Esta gente no para… Estos suecos se han decidido a inundar el mercado de discos, DVDs y lo que haga falta en pos de aprovechar este gran momento vital. Hay que reconocerles mil méritos y es una lástima que todavía no hayan asomado más allá de Centroeuropa y Escandinavia. A golpe de estribillo y de buen hard rock prosiguen con su escalada, si bien este “Performocracy” puede que descoloque a unos cuantos de sus más fieles seguidores. Siguen siendo los mismos, cierto, pero es evidente que hay un cambio evidente en su sonido, como barnizado en oscuridad. Han perdido algo de luminosidad, pero todos los elementos con los que les hemos visto nacer siguen allí. Tras unas cuantas escuchas el susto inicial queda reducido a nada.

Siguen siendo unos maestros en tareas de composición. Pues juegan en terrenos manidos y trillados, pero ellos continúan consiguiendo auténticos himnos con estribillos para el recuerdo. Sin ir más lejos “Father to a Son” es el perfecto ejemplo de lo bien que juegan sus cartas. Otro clásico que se sacan de la chistera sin despeinarse. Por otro lado hay temas que descolocan excesivamente como el inicio de “I Believe in You”, sumamente oscuro y poco Poodles, incluso con un filtro en la voz de Jakob Samuel. La sorpresa ya había saltado en la inicial “I Want it All” (nada que ver con Queen). Hay un evidente lavado de cara a su sonido y un paso adelante para sonar más actuales. Pero repito, tras la sorpresa inicial la cosa funciona, esos estribillos inmaculados siguen allí.

Espectacular es “Cuts Like a Knife”, entrada a piano y evolución a medio tiempo con otro puente y estribillo para enmarcar. Coros perfectos y un sonido y estilo perfectamente emparentable al de Tobias Sammet en los últimos discos de Avantasia: siempre melódico pero oscuro y actual. La evocadora balada “Time Is Passing By” posee mucha influencia Bon Jovi y la verdad es que funciona a la perfección. A pesar de ello es de los temas que podemos catalogar como más raros del disco. Siendo sinceros hay que comentar que hay algún corte que está allí para cumplir expediente y poco más, caso de “Love Is All”, con una entrada copiada del “Welcome to the Jungle” de los Guns. Ni el gran solo de Bergqvist lo salva.

Posiblemente sea su disco menos atractivo y pegadizo de cuantos han grabado, pero demuestran que están experimentando y que la chispa y las musas no les han abandonado todavía. Muestra de ello es “Bring Back the Night”, muy en su línea clásica y pegadiza. Finalizan con la correcta “The Quiet Night”, un medio tiempo oscuro con curiosas percusiones y con “Dont Tell Me”, otra vez con el iano muy presente. Un tema de inicio teatral y que se desmarca bastante de su sonido clásico. La verdad es que el final del disco resulta bastante lineal.

Siempre es bueno que las bandas no se estanquen y que se atrevan a ir más allá de lo que los fans pueden esperar de ellos, pero cuidado, The Poodles están jugando con fuego y podrían cortar su trayectoria ascendente con este viro sorpresivo. Nadie esperaba a estas alturas un volantazo sónico, pero esto es lo que hay en “Performocracy”. Realmente las cosas no han cambiado tanto, pero es lo primero que uno aprecia al escuchar el disco, así que a ver qué opinan sus fans.

Jordi Zelig Tàrrega

Grupo:The Poodles

Discográfica:Nuclear Blast

Puntuación:7

Canciones:

  1. I Want It All
  2. Until Our Kingdom Falls
  3. Father To A Son
  4. I Believe In You
  5. Cuts Like A Knife
  6. As Time Is Passing By
  7. Love Is All
  8. Your Time Is Now
  9. Action!
  10. Bring Back The Night
  11. Vampires Call
  12. Into The Quiet Night
  13. Dont tell me

Año:2011