Un disco que llega a la cota de calidad de “Crystal Eye” e incluso la empuja para arriba. Raíces bluesies y mucha actitud para una voz privilegiada. Lástima que el disco llegará a una reducida minoría.

Muy grande… Si ya en el anterior “Crystal Eye” aplaudimos el buen hacer y calidad de la obra por parte de Leon Goewie, esta vez vuelve a elevar el listón. No es fácil para un grupo holandés que vivió su esplendor décadas atrás el ser capaces de sobrevivir en la actualidad. Pero esta nueva formación disfruta de un momento exquisito y los discos de heavy metal tradicional que facturan son pequeñas joyas destinadas, eso sí, a que una selecta minoría las adore. Cabe recordar que por las filas de Vengeance ha pasado gente como Arjen Lucassen o Ian Parry (Elegy), pero el único miembro fundador que queda es el cantante Leon Goewie, que ha armado una banda más que competente y poderosa. Muchas guitarras, gran colección de canciones, mucha variedad y sobretodo protagonismo para una voz excelente. Leon parece estar mejor que nunca.

El disco sigue la línea marcada de su inspirado anterior disco, pero aquí todo suena más crudo y desgarrado. La labor de composición es más que notable, y lo notamos desde el inicio con la intensa “World Arena”. Tema con dejes sleazy, especialmente en el estribillo, sacado de las alcatarillas. La garganta de Leon se va desgarrando a medida que avanza el tema. “Tears from the Moon” no le va a la zaga y es otro gran ejemplo de lo que es capaz de ofrecernos Vengeance en pleno 2014. Medio tiempo intenso con un estribillo cercano a Queensryche, especialmente por la gran voz de su líder. Mucha atención a “Raintime” y a “Sandman”, ambas dos joyas realmente inspiradas. Estribillos muy brillantes y un Leon excelente que borda los estribillos. Cabe mencionar la gran base rítmica, pero sobretodo el trabajo de guitarras por parte de Timo Somers. Pero si hablábamos de variedad y de temas impresionantes hay que pararse en “Back to Square One”. De inicio puramente Whitesnake pero de desarrollo bluesero a lo Zeppelin. Intensidad, clase y mucho sentimiento. El sr. Goewie demuestra aquí que juega en otra liga. Alucinante…

Vuelve en “Headquake” la guitarra más sucia y la producción descarnada. Otro temazo a la saca con mucha actitud y unas guitarras semejantes a las de grupos tipo Crashdiet. En “Train” dan mucho protagonismo al bajo de Emile Marcelis, marcando groove, con tintes funk pero terminando con un estribillo rockero con guitarrazos muy marcados. “Mirrors” cuenta con uno de los estribillos del álbum, pero en “Piece of Cake” hay otra vuelta de tuerca. Puro estilo vacilón a lo Mötley Crüe que les funciona de maravilla. Un tema que es carne de directo y que engancha. Muy 80ero pero plenamente actual. Realmente lo de esta gente tiene mucho mérito. Cierran con “Goodbye Mother Sky” en la que abren fuego con un sitar. El tema más extenso en medio tiempo y con mucho sentimiento.

Un disco excelente dónde destaca en sobremanera la composición. Grandes temas, mejores estribillos y un cantante que empieza a reclamar su trono. Hay mucha variedad, sumo gusto e incluso originalidad muy a pesar de que estamos hablando de un género en el que ya está todo trillado y más que trillado. Producción cruda, momentos muy sleazies pero sofisticación y unas guitarras impresionantes en muchos momentos. Un disco que llega a la cota de calidad de “Crystal Eye” e incluso la empuja para arriba. Raíces bluesies y mucha actitud para una voz privilegiada. Lástima que el disco llegará a una reducida minoría. A ver si Espectros o la gente del Metal Cova tienen la oportunidad de traer a Vengeance a nuestras tierras.

Grupo:Vengeance

Discográfica:SPV

Puntuación:9

Canciones:

  1. World Arena
  2. Tears From The Moon
  3. Raintime Preload
  4. Raintime
  5. Sandman
  6. Back To Square One
  7. Headquake
  8. Train
  9. Mirrors
  10. Piece Of Cake
  11. Goodbye Mother Sky

Año:2013-08-21

Votación de los lectores:5