Arsis: We Are the Nightmare

Desde Virginia, Estados Unidos, nos vuelven a sorprender ARSIS con nuevo retoño, tan solo dos años después de la edición de “United in Regret” su aclamada (por la crítica de su país) segunda obra de estudio que bien les valió un contrato discográfico nada más y nada menos que con el gigante Nuclear Blast. El nombre de la formación probablemente será desconocido para la mayoría, pero quizá sea esta una escucha obligada para los seguidores del extremo y de los tecnicismos en general, puesto que pocas escuchas harán falta para que “We are the Nightmare” capte la atención del oyente. ¿Los motivos? Muchos. Los detallamos a continuación y los aderezamos con una breve introducción al grupo.

Cuando ARSIS, banda formada por ex miembros de grupos relativamente desconocidos de la zona de Virginia Beach, comenzó en esto de la música, la idea centrar el estilo en los parámetros del death metal melódico añadiendo infinidad de elementos de cosecha propia. Calidad individual no les faltaba, y pronto comprendieron que podían aprovechar esa técnica y virtuosismo de los que hacían gala para caracterizar riffs, ritmos etc. Su primer disco, “A Celebration of Guilt”, no obtuvo grandes ventas pese a obtener buenas críticas. Su principal pega era la producción, que poco o nada ayudaba a una música con aires clásicos y sabor europeo. Con algunos cambios en la formación, solo dos años después, en 2006, vería la luz “United in Regret”, disco para el que contaron con la ayuda de Eyal Levi (DAATH) a la producción, cosa que se notó claramente en un trabajo que manteniendo la rapidez y complejidad de sus composiciones, así como sus aires clásicos y crudos, sonaba mucho mejor, y bien les valió, como decía antes, un contrato discográfico con Nuclear Blast.

Lo nuevo prometía, y es que trabajar junto al sello número 1 de metal extremo del mundo, no es algo que a uno le ocurra todos los días. Solo dos años han tenido que volver a pasar para que lo nuevo de ARSIS, que tiene por nombre “We Are the Nightmare” pese a que originariamente fuera llamado “Lust Before the Maggots Conquest”, viera la luz y se convirtiera por derecho propio en uno de los lanzamientos más esperados del sello en los últimos meses.  Y es que fichar por un grande tiene sus matices, y parece que el caso de ARSIS es un nuevo ejemplo de cómo una super-potencia de la música influye, aunque sea poco, en el planteamiento musical de un grupo.

Lo primero que hay que decir es que el trabajo de producción es sencillamente perfecto.  Los nuevos temas suenan con fuerza, vigor y la fiereza que merecen. Grandísimo trabajo el realizado por Zeuss (AGNOSTIC FRONT, HATEBREED, MUNICIPAL WASTE) en los Planet Z Studios, colosal también el trabajo de mezclas de Alan Douches (KATAKLYSM, UNEARTH, SHADOWS FALL). Nunca antes en su carrera habían disfrutado de mejor sonido en estudio, y su calidad bien lo estaba mereciendo.

Por otra parte, musicalmente hay cambios. La banda parece haber cambiado un poco el rumbo, y si los temas en sus anteriores discos nos inspiraban aires clásicos y elementos de vieja escuela (determinados pasajes y tecnicismos instrumentales bien pueden evocarnos al “Focus” de CYNIC, salvando distancias), ahora parece que todo suena más actual, seguramente producto del trabajo junto a personas acostumbradas a tratar con grupos de este tipo, también por evolución lógica u órdenes de los de arriba. En cualquier caso, la consigna sigue siendo la misma: velocidad, ritmos frenéticos, solos que quitan el hipo… Vamos, la orgía sónica habitual de cada disco de ARSIS se mantiene intacta, siendo el telón de fondo, por llamarlo de algún modo, lo que pueda resultar cambiado.

Nada que nos impida disfrutar de obras de arte del metal extremo como “Shattering the Spell” o “We Are the Nightmare”, esta última quizá algo más “accesible”, si es que a este guirigay de solos, armónicos, growls, blast beats o riffs mareantes se le puede llamar accesible. Impresionante "Overthrown" con ese solo magistral del inicio, el tema que subjetivamente más me sobrecoge. Técnica y velocidad a raudales al servicio del disfrute y frenesí mental del oyente, que disfrutará de cada uno de los 40 minutos que aunque breves, se harán muy intensos. No sabrás con qué tema quedarte, es más, “We are the Nightmare” te dejará tan extasiado que ni te tomarás tu tiempo en fijarte en los títulos de los temas. Gran apuesta de una de las formaciones extremas más talentosas que han llegado hasta nuestras manos provenientes del otro lado del charco.