Arcturus: Sideshow Symphonies

Cuando ya creíamos que “Sideshow Symphonies”, el retorno de los dioses ARCTURUS,
no se iba a dejar caer en formato promocional por nuestras manos, nos temimos
lo peor. De hecho, un servidor tuvo la oportunidad de entrevistar al grupo en
los camerinos de la sala Mephisto para hablar de un disco que todavía no habíamos
tenido la oportunidad de escuchar, ¡Mal! Por suerte, al grupo pareció importarles
bien poco, algo que podrán deducir de la escueta entrevista que colgaremos con
ellos en los próximos días. Sin embargo, cuando ya habíamos perdido la esperanza
su distribuidora aquí en España Kindustria nos envió por fin “Sideshow Symphonies”,
¡Más vale tarde que nunca!.

Quién haya seguido la trayectoria de estos noruegos de cerca sabrá lo imprevisibles
que siempre han sido en todos los aspectos. Tras editar su debut “Aspera Hiems
Symfonia” en 1996, un disco de Black Metal Avantgarde osquestado y repleto de
terroríficas atmósferas, nadie esperaba que pudiesen lanzar un trabajo tan diametralmente
opuesto como lo fue su siguiente obra maestra “La Masquerade Infernale”, donde
el término Black Metal desaparecía por completo prevaleciendo la etiqueta Avantgarde
y dando como resultado un estilo inclasificable que a día de hoy nadie ha igualado
(digamos que tampoco son muchos los que se hayan atrevido a intentarlo). El
siguiente paso de ARCTURUS, fue tan rocambolesco como sonado; “Disguised Masters”,
un disco de remezclas donde los noruegos añadían una nueva dimensión electrónica
a algunos de los temas de sus 2 primeros trabajos. Tras permanecer varios años
en silencio, ARCTURUS sorprenden de nuevo editando otro trabajo de estudio sin
apenas previo aviso, como no, otra obra maestra, “The Sham Mirrors”, disco que
les sirvió para hacerle saber al personal que seguían vivos y en activo. En
un principio, parecía normal que una banda cuyos componentes militaban en bandas
como SATYRICON, MAYHEM, ULVER o BORKNAGAR, estuviesen demasiado ocupados con
sus labores principales como para preocuparse de su pequeña y bastarda creación
de nombre ARCTURUS. Los proyectos paralelos siempre han existido, pero el caso
de ARCTURUS era muy diferente al de los demás: Las noticias referentes a la
banda siempre han sido escuetas, prácticamente inexistentes y hasta confusas
en muchos casos, pues fueron demasiadas las ocasiones en las que se comentó
que el grupo se había disuelto, eso sí, sin confirmación oficial alguna. Cuando
todo parecía muerto en el seno del grupo, Sverd, el jefe al mando de la banda
noruega, decide meter a ARCTURUS en el Inferno Festival londinense para así
hacerle saber a la gente que todavía siguen vivos. Para sorpresa de muchos,
entre los que me incluyo, Kristoffer Rygg (Garm)  abandona el grupo y su puesto
es ocupado por un viejo conocido de la parroquia; Simen Estnaes, más conocido
como ICS Vortex, vocalista de BORKNAGAR tiempo atrás (entró curiosamente sustituyendo
a Garm) y actualmente, bajista y corista de DIMMU BORGIR. Con su nueva formación,
que también incluye al desconocido guitarrista Tore Moren, la banda anuncia
nuevo disco y lo que más sorprende; Por primera vez en más de 15 años de historia,
ARCTURUS van a realizar una gira por toda Europa con parada en España, inédito
e impensable 6 años atrás por ejemplo cuando la banda parecía más muerta que
nunca.

Coincidiendo con su paso por nuestro país, “Sideshow Symphonies” sale al mercado
mostrándonos a unos nuevos ARCTURUS, que no mejores ni peores que los de antaño,
sencillamente diferentes e igual de inspirados. Antes de todo, les diré que
éste no es un disco que entre a la primera escucha, posiblemente tampoco lo
hará a la quinta, pero cuando uno le pilla el gustillo, ya no se lo puede sacar
de la cabeza, tal y como me ha sucedido a mí con algunos de los temas en él
presentes. La única pega que he sabido encontrarle reside en el hecho de que,
a medida que transcurre el disco, los temas se van como diluyendo, y desaparece
la magia que por ejemplo contienen las 6 primeras canciones, auténticas maravillas
musicales. ICS Vortex es un cantante fabuloso, con unos registros más agudos
que los de Garm y una forma de entonar peculiar, aunque radicalmente diferente
a la del mencionado Garm, lo que hace, que aquellas intrincadas y retorcidas
melodías de voz que solo él podía sacar, han desaparecido por completo dejando
paso a un nuevo estilo vocal, sublime, pero diferente. Costará olvidarte Garm.

En el apartado instrumental, destaca la mayor presencia de guitarras en detrimento
de los teclados, que siguen teniendo un papel preponderante en la estructura
de los temas en cuanto que es el propio teclista Sverd el auténtico artífice
de las composiciones de la banda, pero que en esta ocasión, han dejado suficiente
espacio para que Knut M. Valle se luzca con sus originales riffs de guitarra
y sus siderales punteados galácticos. Finalmente, el monstruo; Jan Axel Von
Blomberg, de quién poca cosa me queda por decir. ¿Tuviste la ocasión de verle
alguna vez en directo o en video? Si creías que eso era irreal, atiende porque
en “Sideshow Symphonies” realiza seguramente el trabajo más completo y técnico
que le observado en toda su carrera. A pesar de todas estas novedades y sutiles
cambios en el universo ARCTURUS, que nadie se asuste, el sonido de la banda
sigue igual de retorcido y majestuoso que siempre, demostrando hasta qué punto,
de haber tenido una carrera más lógica y coherente, podrían haber llevado su
carrera musical hasta lo más alto.

