Kain: Revelaciones

Tras cuatro discos y dos EP’s, los vallisoletanos KAIN son una banda con experiencia en el estudio. Se nota, pues, que hay tablas cuando uno escucha “Revelaciones”, su último ofrecimiento discográfico. Que estilísticamente sean más de lo mismo es algo que sucede cíclicamente y no tiene arreglo posible. En determinados momentos, salen eclosiones de bandas que hacen cosas muy similares. Es obvio que el metalcore y el metal más técnico son estilos muy populares hoy en día y las bandas tienden a dejarse influir, por lo que “Revelaciones” es algo así como una instantánea de donde estamos hoy en día musicalmente a través de una banda llamada KAIN. Ellos lo hacen sobradamente bien (vamos, no tienen nada que envidiar a la mayoría de grupos internacionales, ni en sonido ni en instrumentación y producción) pero siempre queda ese puntito de resquemor en plan “¿no hemos escuchado ya esto antes?”.

A su favor hay que decir que ciertas influencias black-death en momentos puntuales, llámese “Loco”, les dan un toque distintivo. La mezcla de voces limpias y brutales está más vista que el tebeo, pero bien ejecutada y con un vocalista solvente como Miguel Angel López, el asunto sigue siendo resultón. También destaca el baterista Iván Arevalo, que posee un buen juego de doble bombo en canciones como “Sin Piedad” o “Quimera”, aunque la precisión falla en ocasiones como en el inicial “Dogma”. Aunque pueda parecer un fallo a priori, no deja de ser humanizador escuchar una pequeña descoordinación en la batería ahora que todo el mundo tira de cuantizaciones y corta-pega varios para perfeccionar al máximo un instrumento que no siempre es matemáticamente perfecto.

Aunque pequen de poco originales, KAIN demuestran en “Revelaciones” que pueden reiterar lo ya expuesto sin equivocarse lo más mínimo y dándole un toque de frescura que solo una banda de gente con hambre por la música puede dar.