Deicide: Scars Of The Crucifix

DEICIDE ha sido siempre una de las bandas de Death Metal más polémicas de la escena americana, practicando una música extremadamente agresiva, satánica y cruda, muy cruda, con grandes joyas como el propio “Deicide”, “Legion” o “Once Upon The Cross” y sobretodo, con un frontman, que es un autentico bocazas…

El cual en un oportuno día declaró que se suicidaría cuando alcanzara la edad cristo para demostrar que era el más malote de su portal… Anécdotas absurdas a parte tenemos el nuevo trabajo de DEICIDE, “Scars Of The Crucifix”, con el cual vuelven tras algo más de un lustro de mediocridad musical en los cuales, sinceramente, apenas les he hecho caso… ya que para mi su ultimo gran disco fue “Once Upon The Cross”, afortunadamente en este álbum parecen haber recuperado el rumbo, pero vaya, no encontramos nada que no hayamos oído ya.

Como grupo de primera fila en el Death Metal americano que ha sido DEICIDE, con bandas de la talla de CANNIBAL CORPSE o MORBID ANGEL, el revuelo mediático y promocional que generan los trabajos de este grupo siempre es alto, muy distante de grupos de menor edad, (que no de calidad), como los geniales DECAPITATED, HATE ETERNAL o NILE, por citar unos pocos. Afortunadamente estas bandas están creciendo a pasos agigantados, sobretodo NILE (de lo mejor de USA en metal extremo), sinceramente lo merecen.

Metiéndonos directamente con el disco del señor Benton y compañía, antes de nada merece la pena destacar la brillante producción de la que hace gala, a estas alturas es prácticamente inimaginable un disco de una banda puntera con mala producción, pero mejor cruzar los dedos no vayan a salir más St. Anger’s (disco adelantado a su tiempo como diría su baterista… gracioso, cuanto menos…).

El compacto nos introduce con la propia “Scars Of The Crucifix”, en un principio la impresión no es muy buena, comienza con un riff cañero, de corte casi Thrasher, pero no se percibe el Death Metal de corte brutal que se espera de una banda como esta, esta sensación se esfuma en sucesivos temas e incluso en la continuación de este mismo, donde echan toda la carne al asador dotando el compacto de una agresividad propia del genero.

Se siguen sucediendo los temas a lo largo del disco, “Mad At God”, “Fuck Your God”, “When Heaven Burns”… Está visto que el tema de las letras sigue siendo el mismo, está bien para un grupo de chavales de 19 años que están empezando a dar caña por los cuatro costados como eran DEICIDE en sus inicios, pero empiezo a ver algo forzada esta pueril y obsesiva temática antirreligiosa.

Benton como siempre esta pletórico, tiene una de las voces más potentes de la escena, capaz de hacer lo que quiera luciendo una brutalidad acojonante, como siempre, en gran parte de los temas combina su guturalidad grave con la voz chillona y blacker que tan característico le ha hecho, en ese aspecto no habrá ninguna decepción. Como tema destacable me quedaría con el ultimo, “The Pentecostal”, todo una demostración de técnica al alcance de muy pocos.

En líneas generales es un disco que gustará a los fans del estilo, a los acérrimos del grupo seguramente guste bastante, pero dudo que nadie lo sitúe por encima de sus 3 primeros discos, que para mi al menos, son insuperables.