“Sideshow Symphonies” se abre con la apoteósica “Hibernation Sickness Complete”,
una escalofriante pieza que desprende una atmósfera glaciar estremecedora, con
un Simen Estnaes cuyo trabajo frente al micro es superlativo, cuidando y puliendo
cada una de las notas, palabras y fraseos que sus cuerdas vocales desprenden,
e incluso atreviéndose con algunos alaridos guturales que te recordarán bastante
a los BORKNAGAR de hace 6 o 7  años, aquellos en los que el propio Simen estuvo.
Los teclados de Sverd empiezan a hacer de las suyas con algunos sonidos impredecibles
difíciles de ver en el resto de discos de Metal que circulan por ahí, recreando
unas atmósferas únicas que desde el primer momento asociarás a ARCTURUS. Hellhammer,
una vez más, lo borda. Escucha el pasaje donde empieza a hacer redobles de timbalas
a la velocidad de la luz con el bombo a toda pastilla y la caja mucho más pausada,
¿Has oído algo similar alguna vez? Lo dudo. A pesar de estas complejas estructuras
y formas musicales, ARCTURUS poseen la capacidad de no saturar al oyente, logrando
que “Hibernation Sickness Complete” sea incluso pegadizo y fácilmente memorizable.
Disfruta de esta pequeña joya y sube el volumen de tu equipo de música pues
la producción es enorme, gigantesca, nítida y cristalina, óptima para el estilo
que ARCTURUS practican. Con la siguiente “Shipwrecked Frontier Pionner”, se
da el mismo caso que con el tema anterior; Toda la complejidad que rodea al
sonido de esta banda no evita en ningún momento recargar las composiciones hasta
unos topes insoportables. De nuevo Simen realiza un trabajo sublime, alcanzando
en muchos casos esos agudos de falsete que tanto gustan a todos aquellos que
han sabido apreciar su trabajo en bandas como BORKNAGAR o DIMMU BORGIR. Hellhammer
sigue haciendo de las suyas y no para quieto; Un verdadero vendabal. “Deamonpainter”
es la clásica pieza relajada, como si de música Chill Out en clave de Metal
se tratase, donde todo el papel recae sobre los dedos y las teclas de Sverd,
¡Cuyo lucimiento solo se ve entorpecido por un estruendoso erupto!, que da paso
al propio tema en sí, más pausado y atmosférico que los 2 anteriores, aunque
igual de barroco y melódico. “Nocturnal Vision Revisited” sigue en las mismas
coordenadas que “Daemonpainter”, recordándome bastante a algunos pasajes de
“La Masquerade Infernale”, disco donde ARCTURUS lograron introducir en su sonido
metálico todas esas ambientaciones más propias de una carpa Chill Out que de
un grupo de exBlack Metaleros. Simen baja de tono sus registros vocales, mostrando
unos nuevos, de carácter medio, relativamente inéditos en sus trabajos como
vocalista editados hasta ahora. “Evacuation Code Deciphered” empieza con una
intro de Sverd que da paso a una de las piezas más genuínamente ARCTURUS de
todo el trabajo. Si cierras los ojos por un momento podrás transportarte a “La
Masquerade Infernale” o “The Sham Mirrors” sin ningún tipo de problema, con
ese tipo de cambio de acordes donde guitarra y teclados suelen ir unidos de
la mano y que producen esa sensación chocante, hiriente y cortante, que se ve
acrecentada por unas voces maníacas de Simen y unas orquestaciones de Sverd
únicas que solo un genio como él sabe plasmar en un disco sin ser tachado de
loco. “Moonshine Delirium” vuelve a dar en el clavo siendo otra de las grandes
piezas de este disco y donde mejor se pueden apreciar las 2 facetas de ARCTURUS;
La retorcida y la más pegadiza, melódica y accesible, combinación que muy pocos
han sabido conjugar de forma tan sensata, arriesgada y satisfactoria. “White
Noise Monster”, posee más velocidad de lo normal en un tema de ARCTURUS y para
mi gusto, no es de las más acertadas, demasiado previsible (a excepción de la
voz, seguramente éste sea el tema más cercano a “Aspera Hiems Symfonia”). Tras
la curiosa instrumental “Reflections”, el disco llega a su fin con “Hufsa”,
un tenebroso tema que deja patente la voluntad de oscurecer su sonido en detrimento
de lo que la banda plasmó en “The Sham Mirrors”, disco excelente, pero que ya
no poseía el “mal rollo” de sus 2 anteriores trabajos. Presten atención al solo
de guitarra de Knut M. Valle en esta pieza, ¿Cómo puede ser que a este tipo
no se le reconozca como uno de los grandes genios de la guitarra? Hay cosas
que no entiendo.      

Mientras el tiempo, las opiniones, la crítica y los resultados no digan lo
contrario, ARCTURUS me parecerán la banda más infravalorada actualmente de todo
el panorama metálico “extremo” (nótense las comillas pues este término, entra
con calzador en el contexto musical actual de ARCTURUS).

Deja los prejuicios de lado y dale una oportunidad a este trabajo. En un mundo
repleto de productos fácilmente digeribles y dirigidos hacia un público que
consume discos como churros (sí, de Heavy Metal también), una joya como “Sideshow
Symphonies” posee un valor incalculable que una vez más, será saboreado por
muy pocos, aquellos que estén dispuestos a estrujarse un poco la cabeza y darle
más de 5 escuchas a un disco.