Una de las mejores maneras de saber si un concierto ha sido bueno, regular o terrible es ir en silencio hacia la salida y escuchar las impresiones del resto de asistentes. Sobre esas tres mil personas vas a poder captar una muestra lo suficiente heterogénea de opiniones y puntos de vista.

A veces uno sale pensando que acaba de ver un fraude de concierto pero la gente está maravillada. Aunque no suele ser algo tan extremo, lo cierto es que donde esté tu cabeza ese día puede afectar a tu percepción de un determinado espectáculo, tanto para bien como para mal. Es un factor de corrección para el crítico que, a veces, puede tener un cierto sesgo con un artista u otro. De todos modos, si uno hubiese hecho una encuesta ayer a la salida del Sant Jordi Club de Barcelona, todo el mundo habría coincidido en que lo de Alice Cooper fue más que un concierto, una suerte que todos tuvimos en esa noche de domingo.

Seamos realistas: Alice Cooper tiene una edad que no nos permitirá verle muchas veces más a este ritmo. Su última gira pasó por Barcelona en el año 2010, aunque nos visitó en Rock Fest hace cuestión de un par de años aunque, obviamente, no es lo mismo que verle en un espacio más cercano. A este ritmo, la siguiente visita de Alice Cooper llegará cuando tenga 80 años. Una posibilidad remota. Así pues, lo de anoche tuvo cierto sabor a “última vez”, aunque Cooper nunca haya empleado el argumento de la despedida en sus giras. El público, probablemente, no es consciente de lo especial y único de estas giras que estamos pudiendo ver. Solo lo es cuando pones el “farewell tour” por delante, lamentablemente.

Un setlist renovado

Uno de los principales puntos a favor de cualquier show de Alice Cooper es que cada par de años le da un repaso a su setlist que hace lo suficientemente atractivo acudir a verle de nuevo. Del mismo modo que bandas como Kiss se apoyan en exceso en unas canciones concretas y prácticamente vetan el 85% de su creación discográfica, a Alice Cooper no le da miedo tirar de fondo de catálogo y recuperar temas a menudo olvidados que se salen de los cánones del single y el hit. En este tour, Cooper recupera piezas como “Raped and Freezin’” del mítico “Billion Dollar Babies”, “Steven”, “Teenage Frankenstein”, “My Stars”, “Roses on White Lace”.

Alice Cooper Barcelona

Alice Cooper (Foto: Sergi Ramos)

Pequeños regalos para fans de toda la vida que aseguran que el setlist puede satisfacer incluso a los más exigentes. También recupera la cheesy “Bed of Nails”, otro recuerdo a aquel “Trash” que le llevó a reflotar su carrera -parcialmente gracias al éxito “Poison” pero también gracias a una colección de composiciones que supieron unir el sonido villano de Cooper con el hard rock comercial de la época. En definitiva, el concierto es un viaje de una hora y veinticinco minutos, por casi todo el universo Coop, evitando los años oscuros de “Dada”, “Special Forces” y “Zipper Catches Skin”.

Alice Cooper Nita Strauss Barcelona 2019

Alice Cooper (Foto: Sergi Ramos)

Cooper no venía solo, sino que lo hacía dentro de un doble cartel bien escogido donde los americanos Black Stone Cherry se ocupaban de calentar el ambiente. Capaces de llenar salas por sí solos, los de Edmonton venían presentando nuevamente su más reciente trabajo, “Family Tree”. Ya estuvieron en varias ciudades españolas en 2018, en la primera ronda de conciertos de presentación del disco, pero tocar con Cooper ante 6.000 personas en Madrid y 3.000 en Barcelona ciertamente les abre las puertas a algo más grande en nuestro país.

Black Stone Cherry Madrid 2019

Black Stone Cherry (Foto: Javier Bragado)

Lejos quedan los tiempos en que actuaban en la playa de Barcelona para unos pocos escogidos o en el Apolo 2 a medio llenar. Ahora los de Chris Robertson y Ben Wells son una engrasada maquina de hacer rock con tintes sureños y donde temas como “White Trash Millionaire” y “Blame it on the Boom Boom” consiguieron que el público se volcase notablemente con ellos.

85 minutos precisos

Cooper salió a escena a las 21:15 de manera exacta y precisa con un “Feed my Frankenstein” que sorprendió como elección para comenzar el concierto – aunque también lo fue “Brutal Planet” en su gira anterior. A partir de ahí, como una obra de teatro perfectamente milimetrada, coreografiada y medida, el show se desarrolló con insultante precisión a lo largo de 85 minutos.

