Dark Nova: Sivilla

El caso de Grecia me resulta muy similar al de España. Incluso tratándose de
bandas que se supone que llevan media vida dentro de la escena de una forma
más o menos activa, muchas de las últimas referencias griegas no pertenecientes
a ninguna de las categorias de metal existentes dentro del metal extremo carecen
de los requisitos mínimos para que éstas puedan llegar si quiera a la media.
Da la sensación de que se ficha a una banda más por su trayectoria, lealtad
inquebrantable a la fé metálica y autenticidad que por sus dotes musicales,
sean éstas cuales sean.

No me malinterpreten; DARK NOVA no son un mal grupo y mucho menos una aberración,
pero resulta  claro que a estas alturas se debería exigir un poquito más, ya
no a las bandas debutantes que dan sus primeros pasos, sino a los grupos como
DARK NOVA con tantos años a sus espaldas, que se supone que deberían poseer
la experiencia necesaria para facturar algo más digno en todos los aspectos.
 

Los temas que componen este “Sivilla” suenan muy pobres, carentes de gancho,
incluso sosos, y si a ello le sumamos una producción tan débil y lineal, obtenemos
como resultado 12 temas insulsos con ligeros destellos y momentos de lucidez,
como “Flight to the Unknown” por ejemplo, pero que suponen un gota de agua en
un manantial.

A veces tanto los fans del Metal como los que, también siendo fans, nos dedicamos
a exponer nuestras opiniones, caemos en el error de pensar que cualquier grupo
por el mero hecho de ser técnico, complejo y/o progresivo, ya merece los mil
y un elogios puesto que se supone hace música de “calidad”. Bien, pese a que
muchos tendemos a ello, habría que darse cuenta de que las cosas no siempre
son así. Quizá por ello se entiende que bandas como FATES WARNING o DREAM THEATER
son únicas e irrepetibles.

Por muy injusto que parezca, éste es el precio que las bandas afiliadas a las
corrientes más masificadas y pobladas de la escena metálica como el power metal
progresivo han de pagar. Hace una década, un disco como “Sivilla” podría haber
destacado; Ahora, 10 años después, 4123 bandas han demostrado que lo que se
hacía tiempo atrás era superable y eso mismo se han encargado de hacer, dejando
al resto con la dura labor de acercarse de nuevo al listón, cada vez más alto
por culpa de la competitividad. Miren, no soy economista, matemático ni nada
por el estilo, simple y llanamente un vulgar melómano, por lo que mis teorías
poseen la misma validez que las de un carnicero hablando de redes informáticas,
así pues, lo mejor será, como siempre, que juzguen ustedes mismos el producto
y saquen sus propias conclusiones, así de  sencillo.