENKER
Secundado por esta nueva formación apodada Temple of Rock, el teutón Michael Schenker se dejó caer de nuevo por los escenarios peninsulares dando un recital de altísimo nivel como nos tiene acostumbrados últimamente desde que decidiera abandonar sus viejos hábitos etílicos. Para la ocasión tuvimos la suerte de contar con Gary Barden quién se mantiene a un nivel de forma altísimo y sin duda representa lo mejor del glorioso pasado del señor Schenker en forma de sus dos primeros trabajos. Michael es una leyenda viva del rollo y se encargó de demostrarlo en todo momento desprendiendo formas y aptitudes solo al alcance de muy pocos. Sigas o no la carrera del germano, de bien seguro que tarareaste fraseos y riffs legendarios como los de “Into the Arena”, “Attack of the Mad Axeman”, “Armed and Ready”, “Doctor Doctor” o “Rock Bottom” que completaron un set de infarto junto a temas no menos legendarios como “On an On”, “Cry for the Nations”, “Rock my Nights Away” o el clásico instrumental de SCORPIONS “Coast to Coast” que fue coreado hasta la saciedad por un público con ganas de más y evidenció que el señor Schenker atraviesa uno de sus estados de forma más álgidos y mágicos de su carrera.
BLIND GUARDIAN
El guardián ciego le tiene la medida muy bien tomada a los festivales, y más en este pues Hansi estuvo en la presentación de dicho evento hace un par de meses. Siempre sorprenden con su repertorio pero personalmente me encantó ver como los temas nuevos funcionan de maravilla en directo, cosa que en disco se hacen excesivamente pomposos. Desgraciadamente el sonido no les acompañó, aunque fue mejorando tema a tema. Grandes pues “Nith Wave” y sobretodo “Twilight of the Gods” que apunta definitivamente a clásico. Simpático y motivador Hansi que nos noqueó presentando “The Script from My Requiem”, absolutamente inesperada, aunque más lo fue “The Last Candle”. Los momentos de la noche, más allá de las clásicas “Valhalla” y “The Bard’s Song” fueron “Time Stands Still (At the Iron Hill)” y “Bright Eyes”. La implicación de la audiencia fue total y posiblemente junto al show de Michael Schenker el concierto más multitudinario. “Tanelorn (into the Void) ya es bienvenida como un clásico más y gran interpretación de “Imaginations from the Other Side”. Nunca decepcionan en directo y hay veces que Blind Guardian lucen más en festivales que en shows en sala. Lo vivido ayer en el Rock Fest lo corrobora. Muchos añoraron “Mirror, Mirror”, pero está bien, después de tantos años, aparcarla.
KING DIAMOND
Poner al Rey Diamante de cabeza de cartel era una apuesta arriesgada, no tanto porque su valor no lo justifique sino porque en este país de Pandereta y cultura metálica limitadita, tomar una decisión así tenía sus riesgos. Y efectivamente, así fue. Nada más arrancar su setlist y tras la descarga de BLIND GUARDIAN, la desbancada fue generalizada y dudo mucho que apenas 5000 personas se quedaran para disfrutar del que para muchos fue el concierto del año. Celebrando los casi 30 años de “Abigail”, KING DIAMOND centraron su set en dicho clásico interpretándolo de cabo a rabo en su tramo final del concierto, algo que rara vez se volverá a presenciar. Remataron King y los suyos la faena con un buen puñado de clásicos del grupo como “Sleepless Nights”, “Welcome Home” o “Eye of the Witch” o 2 himnos de MERCYFUL FATE de la talla de “Come to the Sabbath” y “Melissa” que sorprendentemente desbancó a la sempiterna “Evil” del repertorio a diferencia de sus giras anteriores. He tenido la fortuna de ver a KING DIAMOND en sus dos anteriores giras del 2000 y 2006 así como también a MERCYFUL FATE en un par de ocasiones y creo no equivocarme si afirmo que King está en su mejor estado de forma, curado ya de sus problemas y adicciones y rozando un nivel altísimo a sus 60 años. Del mismo modo, la banda que le acompaña raya a un nivel altísimo y ayuda a que el espectáculo en sí sea todavía más sorprendente. Con la misma decoración escénica que le vi llevar en Estocolmo hace un par de años, KING DIAMOND dejaron a la escasa audiencia en estado de trance con un setlist atronador y un espectáculo de sonido y luces más propio de una banda de estadios que de una que hasta hace no mucho apenas lograba llenar el Razzmatazz 2. A la espera de que saquen nuevo disco, la vuelta de KING DIAMOND no puede resumirse sino de triunfal.
Promotor:Rock n Rock
Día:2016-07-15
Hora:13:00
Sala:Can Zam
Ciudad:Santa Coloma de Gramenet
Puntuación:9
Deja una respuesta
Lo siento, debes estar conectado para publicar un comentario.