Amaranthe: a lo grande
Se han convertido en trabajadores esenciales del metal actual. Su nuevo disco, ‘Manifest’, lo pone de…manifiesto. Amaranthe han dado lugar al trabajo más redondo de su carrera.
Amaranthe han grabado el disco de su carrera. No es una hipérbole: es el sentimiento generalizado de todos quienes han escuchado ya ‘Manifest’, un trabajo que se viene gestando desde mediados de 2019 y en el que la banda liderada por Olof Mörck y Elyze Ryd ha volcado lo mejor de sí misma. Ya en junio pudimos asistir a una sesión de escucha virtual del nuevo trabajo y las sensaciones eran tremendamente positivas: uno de esos discos que parece hecho íntegramente para ser un hit. Como ‘Once’ de Nightwish o ‘Carolus Rex’ de Sabaton, son álbumes que marcan un antes y un después en la carrera de la banda.
No ha sido un viaje rápido. Desde que editasen ‘Massive Addictive’ en 2014, los suecos han ido escalando posiciones progresivamente en la escena europea, afianzándose en una posición cada vez más destacada que ha venido acompañada por trabajos como ‘Helix’ y ‘Maximalism’. Pero dos años después de ‘Helix’ el mundo es un lugar muy distinto y Amaranthe han puesto su grano de arena para revertir los traumatismos sufridos en los últimos tiempos.
“Hay muchos temas positivos y empoderadores. En este caso hemos lidiado con temáticas más serias mientras que en discos como ‘Maximalism’ teníamos canciones prácticamente fiesteras”, dice Olof por teléfono desde Alemania, donde se encuentra recluido durante un par de días en las oficinas del sello Nuclear Blast, quien fichó a Amaranthe en los últimos meses con la intención de lanzar definitivamente a la banda en todo el mundo a gran escala.
“Si estás siendo un entertainer como músico de heavy metal, no hay nada de malo, pero considero que también tenemos que ofrecer cosas más profundas como banda”, afirma. “No creo que sea bueno para Amaranthe volverse abiertamente políticos como grupo, pero también puedes tener un mensaje de algún tipo. Quizá positivo y enérgico, pero un mensaje. Si hablamos de la crisis del coronavirus o del cambio climático, quiero que la gente reciba ese mensaje como algo positivo, como un alivio. Si estamos todo el tiempo pensando que el mundo se va a acabar en un par de años, como mínimo, tendríamos que encontrar una buena manera de pasar por la situación”, dice casi contagiado por la misma positividad de las letras de ‘Manifest‘.
Desde la misma línea telefónica, Elyze hace su aportación:
“Este disco es nuestra manera de lidiar con los problemas que nos afecta a todos, también a nosotros. Cuando pensamos el titulo la idea era tener este tono empoderador y positivo. Canciones como ‘Fearless’, ‘Adrenaline’ o ‘Strong’ comparten un mensaje de celebración de la vida. La gente debe sentirse como un superhéroe, no estar pensando continuamente que todo va a salir fatal”.
Y no es fácil distraer ese pensamiento, que tanto se ha instalado en nuestra psique en los últimos siete meses, desde que la crisis poliédrica mundial en la que estamos inmersos estallase. Si bien Amaranthe tenían el disco bien avanzado cuando todo se fue al garete.
“El primer concepto o idea vino de Elyze y de mí”, explica Olof por teléfono. “Cuando no estamos girando o grabando tendemos a hablar mucho sobre todo, sobre conceptos, sobre cómo queremos hacer el próximo disco. Fue un verano de 2019 cuando empezamos a trabajar conceptualmente en el disco y en noviembre teníamos un montón de ideas en las que fuimos trabajando progresivamente hasta marcharnos de gira con Sabaton a finales de enero”.
Una gira que definen como “tremenda”, aunque tuvieron “algunos problemas” a su paso por Barcelona que “no fueron culpa nuestra”, se ríe el guitarrista y compositor. La gira les permitió volver a casa con las “pilas cargadas” para encarar la fase final de creación del disco y con una idea clara en mente.
“Queríamos que las canciones funcionasen en un contexto de grandes recintos”, dice la vocalista Elyze. “La música impacta de manera distinta al público en un gran recinto, entra de manera distinta en sus corazones”.
La banda tenía un enfoque “muy positivo”, aunque admiten entre risas que de haber empezado ahora a componer el disco, harían “uno de doom metal”.
“Una de las cosas de las que hablamos a la hora de componer el álbum fue qué elementos nos gustan más de cada uno de los discos previos que hemos hecho”, explica Olof. “Las canciones directas y concisas son lo mejor para esta banda, y eso es lo que hemos intentado hacer en este trabajo”.