Alice Cooper Barcelona

Alice Cooper (Foto: Sergi Ramos)

No hay espacio a la improvisación pero, de algún modo, Cooper consigue que todo fluya con soltura y no de la sensación de estar planificado al extremo. Es una de sus virtudes y uno de los motivos por los que 85 minutos de Alice Cooper cunden más que 120 de cualquier otra banda. El dinamismo de la banda que le acompaña, especialmente en el caso de Nita Strauss y Chuck Garric, junto con el habitual espectáculo hacen que siempre esté pasando algo sobre el escenario y tu mente no tenga tiempo para divagaciones o bajones.

Alice Cooper Barcelona Sant Jordi Club

Alice Cooper (Foto: Sergi Ramos)

Un apunte necesario en ese sentido: la cantidad de móviles que se veían en el aire era sensiblemente inferior a la de cualquier otro concierto de grandes estrellas del rock de tamaño similar. El show de Cooper se disfruta de una manera mucho más interior y orgánica, como la obra teatral de la que se trata. Con un grupo compenetrado hasta lo insultante -la banda de Alice Cooper siempre ha sido una cantera para muchos grandes instrumentistas- el show fue intercalando los éxitos necesarios (“No More Mr. Nice guy”, “I’m Eighteen”, “Poison”) con las piezas recuperadas mencionadas más arriba y algunos temas o hits menores como “Bed of Nails”, “Muscle of Love” o “Billion Dollar Babies”.

La mejor banda de acompañamiento del rock and roll

El solo de Nita Strauss fue uno de los momentos más aplaudidos. Strauss se ha convertido en estrella por derecho propio y su trabajo de apoyo al maestro Cooper es excelente, aportando el espectáculo y el flash, mientras que Ryan Roxie y Tommy Henriksen aportan el sonido más crudo y setentero en el departamento de las guitarras. El bajista Chuck Garric se desliza por el escenario cual Gene Simmons en 1977, en precisa sincronía con un insultantemente perfecto Glen Sobel a la batería, seguramente uno de los mejores que ha tenido Cooper en su historia junto con Eric Singer.

Alice Cooper Sant Jordi Club Barcelona

Alice Cooper (Foto: Sergi Ramos)

La jam de la banda sobre la clásica “Black Widow” dejó entrever la tremenda química del grupo mientras Cooper se tomaba un respiro. Un solo espectacular de batería de Sobel dio paso a la sección más teatral del show, donde “Steven” y “Dead Babies” lleva a Alice a la locura y la eventual decapitación, que no por esperada deja de ser un efectivo truco escénico que lleva al público al éxtasis. La posterior reaparición de Cooper en “Escape”, vestido con su chaqueta roja vuelve a levantar un rugido del público, igual que la aparición de un gigantesco Frankenstein en “Teenage Frankenstein”, momento con lo que el show llega a su prematuro fin.

Crónica Alice Cooper Barcelona

Alice Cooper (Foto: Sergi Ramos)

La banda vuelve, evidentemente, y lo hace con “Under My Wheels” y un necesario “School’s Out” que se convierte en el fin de fiesta más efectivo del rock and roll. Burbujas de jabón, globos, confetti, serpentinas y un Alice Cooper cargado con espadas, puñales y navajas que va pinchando globos como el sistema educativo va haciendo estallar tus ilusiones a lo largo de tu infancia y adolescencia. El fragmento de “Another Brick in the Wall” de Pink Floyd en la parte central sirve para subrayar ese aspecto y tras presentar a la banda, Cooper lleva el show a su poderoso final.

Nita Strauss Barcelona 2019

Alice Cooper (Foto: Sergi Ramos)

No hay más, la maquina está programada para 85 minutos y 85 minutos son los que dura el programa. Seguramente el show de rock mejor medido y estructurado de la historia del rock a manos de un señor de 71 años que no ha dejado de salir de gira ni un solo año desde 1995. Explícale tú eso a las bandas que llevan siete años en activo y esgrimen la excusa del cansancio y el agotamiento para cancelar giras. Aprendices…

Crónica Alice Cooper Barcelona 2019

Alice Cooper (Foto: Sergi Ramos)

Texto y fotos: Sergi Ramos

Promotor:RockNRock

Día:2019-08-08

Hora:20:00

Sala:Sant Jordi Club

Ciudad:Barcelona

Teloneros:Black Stone Cherry

Puntuación:9