Blackmore’s Night: Paris moon

Son muchos los artistas que han encontrado inspiración bajo la luz de la luna de París, y un artistazo como Blackmore supongo que se moriría, o por hacerlo o por hacer feliz a su princesa encantada Candice, mujer de enorme belleza y voz de sirena. No entraremos en valorar el mágico influjo de la sra. Night, de si es madrastra mala o princesa de cuento; pero que quede claro que soy de los que piensan que Blackmore ha sucumbido cual Ulises a los cantos del amor de una criatura semidivina (para él), sólo que a diferencia del aqueo no mandó atarse al mástil mayor y el influjo le atrapó.

A pesar de que para él el cuento acabó bien (no para la mayoría de sus fans), que vive en su castillo, come perdices y musicalmente ha ido siglos atrás, no podemos negar la belleza enorme que ha conseguido en muchas de las composiciones grabadas por el matrimonio feliz. Este DVD supera incluso al anterior y el set-list es toda una maravilla.

Ambientación, ropajes de época, muchas cámaras, planos detalle y belleza, mucha belleza por parte de todos y cada uno de los intérpretes que aquí participan. Soy de los afortunados que asistieron a finales de los 90 al concierto de Barcelona de Blackmore’s Night y confieso que fue uno de los shows definitivos de mi vida. De toda esa magia vivida ese día hay gran parte reflejada en la grabación que nos ocupa, y eso que ya ha llovido.

El grupo ha perdido bastante en disco pero sus directos continúan siendo excepcionales. Poco hay que añadir frente a composiciones atemporales como “Shadow of the Moon”, “Play Minstrel Play” o “Home Again”. Cuando Candice habla su voz es todavía más dulce que cuando canta, todo un prodigio. Las sorpresas respecto a su antecesor son varias y aquí los antiguos fans de Blackmore disfrutarán con “Soldier of Fortune”, excepcional, pero especialmente con “Diamonds and Rust” de Joan Baez, popularizada dentro del mundillo del heavy metal por los Judas Priest, si bien Blackmore respeta mucho la original. De hecho los propios Judas en tiempos de Ripper Owens optaron por ser fieles a la grabada por Baez, y es que este tema es sobrecogedor.

Han metido un tributo a Ian Anderson en “Rainbow Blues” y el “Saint Teresa” de otra Joan, Osborne esta vez. Lo que pocos esperábamos era el “Ariel” de Rainbow del infravalorado STRANGER IN US ALL. Disco clave pues Candice entró de corista en ese disco y… bueno, ya sabéis la historia. Es un placer ver a Blackmore acariciar su guitarra, ya sea eléctrica, acústica o unos espaguetis pinchados a un palo, “Minstrel Hall” es el más claro ejemplo; de verdad que consigue poner la piel de gallina. En “Home Again” hay un mix festivo medieval en el que participan todos los músicos demostrando el porqué acompañan a esta leyenda viva.

Se acompaña el DVD con un disco en vivo recogiendo lo más destacado del concierto pero también hay un par de temas inéditos interesantes. Todos los que amen a Blackmore tienen este DVD de obligada compra o visionado. No defrauda aunque no toque rock, y eso deberíamos valorarlo todos. Ser capaz de jugar a castillos y princesas y dejarnos a todos con la boca abierta es algo que sólo puede lograr Ritchie Blackmore.