ANATHEMA + ASTRA

Tal y como en su anterior gira, en la presentación de “We´re Here Because We´re Here”, bien hicieron los británicos de acordarse de Andalucía, aunque en esta ocasión solo nos regalaban una fecha y dejaran a un lado su casi obligada visita a Granada. A estas alturas del año, no hace falta decir que su nuevo trabajo “Weather Systems”, es uno de los mejores discos del presente ejercicio, y para muchos de sus seguidores, uno de los más elaborados de su ya larga trayectoria. Poco les queda por demostrar a la formación de los hermanos Cavanagh, ya están más que asentados y su masa de fieles seguidores les sigue en la misma dirección que sus tornas musicales. Es el turno de degustar y disfrutar con el cada vez más exquisito manjar que nos sirven.

Repetían ciudad, Sevilla, y repetían sala, aunque con distintos nombre. Y en esta ocasión abrían los norteamericanos ASTRA, que en su tiempo de escena dejó a más de uno con la boca abierta por su facilidad de envolvernos en un mar de melodías con saber añejo. Estos jóvenes rockeros de la vieja escuela enfundados en pantalones bell bottoms, sacaron a lucir un pequeño repertorio de temas largos de sus dos trabajos editados hasta la fecha (“The Weirding” y “The Black Chord” en este año) que engancharon a todos los presentes por su empuje e hilaridad sónica. La apertura con “Cocoon” o el cierre con el tema título de su disco debut, fueron memorables.  Se ganaron a todos los asistentes de la noche a pulso. Y es que los hay que refrescan ciertos sonidos a la vieja usanza con mucho mérito.

Las dos partes de “Untouchable” del nuevo trabajo de ANATHEMA pueden ser fácilmente lo mejor que han compuesto en su trayectoria. Así  es como comenzaron, enlazando estas dos mágicas piezas con un sonido perfecto y con una banda que transmite a las primeras de cambio. Y es que eso es un concierto de ANATHEMA, un mar de sensaciones que fluyen desde el escenario a cada uno de los presentes. Difícil es describir todo lo que puede llegar a remover a nivel individual y colectivo un show de los británicos. Es pura magia.

Comenzaron a desempolvar su anterior entrega de la mano de “Thin Air”, y siguieron con esa mística aura con una delicada y emotiva “Dreaming Light”. Uno de los momentos más conmovedores de los muchos que tuvo la noche. Cerraron este pequeño bloque recordándonos su penúltimo disco con una rítmica “Everything”. Todo iba sobre ruedas, Lee Douglas y Vincent Cavanagh trasladan al directo sus melodías vocales a otra dimensión, y la banda se mantiene robusta y delicada en el momento necesario.

Le tocaba el turno a “Judgement”, y abrían otro pequeño bloque con una movida “Deep”, que en directo siempre les queda de lujo, antes de ofrecernos una de las sorpresas de la noche. Encadenaron unas inesperadas “Emotional Winter” y “Wings Of God” para hipnotizarnos con esas atmósferas pinkfloydianas que sonaron de maravilla. Quedaron patentes más que nunca en su recta final sus labores instrumentales sumergidas en luces y humo.

Una ascendente “A Simple Mistake” fue el puente perfecto para interpretar del tirón tres piezas de su último trabajo.  Tomó el protagonista Lee Douglas en una sentida “Lightning Song” antes de descargar la peculiar “The Storm Before the Calm”. El segundo tramo de este tema es simplemente una brutalidad. De nuevo se vuelve indescriptible ese desparpajo de fuerza y poderío con la que elevan musicalmente esta maravilla de canción. No menos lograda les quedó “The Beginning At The End” y “Universal”, y es que en esta parte del concierto ANATHEMA consiguieron llevarnos a otra dimensión.  Y siguieron manteniéndonos en ese estado con la intensidad de “Closer; otro corte que poco a poco se ha ido haciendo un hueco importante dentro de sus setlist. Servía también para visitar su incomprendido “A Natural Disaster”, siguiendo precisamente con el tema título, donde de nuevo Douglas juega un papel más que importante antes de que Danny Cavanagh nos hiciera volar, nunca mejor dicho, con esas hirientes melodías de guitarras de “Flying”.

Se retiraban del escenario y estaba claro que aquí no había terminado todo, aunque  tristemente se acercaba el final de un show que se estaba haciendo corto. Un viaje de dos horas cuyo fin no se desea. Fue una sorpresa que eligieran “Internal Landscape” en los bises. No es porque la grandeza de la canción no la merezca, solo que el corte de cierre de “Weather Systems” posee muchas partes con diálogos y nunca se sabe cómo pueden quedar en vivo. Su galáctica interpretación les dio la razón a los británicos y ahora sí, solo quedaba el broche de oro de la mano de una imprescindible “Fragile Dreams”, donde todo el respetable lo dio todo vislumbrando el final.

Vuelvo a repetir. Es muy difícil llegar a explicar lo que ANATHEMA transmiten en directo. Muy pocos competidores les salen en su campo. Un campo cada vez más personal, único y genuino. Hacen casi suya la mítica frase que dice que la música es el arte más directo; entra por el oído y va al corazón. Y todo ello, permitiéndose el lujo de dejar fuera “One Last Goodbye”.