Neal Morse es uno de esos nombres que no dejan de sonar uno que siempre habla del prog. Metido en mil proyectos, incansable a la hora de hacer lo que haga falta para trasladar su mensaje hasta la más ínfima nota de su música. Ya sea con su proyecto en solitario, en superbandas de prog o lanzando su propia plataforma de streaming, Morse es un hombre que ha sabido mantenerse relevante, y nos entrega unos valiosos minutos de sus últimos días de vacaciones para hablar un poco de lo que se trae entre manos.

“En cuarenta minutos tengo un podcast con Mike Portnoy sobre los Beatles” comenta Neal justo antes de empezar. Aunque puede que no parezca la forma ideal de comenzar una entrevista, al final todo fluye con naturalidad y sin prisas, y de hecho al tocar ciertos temas, el siempre amigable señor Morse parece contento de detenerse a profundizar en los detalles y los matices, así que al final creo que el pobre Mike tuvo que esperarse por mi culpa.

Como siempre, Neal tiene mil cosas de las que hablar y mil curiosidades que contarte sobre el millón de proyectos que solo una leyenda de su estatus puede traerse entre manos, y aunque la conversación se centra en su próximo trabajo, ‘Sola Gratia’, acabamos sacando tiempo para hablar de la fe, del mundo de la música y de los grandes planes que tiene para el futuro, así como del trágico trance que ha tenido que pasar el mundo tras la crisis del Covid-19.

Una luz en la oscuridad

Buenas tardes Neal, ¿cómo estás? Por lo que sé ahora mismo estás de vacaciones con tu mujer.

Oh tío, estoy disfrutando de estas vacaciones una barbaridad. Quiero decir, me he pasado toda esta cuarentena componiendo como un loco, y ahora que todo comienza a abrirse un poco, estoy aprovechando que aún no hay conciertos para viajar un poco con mi mujer y mi suegro. Hemos hecho un road trip de cinco semanas por Estados Unidos visitando las capitales de estado. Espero que me sirvan para volver con las pilas bien cargadas.

¿Cómo has estado gestionando esa cuarentena y esta crisis?

El secreto ha estado en tratar de aprovechar al máximo cada día. Si te soy sincero, creo que para mí la mayor diferencia ha sido que mi iglesia no se estuvo reuniendo y que cuándo lo hicimos había que hacerlo con mascarillas y con distancias, lo que quita el calor humano. Por supuesto, he echado de menos los conciertos en directos, pero hasta cierto punto hemos podido tirar de los livestreams como placebo.

Si te digo la verdad, creo que todo esto ha pasado por algún motivo. El Señor me ha permitido hacer mucha limonada de este limón. Ha habido muchas cosas buenas, al menos para mí, y creo que ‘Sola Gratia’ no habría sido el álbum que es sin todas estas circunstancias.

He escrito más música que en toda mi vida, y el miedo a la enfermedad era constante. He tenido contagios en mis círculos cercanos, y yo mismo enfermé y pensaba que podía ser por coronavirus, pero al final resultó ser otra cosa. He estado encerrado con mi mujer mucho tiempo, sin visitas ni restricciones. Aunque si te digo la verdad, tampoco recibimos muchas visitas habitualmente (risas).

Hemos sacado todo lo positivo que había que sacar de esta crisis, y no lamento ni un solo segundo. Mi único deseo es que ojalá hubiera podido ser tan positivo para toda la gente que ha pasado una situación difícil.

Crónica Neal Morse Barcelona 2019

Neal Morse (Foto: Lorena Selva)

Diste unos cuántos conciertos en Australia justo antes de la cuarentena. ¿Qué estabas haciendo cuándo todo se volvió tan dramático?

Lo único que tenía en mi calendario era acudir al Cruise to the Edge con Flying Colors, que finalmente fue cancelado. No tenía una agenda muy apretada este año, mientras que en 2019 no tenía ni un solo segundo libre, y de haber sucedido entonces, el resultado podría haber sido catastrófico. Ya sabes, a veces rezo y digo: “Señor, yo no sabía qué planes iba a tener para 2020, pero definitivamente tú si” (risas).

