DISSECTION + WATAIN

Tras la cancelación hace un puñado de años de la que tenía que haber sido la primera visita de DISSECTION a España, por fin la banda de Jon Nodtvedt, en éste su esperado regreso, pisaba suelo español para ofrecer 3 conciertos inolvidables que mucho tardarán en borrarse de la mente de todos los asistentes.

Con motivo de la presencia de DISSECTION en Barcelona, un servidor y Sergi Ramos pudimos entrevistar a Jon Nodtveidt dentro de su autobús de gira. Desde luego, la imagen era pintoresca, un homosexual declarado y un melenudo algo ebrio entrevistando a un tipo que asesinó tiempo atrás a un gay, eso es tener cojones de plomo señores y el resto son tonterías. La entrevista, sumamente interesante, deduzco que se colgará allá por el año 2024, por entonces DISSECTION se habrán separado y reunido 23 veces, yo estaré más gordo y más calvo y el señor Ramos tendrá un sidazo del tamaño de Ucrania. No vamos a desvelar ninguna de las respuestas de Jon, por eso de crear expectativas y blablabla, todo a su debido tiempo, pero os puedo asegurar que dio bastante de sí la entrevista.  

Tras el gustazo personal que me supuso estar cara a cara con uno de mis ídolos musicales, y tras comprobar que Sergi Ramos estaba todavía enterito y vivo, obté por entrar a la sala Deja Vu, clarísimamente, una de las mejores y más completas salas de todas cuantas he visto, sobretodo para bandas cuyo público suele estar alrededor de las 500 personas. Desde aquí invito a todos los promotores a que tengan en cuenta las instalaciones de la Deja Vu para futuros eventos. Desde la colocación de barras, lavabos y entrada hasta el sonido y lo bien que se veía el escenario, todo era perfecto. La única pega que le encuentro es que no disponga de foso de fotógrafos, razón, entre muchas otras, por la que no hice fotos del concierto; Por una vez prescindí de cámara alguna y me dediqué a vivir el concierto como hacía años que no lo hacía (Cerveza, headbanging y todas esas cosas feas que suelen hacer los heavies).  

Con unos teloneros de lujo, sus compatriotas WATAIN, unos chicos jovenzuelos de los cuales podría explicar más de una anécdota que demostraría que están casi tan zumbados o más que los DISSECTION de hace una década, el evento empezó con cierto retraso sobra la hora estipulada. Mientras WATAIN empezaban a interpretar los primeros temas de su actuación, un servidor se apresuró a hacerse con una copia de "Maha Kali", el single que DISSECTION ponían a nuestro alcance y que teóricamente solo se podía adquirir en el puesto de merchandise de la gira.

Tras ello, me dispuse a observar como se lo montaban estos suecos sobre un escenario y he de reconocer que lo hicieron francamente bien. Para los que no pudieron acudir al concierto que WATAIN dieron en Barcelona hace ya un tiempo, ésta era una ocasión perfecta para entrar en contacto con una de las bandas actuales que mejor black metal practican. Con dos Lp’s en su haber, "Rabid death’s curse" y "Casus Luciferi", y un buen puñado más de material editado en forma de splits, demos y discos en directo, WATAIN se han consolidado como una de las formaciones actuales más creíbles y esencialmente puras del black metal. Su mezcla entre el sonido sueco de DISSECTION, SORHIN o SACRAMENTUM junto con el black metal nórdico clásico de los mejores MAYHEM y ese regustillo a los BATHORY más rabiosos y primitivos conforman las señas de identidad de WATAIN, cuya legión de seguidores, de bien seguro crecerá enormemente tras esta gira europea. Una banda a tener muy en cuenta.

Tras una espera que se hizo eterna, los 4 miembros de DISSECTION salieron a escena sonando de fondo la mítica intro de "Storm of the light’s bane", "At the fathomless depths", con esas melodías dobladas tan exageradamente diabólicas. Lo lógico habría sido que el siguiente tema fuese la clásica "Night’s blood", pero Jon debió pensar que eso sería muy obvio y decidió atacar otro de esos mitos atemporales de la música extrema, "Black horizons", tema que abría su debut de hace más de una década "The somberlain". A continuación, y siguiendo con el mismo Lp, sonó "Frozen", tras la cual, llegó la esperada "Night’s blood", y con ella, la locura colectiva; Headbangings antológicos, gente cantando las letras a pleno pulmón… Aquello parecía el maldito infierno con banda sonora incluida y no un evento de ocio cualquiera. A continuación le tocaba el turno a la "nueva" "Maha Kali", tema que en directo sonó 100 veces mejor que en disco, pero que aún así, bajó un poco la intensidad de su actuación. A sabiendas de ello, DISSECTION interpretaron seguidos TODOS los temas de "Storm of the light’s bane", salvo, obviamente, la intro y "Night’s blood" que ya habían sonado. Antológico, indescriptible, apocalíptico. "Soulreaper", la instrumental "No dreams breed in brethless sleep" (ésta sobraba), "Where dead angels lie", "Retribution: Storm of the light’s bane", "Unhallowed" y "Thorns of crimson death". Ni en nuestros mejores sueños habríamos esperado semejante repertorio. Tras ello, le tocaba el turno a los temas restantes de "The somberlain", su debut, con la excepción de un par de temas, osea "Heaven’s damnation", "In the cold winds of nowhere" y "The somberlain" (Tema con el que cerraron puesto que la guitarra de Jon falleció, sino fijo que habría sonado "A land forlorn"). La gran sorpresa llegó con la versión de la mítica banda húngara TORMENTOR y su relativamente famoso himno "Elizabeth Bathory" que ya aparecía en el Ep de DISSECTION "Where dead angels lie", otro de los momentos álgidos de la actuación, sin duda.

Tras un show cercano a la hora y media de duración, la banda se despidió ante una ovación de esas que hacen historia y de bien seguro, volverán a dejarse caer por España tras la increible acojida que han tenido en Barcelona y sobretodo en Madrid, donde por lo visto tuvieron hasta que cambir de sala para acojer a la cantidad de gente que estaba comprando las entradas a un ritmo frenético.

La noche acabó con los miembros de DISSECTION y WATAIN, tan ebrios como de costumbre (Menos Jon, el único sueco del planeta que no bebe alcohol), en la discoteca Metal Zone de Barcelona, tirando el anzuelo a toda mujer viviente que se cruzase con ellos, pero como los novios siempre andan al acecho, más de uno, como el señor Set Teitan se llevó una buena tundra de palos. Te lo tienes merecido amiguito, a ver si aprendes a no meterte donde no te llaman.

En fin, si no estuviste allí, no puedo decirte otra cosa salvo que te perdiste uno de los mejores eventos metálicos extremos de la última década. Con un poco de suerte, en breve los tendremos por aquí de nuevo presentando su nuevo disco de estudio.