Rage: The Missing Link

Rage es un nombre de sobras conocido hoy en día, “Unity” y “Soundchaser” (y en menor medida “Welcome To The Other Side”) son los culpables de ello. Sin embargo, aun queda gente que no sale de estos discos, que si bien, son buenos trabajos, no son nada comparados con la extensa carrera de Rage como grupo de Speed/Thrash Melodico o Power Metal clásico, según se quiera ver.

La verdad es que echando la vista atrás, me es muy difícil quedarme con un disco de la banda, “Black In Mind”, “End Of All Days”, “Perfect Man”, “Secrets In A Weird World”, “Trapped!”… Demasiada calidad, es un grupo con una ingente cantidad de discos (rondando los 16 sin contar directos, singles, EP’s, material de la época de Avenger…) y gran parte de ellos, clásicos indiscutibles del genero.

Lo que tenia claro es que esta retrocritica tenia que ser con la formación clásica de la banda, esto es, Peavey Wagner, Manni Schmidt (actualmente en Grave Digger) y Chris Ephthimiades (ya se que Jörg Michael estuvo antes, pero son estos quienes hicieron grandes a Rage). Finalmente como ya habréis visto me decante por el último disco que grabaron con esta formación, “The Missing Link”, de 1993.

El disco arranca con una sirena que avisa del comienzo de “Firestorm”, un tema potente, con unos riffs rozando casi el Thrash Metal, cabe destacar que el sonido claro y potente de la guitarra de Manni es vital en este trabajo. Le sigue “Nevermore”, otro tema cañero, con sabor añejo, me recuerda en ciertos aspectos a grupos como Metallica, sobre todo por el riff principal de la canción. Otro factor importante en Rage es el bajo del señor Wagner, que como pasa con Iron Maiden, Overkill o Fortë, se oye durante todo el disco, realmente hace que la música gane en profundidad y densidad. A continuación tenemos el Single del disco (posteriormente publicado en forma de EP), “Refuge”, un tema rápido con doble bombo casi constante y melodías de guitarra pegajosas. También hay que destacar la tremenda cualidad del señor Wagner para crear melodías vocales absolutamente geniales, es uno de los aspectos que más me gustan de Rage, sin siquiera acercarse a ser un portento de la voz consigue enganchar con un poco de creatividad e imaginación.

Ahora tenemos un tema más lento, “The Pit And The Pendulum”, un medio tiempo con un estribillo que se te graba en la cabeza y no lo olvidas nunca, unos riffs bastante pesados y un solo de los que realmente transmiten, Manni Schmidt no es un genio de la guitarra, pero tiene carisma e imaginación de sobra como para sorprender con sus fraseos al más pintado. Un mini solo de batería de Chris Ephthimiades nos introduce a otro tema cañero de la banda, “From the Underworld”, más estribillos pegadizos y doble bombo a granel. Le sigue uno de mis temas preferidos del disco, “Certain Days”, otro tema lento y pesado, personalmente me encantan los estremecedores gritos de dolor que pega Wagner al comienzo de este, se me ponen los pelos de punta, el riff que sigue a esta parte es tremendamente adictivo, el headbanging surge sin desearlo, personalmente me alegro de que Peavey dejara el falsete de lado, no era lo suyo. “Who Dares” es el tema que va a continuación, adoro esta canción, recuerdo hace años como me la escuchaba entera esperando el momento en el que pegaban un acelerón de velocidad increíble, me quedaba extasiado (ahora entiendo que me gusten tanto canciones como “Spirit Crusher” de los DEATH).

El Tema que tenemos a continuación parece un chiste, me explico, “Wake Me When I’m Dead” empieza con un sonido muy raro, en plan club de Blues intimista, con un Peavey que seguramente estaría ebrio mientras lo grababa. La íntro en si solo dura unos segundos, luego ya empieza el tema con el sonido habitual del disco. Llegamos a uno de las canciones más grandes de Rage, un tema titánico y épico a más no poder, “Lost In The Ice”, en el cual ya empiezan a experimentar con violines y demás parafernalia, 9  minutos sencillamente brutales, derrochando sentimiento a cada nota. La pegadiza “Her Diary’s Black Pages” sigue la orgía musical que de este disco para llevar directamente hacia el tema que le da titulo, “The Missing Link”, un tema que se separa bastante de la onda del resto, pero que sin embargo es inconfundible en un trabajo como este, genial, Manni Schmidt tremendamente inspirado, adornando y ensalzando la guitarra en todo momento con numerosos arreglos. Para terminar tenemos un tema especial, el primero que escuche de Rage, “Raw Caress”, una magnifica impresión la verdad, un tema emotivo y rabioso (casi como dice el titulo), magníficos armónicos con vibrato, cambios de ritmo brutales y un final estremecedor absolutamente apoteósico.

No diré que este disco de Rage es el mejor de su carrera, no podría decidirme por ninguno en este momento, este fue el primero que escuche y siempre tendrá un puesto de honor en mi ranking de preferencias, un disco que nunca me canso escuchar, un clásico imperecedero. Espero que el señor Wagner recuerde lo que fueron y empiece a plantearse su situación actual, tiene éxito si, pero poco a poco se esta lanzando a la monotonía, cosa que a la larga será su ruina…