¿Cuáles son tus planes para lo que resta de 2020?

Si yo pudiera elegir, si fuera el presidente del mundo o algo así, primero intentaría no legislar sobre la música, sino que intentaría que todo el mundo dejara de matarse (risas).  Pero en lo que me atañe, creo que me gustaría tener a mi familia siempre a mi alrededor en mis giras europeas, poder ver a todos los grandes amigos y sentir como Dios está a nuestro lado en todo momento. Eso para mí sería una gran forma de terminar 2020. Pero claro, no es algo que vaya a ocurrir.

Un futuro lleno de esperanza

Ha pasado solo un año desde ‘Jesus Christ: The Exorcist’, lo que en el mercado actual no es mucho tiempo. ¿Qué crees que lo diferencia de su sucesor, ‘Sola Gratia’?

Es gracioso, porqué mucha gente estuvo trazando paralelos entre los dos trabajos, y es algo que nunca tuve en mente. Mi esposa me sugirió hacer otro “Sola” para hacer compañía a ‘Sola Scriptura’, y me pareció una opción muy interesante. ‘Jesus Christ: The Exorcist’ fue un álbum más orientado hacia una ejecución mucho más teatral, con un montón de cantantes invitados, y de hecho yo apenas canté en él. En la otra mano, con ‘Sola Gratia’ he querido volver a mis raíces, hacer un álbum conceptual como los que hacía al principio de mi carrera.

A diferencia de ‘The Great Adventure’, este es un álbum solista. Sin embargo, muchos de los músicos son los mismos. ¿Cómo eliges cuál es el más adecuado para cada proyecto?

Es una pregunta muy interesante. Pienso mucho en ello, lo tengo presente en mis oraciones. Antes que nada, con Mike y con Randy ya llevábamos tiempo barajando la posibilidad de hacer un álbum como los que solía hacer antes, y aún así me sentía incómodo ante la posibilidad de que quisieran participar como lo habían estado haciendo en otros proyectos. Es algo sobre lo que suelo rezar mucho porqué soy un mar de dudas, y muchas veces necesito que Dios me dé algo de claridad.

Mike y Randy han sido fantásticos. En la cuarentena tuvimos varias reuniones en zoom, porqué estaba genuinamente preocupado de que no les gustaran algunas cosas que había decidido sobre sus instrumentos y sobre cómo sonaría todo, pero parecían encantados con la dirección, y para mí fue un alivio. Quisieron cambiar muy poco. A Bill le pedí mucho consejo con cosas en el piano, y terminó haciendo muchos efectos de sonido y otros detalles que han elevado la producción.

Finalmente, Derek produjo alguno de los mejores solos que he escuchado jamás y en los que no tuve nada que ver, por lo que, aunque es un proyecto solista, el resultado ha terminado siendo eminentemente coral. Todos queríamos terminarlo deprisa, no por nada malo, sino porqué estos músicos tan fantásticos están muy ocupados siempre, y para mi sorpresa, en abril lo teníamos todo listo.

¿Qué influencias hay tras el concepto de ‘Sola Gratia’?

Me sentía muy inspirado. Hay veces que como artista te sientes como si estuvieras dando a luz, que creas sin más. Entonces empecé a pensar dónde quería llegar con todas estas ideas musicales, dónde podrían conducirme. Alguien me dijo si había pensado hacer un álbum conceptual que estudiara el corazón humano. Me pasé mis anteriores vacaciones reordenando mis ideas alrededor de este concepto, de forma que cuándo me puse a trabajar todo estaba ya bastante encaminado.

Fue una especie de progresión natural. Algo en mi interior me dijo qué tenía que ir en qué lugar, y se me hizo sorprendentemente fácil ordenarlo todo.

