Archspire revienta Madrid y juega al Twister con sus fans

Un día complicado en la agenda de conciertos de la capital, donde frente un bolo del calibre de Lamb of God y Kreator, los canadienses Archspire y sus compañeros de tour se enfrentaban a la incertidumbre, pero las hordas más extremas del metal se reunieron para llenar la Nazca y derribarla con despiadados circle pits y wall of deaths.

Un concierto donde tanto la sala como el escenario se quedaron pequeños para el público y las bandas respectivamente, no desanimó a ninguna de las partes involucradas en que fuese una noche donde reinase la brutalidad más oscura e intensa.

Entheos abren fríamente la noche

Capitaneados por los feroces guturales de su vocalista Channey Crabb, los californianos Entheos abrían la velada con un público algo frío que se fue animando conforme su escasa media hora de actuación iba transcurriendo. Su reciente trabajo ‘I Am the Void’ resonó por toda la sala, aunque el sonido no les hizo justicia frente al potencial que ofrece esta banda en directo. Sin duda resultan una gran apuesta y una firme promesa de banda dentro del género.

Entheos (Foto: Zoe Lilith)

Se caldea el ambiente con unos demoledores Benighted

Una vez llegado el turno de los franceses Benighted la sala ya estaba caldeada y lista para que empezara la masacre en los salvajes pits que se avecinaban con ellos. No dejaron títere con cabeza con tanto headbang al ritmo de su batería. Un sonido que empezó mal aunque mejoró un poco conforme avanzaba el directo, dejando a los fans disfrutar de temas icónicos como “Martyr” y “Cum With Disgust” entre algunos de su último disco ‘Obscene Repressed’ como “Nails” o “Brutus”. Un show arrollador, una vorágine de caos y furia descontrolada pero donde además les caracterizó la simpatía y cercanía con un público más que entregado a ellos en un vertiginoso infierno de circle y mosh pits.

Benighted (Foto: Zoe Lilith)

A nuestros vecinos del norte se les pudo disfrutar el pasado verano en el Resurrection Fest y los chicos no se habían olvidado de ello, encantados de volver a tocar en nuestro país y convertir el local en cenizas tras su derroche de bestialidad desmedida, a pesar de que el escenario se les hacía más pequeño de lo que ya era.

Psycroptic engancha fuerte

Eel cuarteto de Psycroptic puso el toque de limpieza y sobriedad de la noche frente a la brutalidad desmedida del resto de bandas, aunque sin dejar que el ambiente de la sala se relajase demasiado, para dar paso al plato estrella de la noche.

Psycroptic (Foto: Zoe Lilith)

El mal sonido general de la sala siguió desmereciendo las canciones de todas las bandas y no fue menos para los terceros de la velada. Animaron a todo el público a seguir en aquella matanza con algunos hits de su repertorio como “Frozen Gaze”, “Euphorinasia”, “Ob(Servant)” y “Enslavement” que se encargaron de ello en una abrumadora nube de humo (literalmente la mayor parte del show) y violencia.

Reina el caos con Archspire a todo gas

Bromeando con que ellos mismos habían cancelado el concierto y que en su lugar iban a tocar 5 calvos viejos y borrachos, así entraban los canadienses al escenario de la sala Nazca. En pleno tour europeo, titulado Tech Trek, vinieron para conquistar y eso ocurrió.

Archspire (Foto: Zoe Lilith)

Aunque sin duda alguna ellos fueron (increíblemente) los que peor sonido y luces tuvieron, los fans se les agolparon a los pies del escenario y no cabían los circle pits en una Nazca pequeña para acoger este tipo de bandas de metal tan extremo y salvaje. No hay palabras que alcancen una buena descripción para la -hablando en plata- burrada que fue el directo de Archspire a pesar de la baja calidad acústica que tuvieron.

Archspire (Foto: Zoe Lilith)

No contentos con ser una banda que va dejando cadáveres a su paso, porque si vas a verles sabes que vas preparado para morir, los chicos estuvieron muy cercanos al público, bromeando y riendo sin parar. Pero el punto fuerte de esta simpática banda fue a escasos temas de acabar el show… El bautizado Twister Time, donde literalmente lanzaron una lona del juego Twister y se pusieron jugar momentáneamente con 3 fans antes de volver a los temas y romper con un infernal wall of death.

Archspire (Foto: Zoe Lilith)

El violento recorrido de su setlist varió con hits de su último trabajo ‘Bleed the Future’ como el tema homónimo, “Golden Mouth of Ruin” y “Drone Corpse Aviator”, junto a un recordatorio de su anterior trabajo ‘Rentless Mutation’ como la querida “Human Murmuration”, “Calamus Will animate” y “Involutionary Dopplegänger”.

Archspire (Foto: Zoe Lilith)

Quien no se desvivió ayer con estas bandas en la Nazca, está muerto por dentro. Todo un despliegue del virtuosismo violento y desmedido del deathcore internacional que alberga grandes nombres como estos.