El Rock en España ha tenido momentos polémicos: uno de ellos fue que Barón Rojo se quedasen fuera de una gira con AC/DC. Esta es la historia.

La historia del rock en España ha estado llena de grandes éxitos y momentos gloriosos, pero también de episodios amargos que marcaron el futuro de sus protagonistas. Uno de los más emblemáticos es el de Barón Rojo, la banda que estuvo a punto de girar con AC/DC en Estados Unidos, pero que vio truncada esta oportunidad por decisiones empresariales.

Un ascenso imparable

En los años 80, Barón Rojo se consagraba como uno de los grupos más importantes del heavy metal en España. Con discos como Larga vida al rock and roll (1981) y Volumen brutal (1982), la banda había logrado imponerse en la boyante escena del rock duro de nuestro país, en un momento de gloria a nivel internacional y con todos los astros a favor. En Norteamérica reinaba el rock duro, en el Reino Unido la New Wave of British Heavy Metal y España, por una vez, parecía ir al compás de los tiempos. 

Según explica Mariskal Romero, destacado periodista musical y productor del sello Chapa Discos en el libro “Esto no estaba en mi libro de Historia del Heavy Metal” de Mariano Muniesa, la apuesta por Barón Rojo por parte de Chapa fue considerable.

Cuando se editó “Larga Vida al Rock and Roll” en abril de 1981 el éxito fue robusto. Tanto que la discográfica ofrece un buen presupuesto para grabar en Londres el siguiente trabajo, “Volumen Brutal”. Tal fue la conexión entre Barón Rojo y Londres que el grupo realizó actuaciones en terreno británico y, tras la edición del disco, el “bombazo” de ventas es tal que se va a por todas. Con un disco de platino bajo el brazo “se logra que el grupo actúe en el festival de Reading, el más importante de la época junto con el Monsters of Rock de Donington, vamos a Argentina, el grupo gira por toda España, en fin, todo un éxito”, resume Mariskal. 

No obstante, la oportunidad de oro llegó a mediados de 1981, cuando la banda australiana AC/DC propuso a Barón Rojo acompañarlos en su gira por Estados Unidos en otoño de aquel año, una oferta que prometía cambiar el destino del grupo para siempre.

La oferta de AC/DC

La gira en cuestión era la del álbum “For Those About To Rock” y la idea de que una banda española pudiera telonear a AC/DC en un evento de tal magnitud era inédita. Sherpa, bajista y vocalista de Barón Rojo, explicó años después en una entrevista con ésta web la magnitud de la oferta: “AC/DC nos propusieron hacer la gira de “For Those About To Rock” por Estados Unidos con ellos. John ‘Mutt’ Lange nos propuso, porque nos había visto en Marbella y le gustó la banda… El fin de gira era en el Madison Square Garden. ¿Imagínate lo que habría sido eso?”.

Sin embargo, el sueño se desvaneció rápidamente cuando Chapa/Zafiro, la discográfica que auspiciaba al grupo, se negó a pagar los 7 millones (a veces se habla de seis) de pesetas necesarios para sufragar los gastos de la gira. Según Sherpa, “Zafiro dijo que no, que no soltaba 7 kilos. ¿Qué te parece?”.

Si bien la banda no cobraría por sus conciertos y su aportación servía para financiar el engranaje de la gira de AC/DC si que, según Sherpa, “Nos permitían vender los discos y el merchandising. El fin de gira era en el Madison Square Garden… Y Zafiro dijo que no”.

«No había imagen»

La decisión de Zafiro no solo significó la pérdida de una oportunidad única para Barón Rojo, sino también un desencanto profundo en la banda y en su entorno. En palabras de Sherpa, “Era una compañía muy vaga que pensaba únicamente en esforzarse lo menos posible y ganar lo máximo posible”. Esta situación dejó una huella en la trayectoria de Barón Rojo, que, aunque siguió teniendo éxito en España y América Latina, nunca llegó a romper las barreras del mercado anglosajón.

Mariskal Romero lo explica bien en el libro “Esto no estaba en mi libro de Historia del Heavy Metal”. Romero, quien jugó un papel clave en el ascenso del grupo, explicó que el proyecto internacional de la banda fracasó principalmente porque “no tenían imagen, ni se preocuparon nunca por tenerla, lo cual era muy importante en el marketing internacional”. 

Barón Rojo

“Sé que en más de una ocasión, tanto Sherpa como los hermanos, han dicho que Chapa/Zafiro no les apoyó lo suficiente, y ese es otro mantra que se ha fabricado que no es cierto y, en ese sentido, demuestran ser muy desagradecidos” dice con rotundidad. “Para el tercer disco del grupo, ‘Metalmorfosis’, se dobló la apuesta y Zafiro, en atención también a que de Volumen Brutal se vendieron 200.000 copias, se gastó en ellos un dineral, hizo una inversión muy fuerte para que grabasen en los Battery Studios, que formaban parte de toda la estructura empresarial de Robert John «Mutt»Lange”, el productor de AC/DC que dio forma a “Highway to Hell”, “Back in Black” y “For Those About to Rock”.

“La idea era introducirles en ese entorno y lanzarles en plan fuerte a nivel internacional. La historia la he contado muchas veces y, digan lo que digan, esta es la realidad: se presentó a Barón Rojo como un proyecto para desarrollar internacionalmente y el director de los Battery Studios y más gente del entorno de «Mutt» Lange escuchó el material que grabamos y dijeron: “Ok, la banda es buenísima, se puede intentar, pero tienen que echarse atrás y tener al frente un cantante, un frontman, no que cada una cante una canción distinta”. 

Para Romero y para los actores que rodeaban a los Barones en aquella época el problema era otro: que el grupo no tenía imagen. Algo “muy importante” en el marketing internacional.

Malas decisiones

Como resultado, Barón Rojo ha dejado un legado con luces y sombras en el rock español. Canciones como “Larga vida al rock and roll” y “Concierto para ellos” siguen siendo himnos que resuenan entre generaciones de fans del heavy metal. No obstante, el episodio de la gira frustrada con AC/DC da una idea de hacia podrían haber apuntado Barón Rojo en la primera mitad de los 80, cuando absolutamente todo estaba de cara para ellos. Hoy en día sobreviven como soldados de fortuna y siguen llenando grandes salas y otras no tan grandes, pero su suerte podría haber sido otra muy distinta a nivel internacional de haberse jugado las cartas de otro modo. 

Sergi Ramos