White Skull: The XIII Skull

Sinceramente, pocas, muy pocas esperanzas había depositado yo en White Skull, una veterana banda italiana que, sin hacer mucho ruido, consiguieron hacerse un hueco en la escena después de la invasión itálica de power metal a finales de los 90. Para el recuerdo quedan aquellos dos geniales discos Tales From The North y (especialmente) Public Glory, Secret Agony. Hace un par de años ya sin Federica “Sister” al frente, ficharon por Frontiers y editaron un pasable The Dark Secret basado en los crímenes de la inquisición española, en el que abusaron del teclado aún sin contar con un teclista en la banda.

En The XIII Skull recuperan parte del terreno perdido capitaneados por el argentino Gus a las voces. Si bien Gus conseguía calcar bastante bien los tonos de Federica, ahora hay veces en las que nos puede recordar a un Tobias Sammet en versión más oscura y rasgada. Tal semejanza viene dada también por la composición de Tony “Mad” y el nuevo Danilo Bar, que se acercan peligrosamente al power metal melódico alemán. Afortunadamente siguen facturando un enorme número de temas fieles a su sonido primigenio y en muchos de ellos vuelven a tener esa gracia y facilidad por los estribillos pegadizos mientras la base rítmica machaca sin piedad dejando aparcadas todas las florituras instrumentales.

La intro de rigor da paso a un par de temas que sorprendentemente se acercan a las sonoridades de Edguy, dejando aparcada momentáneamente ese rabioso estilo vikingo, crudo y deudor de Grave Digger. Las melodías accesibles de “The Union” y (especialmente) “Top Secret” no creo que calen hondo entre sus seguidores. Las cosas van mejorando a medida que avanza el disco pese a que hay un aire felizón que acompaña el compacto. La pronunciación del argentino no es para tirar cohetes, y en “The Skulls” cola alguna palabra en castellano. Juegan constantemente con parones y pausas así como con la enorme cantidad de registros de su cantante, el cual se nota forzado siempre que ataca los tonos más altos recurriendo al rasgado, sin duda una de las características de White Skull. La entrada de tintes folk de “Creature Of The Abyss” es una inyección de adrenalina a un disco que apenas goza de buenos momentos hasta la canción nº7. Aquí empieza lo que todo fan de White Skull espera: crudeza, adrenalina, velocidad y ese toque vikingo del que hicieron gala años ha mostrándose como una banda a tener en cuenta. Le sigue a la zaga “Power Of Blood” un tema que bien podría haber aparecido en Public Glory, Secret Agony. De estribillo marcado y fuerte, como siempre han hecho, como debería ser.

The XIII Skull es un disco raro perfectamente estructurable en dos partes claramente diferenciables. Una primera en la que tratan de sonar a banda power metal típica y tópica y otra en la que se dedican a hacer lo que es esperable de White Skull. Superan con creces su anterior entrega pero queda claro que su tren ha pasado y que Federica le daba al grupo un toque distintivo que se echa en falta. Mantienen la su carrera discográfica de forma digna, nada más.