Metal God Essentials Vol.1

No se hasta que punto Bruce Dickinson y Rob Halford son amigos y hablan entre ellos, además de haber grabado un tema conjunto llamado “The One You Love To Hate” en el primer disco en solitario de HALFORD bajo ese apelativo concreto. Pero si que parece que Halford ha aprendido de Dickinson que, si te reunes con tu banda de toda la vida, lo mejor es que no te olvides de tu carrera en solitario y que vayas recordando a la gente que no sólo de JUDAS PRIEST vive el hombre, sino que don Roberto también tiene una serie de trabajos en solitario más que validos y muy apreciados por los fans. Mientras que Dickinson ha editado recopilatorios de su trabajo en solitario e incluso ha hecho alguna que otra gira por festivales como artista en solitario desde que volvió a IRON MAIDEN, Rob Halford se ha mantenido bastante más reservado desde que en verano de 2003 anunciara su re-entrada en la legendaria banda de Birmingham que se hizo grande gracias a su distintiva voz.

Aprovechando el parón compositivo que ha supuesto la preparación del nuevo disco de JUDAS PRIEST, “Nostradamus”, Rob ha cogido todo su fondo de catálogo en solitario y lo ha puesto en orden. Ha recuperado las grabaciones que hizo para el sello Sanctuary y que detonaron su carrera bajo el nombre HALFORD (“Resurrection”, “Live Insurrection” y “Crucible”) e incluso ha recuperado el material que grabó con FIGHT poco después de su poco popular salida de JUDAS PRIEST a principios de los ’90. Con todo esto y alguna que otra rareza, Rob y su nueva aventura, Metal God Entertainment, han conseguido un disco compacto como pocos cargado del mejor metal que jamás ha dado la carrera de Halford como artista independiente.

El pack, que ya salió a la venta en Estados Unidos a finales del año pasado en formato digital, incluye un CD y un DVD. El DVD es cualquier cosa que uno pueda esperarse: documentales rapiditos, mucho videoclip y alguna que otra ojeada a las grabaciones, ensayos y otros momentos más o menos poco vistos de la historia de Halford en años recientes.  El Cd es lo verdaderamente interesante del lanzamiento: incluye un total de dieciséis temas, algnos de ellos remezclados y otros simplemente modificados de algun modo para que suenen más frescos. Sea cual sea el truco, es un buen ejercicio lo de investigar en la discografía reciente de Halford. Tanto su disco de resurrección como el posterior (“Crucible”) son obras que sirvieron para resituar el perfil de Rob en el  mundo del Heavy Metal. Como si hicirera falta! De modo que, lo más interesante de la escucha es, obviamente, ver como se las gastaba Rob en los años previos a su entrada en JUDAS PRIEST y la eventual reunión.

Canciones como “Silent Screams”, “Resurrection” o “Locked And Loaded” son ejemplos perfectos de cómo Halford quiso emular el sonido clásico de JUDAS PRIEST cuando decidió lanzarse de cabeza al Heavy Metal tras la aventura industrial de TWO. Es interesante ver como Rob, uno de los creadores de ese sonido, intenta recuperar su propia esencia cuando ya todo el mundo la daba por perdida. No creo que sea el único al que los gritos iniciales de “Resurrection” le ponen la piel de gallina…

Por otra parte, también se antoja interesante la inclusión de dos nuevos temas, titulados “Forgotten Generation” y “Dropout”, ambos grabados especialmente para la ocasión. Evidentemente, no suenan como si fueran parte de un disco más cohesivo, más bien parecen un poco descolgados en el contexto general del recopilatorio, pero para los más completistas serán un par de buenas adiciones a la colección de himnos metaleros del metal god.

Por último, cabe mencionar que el trabajo de Roy Z al lado de Halford fue de lo más subestimado de la historia del rock, casi tanto como sus trabajos junto a Bruce Dickinson. Que un guitarrista semejante nunca haya disfrutado de más notoriedad como instrumentista (que no como productor) es significativo.