Aborym: Psychogrotesque

Psicológicamente alterados y grotescamente desquiciados. Más o menos así es como podrían ser descritos los 3 entes pensantes detrás de esta formación italiana de reconocido prestigio apodada ABORYM.

Con un pasado más vinculado al Black Metal de corte algo más clásico (aunque igualmente dado a la experimentación y el gusto por lo industrial), los italianos se presentan 4 años después de su aclamado “Generator”, de nuevo con Season of Mist, con un rocambolesco trabajo titulado “Psychogrotesque”, un disco donde el Black Metal y la música electrónica/industrial conviven en difícil armonía.

Al frente del combo se encuentra Malfeitor Fabban quién abandonado por sus máximos valedores, Seth Teitan (DISSECTION, WATAIN) y Attila Csihar (MAYHEM), ha encontrado en Paolo Pieri y Bard Faust (EMPEROR, THORNS), sus nuevos aliados. De cualquier modo, el enfoque musical de ABORYM prosigue intacto, y eso siempre será sinónimo de garantía.

“Psychogrotesque” es un trabajo complejo y por supuesto no es apto para el paladar del fan medio del Black Metal. Primeramente hay que tener una abertura de miras que muchos seguidores del estilo no suelen tener y segundo, aún siendo abierto de mente, este nuevo trabajo de ABORYM pondrá a prueba de bomba tu capacidad de asimilación y tolerancia hacia sonoridades poco comunes y habituales.

Partiendo de una base, digamos, “Black Metal” (Pónganse aquí muchas comillas), ABORYM rompen las reglas de juego con una propuesta transgresora que incluye arreglos industriales de toda clase, pasajes minimalistas que rozan el ambient e incluso algún que otro toque electrónico que despojado de todo Metal bien podría sonar tranquilamente en cualquier pista de baile de Ibiza. ABORYM, imaginamos, son conscientes de que juegan con fuego, por ello, intentan buscar el equilibrio en todo momento entre lo metálico y lo ajeno, lográndolo en mi opinión.

Me resulta imposible citar a una sola banda que transmita algo parecido. Exceptuando los últimos trabajos de DODHEIMSGARD, pocas más me vienen a la mente. Suponemos que un trabajo así debería ir dirigido a todos aquellos ya un poco cansados de oír siempre el mismo tipo de disco de Black Metal… Ahora, cuidado, no te enganches demasiado no sea que pierdas el norte y acabes bailoteando en el lugar equivocado.