“Hemos experimentado por el camino en los anteriores discos. Pero ya desde ‘Maximalism’ comenzamos a pensar en esa clase de detalles. Nos planteamos quién somos como compositores y como músicos y qué le queremos mostrar al público. Creo que el apoyo que sentimos en la gira de invierno y el hecho de tener un nuevo management que nos apoya a muerte y una discográfica que nos quiere hacer llegar a todas partes nos ha empujado a componer el mejor disco que podíamos componer”, sostiene.
Un recopilatorio de hits
Como decíamos, el álbum es un compendio de hits. Desde la velocidad, la melodía y la electrónica de “Fearless” a la melodía inagotable de “Viral” o “Adrenaline”, ‘Manifest’ está repleto de material hecho a medida para la radio. Otro tema es que las radios lo pongan en circulación. Pero es innegable que la cadencia y riff de “Strong”, tocado con instrumentos menos crudos que una guitarra y una batería con doble bombo, sería carne de Top 50 Global de Spotify. Porque sí, la generación Amaranthe consume la música en streaming. Pero dale esa canción a Ariana Grande y observa la magia. El heavy metal no está hecho -sónicamente- para las grandes masas mainstream. Pero eso no parece distraer a los suecos de su libro de estilo.
Uno de los aspectos a los que más atención presta la banda es al de los beats que sustentan las canciones del disco y la manera en que se organizan dentro del trabajo en su globalidad. “Es algo a lo que le dedicamos horas de preparación pero la gente no suele preguntarnos por ello o verlo como algo que requiera esfuerzo”, reflexiona el guitarrista Olof. “La gente acepta los ritmos como lo que son, pero no se pregunta porque están en un orden determinado”.
“Pienso que en cualquier disco has de ser equilibrado”, afirma. “Cuando preparas una canción como ‘Archangel’ piensas que debe ser animada y planificas la música sobre un ritmo de una velocidad determinada. Una canción como ‘Fearless’ la queríamos rápida, porque en ‘Helix’ y ‘Maximum’ tuvimos una apertura a medio tiempo. De cara a los shows en directo queríamos tener un tema rápido y feroz y eso también estaba planeado. Cuando pones todas esas piezas del puzzle sobre la mesa comienzas a planificar cómo fluye el disco. No puedes poner dos canciones lentas seguidas, por ejemplo. O dos canciones super rápidas”.
“Lo mismo sucede con las claves y tonos del álbum. Tienes que ser variado pero darle sentido. Hay una determinada cantidad de cambios que el cerebro humano puede asumir en ese aspecto y es algo muy importante a lo que prestar atención. Pero, por encima de todo, has de sentir el ritmo en lugar de pensar el ritmo”, explica.
Pese a la fuerza de la producción y sonido del disco, los detalles son muy apreciables. Una muestra es el solo doblado de “The Game” o las notas fantasma de la batería de Morten en muchas de las canciones del álbum; la producción respira lo suficiente como para que sea agradable en sucesivas escuchas.
“La gente piensa que todo se basa en el sonido de la batería, la guitarra o en el trabajo del ingeniero”, se queja Mörck. “La composición de las canciones es el principal factor que hace brillar o no el sonido de un disco”.
“Amaranthe es una banda donde la voz tiene mucha importancia, de modo que le tenemos que dejar mucho espacio para respirar tonalmente”, indica. “Como guitarrista tienes que pensar que por encima de tu sonido va a haber una voz humana. Otro ejemplo es el que pones con las notas fantasma de Morten: para que eso escuche yo no puedo tocar una guitarra super fuerte. De hecho, cuando escuché lo que había tocado quité algunas cosas para dejar espacio y que sonase mejor la batería. Y cuando la voz llega al último estribillo yo me encargo de empujarla con la guitarra. Esos pequeños detalles son los que hacen que el disco suene como suena. Dos bandas distintas con un mismo productor pueden sonar muy diferentes”.
El techo de cristal
Hagan lo que hagan, si algo tienen claro Amaranthe es que hay un techo de cristal en el mundo del heavy metal. Aunque salvasen al lince ibérico y donasen sus ganancias a una ONG y descubriesen la cura del cáncer, para el público de la vieja escuela Amaranthe jamás serán metal ni nada que se le asemeje remotamente. Y ese es el público que llena (o llenaba) estadios. “Es bueno poder inspirar a las nuevas generaciones”, sostiene Elyze. “Cambiar a las anteriores generaciones es algo muy complicado a cualquier nivel, no solo en el heavy metal”.
