Magnum: On the 13th Day

Os propongo un viaje a los dorados años 80, Magnum representa lo poco que queda de ese sonido en la actualidad, un grupo que siempre de manera inexplicable ha estado en un segundo plano, es la clásica banda que por azares de la vida no ha estado en el momento  y lugar oportunos para consagrarse como una de los grandes en su género.

Siempre me ha parecido increíble, que bandas de mucha menos calidad que los británicos hayan triunfado, es cierto que la imagen es también muy importante dentro de la escena rockera, pero ni mucho menos debería eclipsar a la música, a fin de cuentas un artista debe medirse por lo que es capaz de ofrecer a nivel artístico y no por cuántas grouppies es capaz de llevarse a la cama; está claro que los MAGNUM pertenecen a los chicos feos del rock, esos que no tienen imagen pero sí mucho que decir con su música

Esta nueva obra de los británicos no es “Wings of Heaven”, pero sí se queda cerca en calidad y buen hacer de la obra magna de los ingleses que nació en 1988.

En “On the 13th Day” reiteran todos los elementos que les definen como banda, Hard Rock melódico, en algunas fases A.O.R. total sin abandonar apuntes progresivos, que hacen que su obra sea de los más heterogénea, en cuanto a estilos se refiere.

La santa trinidad conformada por el vocalista Bob Catley, el guitarra Tony Clarkin, y el teclista Mark Stanway, forman la base sobre la que gira todo: teclados y orquestaciones, riffs melódicos y la voz de Bob dando empaque a todo el conjunto, su sello es inconfundible, si faltara alguno de ellos, el sonido MAGNUM sería otro, y por cierto, de muy baja calidad.

El sello que hemos comentado se encuentra ya reflejado desde el principo, “All the Dreamers” abre el fuego de la pistola de manera inequívoca, intro de teclados y  el vocalista nos empieza a susurrar que el viaje ha comenzado y que no pararemos de disfrutar hasta el final, todo en un tono a medio tiempo, marca de la casa que se repetirá en temas como “Dance of the Black Tattoo” o “Shadow Town”.

El A.O.R. de alta escuela encuentra su reflejo en “ Blood Red Laughter”,pero sobre todo donde se manifiesta en todo su esplendor es en la magnífica “So Let It Rain”, el piano acapara todo el protagonismo, erigiéndose como solista absoluto del tema, cambios de ritmos perfectos engrandencen un tema de factura impecable.

Una de las canciones más poderosas y contudentes del álbum es “Didn t Like You Anyway”, aquí es donde la guitarra capitanea la canción, combinándose constantemente con orquestaciones y teclados muy ochenteros, ritmo a raudales para una gran canción.

El grupo se desenvuelve de manera magistral en la utilización del medio tiempo con cambios de ritmo que enlazan el tema com ritmos melódicos y tintes progresivos,  en “On The 13th Day” donde una intro de teclados y una voz del vocalista a modo de balada desemboca en un derroche de rock y buen hacer. Repiten esquemas en “Broken Promises” aunque el tono de voz y el ritmo de la canción no es tan lento al principo como la anterior canción comentada.

Por último destacar la gran balada del disco “Putting Things In Place”, toda la versatilidad que atesora Bob Catley la desarrolla en este tema, dulce y atmósferico a la vez que nos hacer ver cómo pueden acercarse al Rock Progresivo y salir airosos del envite.

Buena obra de los MAGNUM, no cambian en su estilo, suena todo parecido, pero merece la pena volver con ellos a aquellos dorados años una y otra vez.