Hablando de nuevo sobre trabajos antiguos, ‘The Great Adventure’ fue un álbum que sorprendió a muchos con su frescura, considerando que hoy en día muchos músicos veteranos componen música en modo automático, como si hicieran solo lo que se espera de ellos. ¿Qué crees que hizo de este album algo tan especial?

Creo que es Dios trabajando a través de un grupo de diferentes personas, juntándolas y logrando que el total de sus talentos sea más que la suma de sus partes. Recuerdo que con la composición tuvimos muchos problemas con algunas secciones que parecían no querer encajar y fluir. Al final hubo esa fuerza ahí que salgo algo fenomenal de todo ello, y creo que su presencia se hace notar en la música que creamos juntos.

La industria musical del S.XXI

El CEO de Spotify ha hecho unas declaraciones un tanto polémicas respecto a que los músicos no hacen dinero porqué no hacen bastantes álbumes. Algunos artistas se enfadaron bastante, y como alguien que tiene su música en su propia plataforma, me gustaría saber cuál es tu opinión al respecto, ya que decidiste fundar tu propia plataforma.

Lo que yo piense realmente no importa mucho, porqué ese barco ya zarpó. Creo que el streaming es algo maravilloso, sobre todo desde la perspectiva del consumidor. Yo empecé a consumir mucha música a través de estos sistemas, y de hecho adapté mi teléfono de forma que pudiera sonar todo a través de mi sistema de audio analógico, y guau, se escuchaba genial, y es increíble que puedas hacer todo eso solo con tu teléfono. No hace falta que te muevas siquiera de tu cama.

Por cosas así fundé Waterfall. Quería formar parte de toda la corriente del streaming, pero no sentirme prisionero de una gran corporación. Así siento que puedo hablar directamente al oyente, pero sin tener que pasar por el aro de alguien que puede tener perspectivas con las que no estoy totalmente de acuerdo.

Neal Morse (Foto: Víctor Gallego)

Vivimos tiempo en los que la corrección política ha invadido todos los aspectos de nuestro día a día. Como un cristiano confeso y devoto que usa su música como un catalizador de su fe, ¿has tenido algún problema por el contenido de tu música?

Problemas reales no, porqué el secreto está en que no ha de importarte lo que digan los demás. Corrijo, no creo que sea algo como que no te importe, sino que sencillamente no has de considerar las opiniones de algunas personas. Al final has de consultar a tu corazón, y has de llevar a cabo lo que tu corazón quiera hacer. La opinión pública puede decir lo que quiera, pero los únicos problemas estarán en tu interior.

Al final navegas en muchos reinos. En lo que se supone que es lo más popular, lo que puedes decir y un largo etcétera. Sin embargo, al final es un ejercicio de libertad, y yo no podría crear otra cosa sin traicionarme a mí mismo y a mi honestidad artística. Sé que a muchos no les gustará, pero tampoco les obligo a ello, y al final del día consigo hacer feliz a mucha gente, por lo que no siento que nadie me esté impidiendo expresarme.

¿Consideras que la música es una experiencia espiritual?

Mi opinión al respecto es que la música es una herramienta que lima nuestras diferencias y nos hace estar más cercanos a Dios. Dios puede usar la música, porqué es el lenguaje de la emoción. Una melodía puede ignorar tu mente e ir directa al corazón, ignorando así todos los prejuicios e ideas que hayas creado. La música es algo que habla a lo más profundo, que habla más allá de lo estrictamente racional, y mucha gente sin fe es capaz de ver cómo su poder trasciende cualquier barrera.

¿Cuál es tu banda joven favorita?

Hay una banda, pero todavía no tienen nombre. Hay unos chicos con los que suelo hablar y a los que he estado produciendo, y cuándo lancen todo lo que han estado creando, creo que harán bastante ruido. No te preocupes, porqué haré todo lo posible de que lleguen a oídos de tanta gente como pueda, y perdona por ser tan misterioso, pero créeme que valdrá la pena el secretismo.

Marc Fernández