La tendencia a hipersexualizar a la frontwoman en un grupo de metal es otro de los grandes “peros” que a día de hoy sigue sufriendo una escena que se ha mantenido muy anclada en el pasado, tanto en las maneras, como en el discurso como en la estética. No parece ser algo que preocupe a la banda.
“Estamos en la situación opuesta”, explica Olof. “Tenemos una manager como es Angela Gössow, quien tiene muy claro cómo visualizar a una frontwoman en el contexto de una banda y como usarlo a favor correctamente”.
“En mi perspectiva, las mujeres son distintas a los hombres y eso es lo genial de todo esto -no debes explotarlo, pero tampoco debes obviarlo-”, prosigue. “Tenemos a publicistas, managers y agentes femeninas y creo que se está volviendo cada vez más común que la mujer tome un rol de liderazgo en el sector del entretenimiento y la música (también en el metal)”.
“Lo ideal es que en el futuro nadie tenga que prestar atención al detalle de si una banda tiene vocalista femenina o masculino pero a día de hoy, las cosas son así. Es difícil para mí juzgar esto como hombre, ciertamente”.
Elyze se suma a la respuesta con su aportación: “Para mí es raro que la gente siga preguntando por qué hay una chica al frente de la banda. Yo estaba en la banda desde que se fundó y este es mi proyecto, es mi vida. Yo nací en una familia con mujeres muy fuertes y poderosas y nunca he sentido que fuese tratada de manera distinta al resto dentro de la banda. El caso es que no me di cuenta de las diferencias hasta que giramos fuera de Suecia. Suecia es un país muy igualitario, pero no todos los países lo son y la cultura en según que países es muy distinta y, aunque me entristece, las cosas son como son”.
“El hecho de que la mujer tenga una situación distinta en otros países es parte de lo que me hizo querer trabajar incluso más duro. Quería que esta banda fuese exitosa. Quería enseñarle a la escena del metal que las mujeres podemos capitanear nuestro propio cambio. El feminismo fue creado por las mujeres, no por los hombres, y estoy encantada del éxito que estamos teniendo con Amaranthe porque eso ayuda a que ahora tengamos que tratar menos con este tipo de problemas”.
Los planes de la formación a corto plazo pasaban por giras, giras y giras. Todas ellas aplazadas o canceladas mientras los gobiernos de cada país del mundo terminan de determinar cuál es la manera correcta de contabilizar los contagios, si se debe asistir a conciertos sentados o de pie, si debemos confinarnos pese a que no esté muriendo una cifra significativa de gente derivada de la pandemia a día de hoy o si la cultura es segura o no. Un rompecabezas de difícil solución que solo se aclarará con la presunta vacuna que debería presentarse en sociedad en cualquier momento de este otoño.
“Las cosas se van abriendo poco a poco”, comenta el guitarrista. “El aeropuerto de Frankfurt hace unos días estaba atestado de gente. Los trenes en Alemania también. Pero por algún motivo, cuando tocas música, no puedes tener un recinto lleno de gente. Eso no tiene ninguna lógica aunque parece que los políticos están haciendo todo lo posible por limitar el efecto del coronavirus. No sé, vamos viendo las cosas según se desarrollan y asumiremos la nueva realidad sea cual sea”.
“Teníamos una gira europea y americana desde agosto hasta diciembre para promocionar ‘Manifest’. Fue la decisión correcta cancelarlo todo aunque podríamos haber llegado a hacer algunos de los shows quizá, pero no tendría sentido hacer solo parte de la gira. Nadie sabe cómo va a progresar todo. Las fechas de noviembre o diciembre, que parecían posibles, ahora están ya encima y las cosas siguen mal en el terreno sanitario así que es evidente que girar no es posible ahora mismo. Creo que, de momento, nos vamos a centrar en el próximo año, especialmente en primavera. A finales de año veremos qué rumbo toman las cosas en el mundo y qué dicen los políticos y eso nos permitirá poder planificar mínimamente el futuro”.
‘Manifest’ fue lanzado el pasado 2 de octubre en todo el mundo. En España se encaramó rápidamente al Top 30 de discos más vendidos en Amazon -quizá el público de Amaranthe aún compra producto físico además de escuchar en streaming-. Sea como fuere, este es el disco que sirve de palanca de cambio para una banda llamada a liderar el pop-metal (bendito género, Europe aun viven de ello) en años venideros. Y con orgullo.
Deja una respuesta
Lo siento, debes estar conectado para publicar un comentario.