Persefone: Spiritual Migration

Desde Andorra nos llega el cuarto disco de PERSEFONE. Y uno no puede más que rendirse a la evidencia del producto de calidad que tiene ante sus oídos al escuchar ‘Spiritual Migration’. A la cabeza te vienen bandas como IN FLAMES, DREAM THEATER, OPETH o STRAPPING YOUNG LAD… todas mezcladas. Quizá sea la uno de los nombres más evidentes el del bueno de Devin Townsed, ya que si hay un maestro a la hora de mezclar melodía, progresivo y estilos más extremos, el canadiense suele venir a la cabeza.

La proyección de la banda es claramente internacional, y no por el hecho de cantar en inglés. No hay más que ver su web o redes sociales para ver que es el idioma en el que ofrecen todo… aunque también haya espacio al castellano cuando somos medios de aquí los que hacemos referencia a ellos. Puede que peque algo de largo, pero escucharlo al completo termina siendo una auténtica gozada. Con ellos se aprecia a la perfección lo que son una intro y outro curradas, de las que te dan ganas de escuchar y no notas a leguas que son relleno. ‘Flying Sea Dragons’ es un pequeño alarde de técnica que te mete de lleno con sus arreglos épicos de fondo, mientras que el final, titulado simplemente ‘Outro’ es la calma que sigue a la tormenta que hemos tenido durante más de una hora anterior, con solo un piano y arreglos de cuerda.

Lo lógico sería que en los temas más cortos y directos es donde mostraran su vertiente más deathmetalera. ‘Mind as Universe’ es un buen ejemplo, donde también cobran muchísima importancia los teclados y samplers. Pero luego te encuentras con ‘Upward Explosion’, de menos de tres minutos, donde parecen unos DREAM THEATER pasados de vuelta mezclados con el lado más “accesible” de MESHUGGAH, o con interludios precisos como ‘Zazen Meditation’, ‘Consciousness (Pt.1): Sitting in Silence’ (continuada por una más cañera, pero también instrumental ‘Consciousness (Pt.2): A Path to Enlightenment’) y ‘Metta Meditation’, de esos que no cansan y encajan a la perfección con el resto de composiciones, oxigenando la escucha completa.

Pero donde se gustan es en las canciones más largas. ‘The Great Reality’ empieza siendo un trallazo para luego convertirse en un tema rico en melodías con una parte final más progresiva pura. ‘The Majestic of Gaia’ posee unas de las partes más extremas de todo el álbum, a la par que las mejores diabluras de Jordi y Carlos con sus guitarras, mientras que para ‘Inner Fullness’ hacen su sonido más futurista, extremo, y profundizando en los arreglos en segundo plano. Para el final se guardan un ritmo más pesado en la primera mitad de ‘Spiritual Migration’ (después lo alternan con una segunda parte más progresiva y metálica), y ‘Returning to the Source’, que perfectamente podría incluirse en un disco como ‘Train of Thought’, y que para haber tenido que esperar casi hasta el cierre para disfrutar de ella, se convierte seguramente en el mejor y más completo corte de ‘Spiritual Migration’; a nivel instrumental y vocal. Lo tiene todo.

Avisados estáis que a pesar de que buena parte de las canciones por separado son muy disfrutables, es el disco al completo y de principio a fin como mejor se escucha. De esos que hay que degustar tranquilamente… dentro de la tranquilidad que te puede transmitir un estilo así.