Sinner: Mask Of Sanity

Muchos años han pasado desde que SINNER editaran su último disco. Fue en el 2003 cuando “There Will Be Execution” salió a la luz, entonces a través de Nuclear Blast. En ese periodo de tiempo hasta la edición de “Mask Of Sanity” – casi cuatro años – en SINNER ha habido tiempo de cambiar varios miembros y al propio vocalista y bajista Mat Sinner le ha dado tiempo de girar por todo el mundo y grabar algun que otro disco con sus PRIMAL FEAR del alma. Y es una pena, realmente. Porque SINNER son una gran banda que, con frecuencia, suele ser olvidada por los que disfrutan del hard y heavy alemán. Sin ir más lejos, SINNER son unos de los precursores de todo el metal germano, editando discos geniales desde aquel  “Wild And Evil” del 82. Y aunque a día de hoy ya no facturan himnos como “Born To Rock” o “Lost In a Minute”, si que son capaces de seguir dando guerra con discos como éste “Mask Of Sanity”.

No es un secreto que la base del sonido de SINNER sea el propio Mat.  A fín de cuentas, su voz es la que protagoniza todos los temas. Pero, por suerte, el también bajista ha sabido mantener la cabeza fría durante todos sus años en PRIMAL FEAR como para no mezclar estilos indiscriminadamente. Cuando escuchas SINNER sabes que vas a escuchar temas de hard-heavy ochentero sin concesiones y cuando escuchas PRIMAL FEAR sabes que vas a escuchar Heavy Metal gritón con la voz de Ralf Shceepers  por encima de todo lo demás. Y esa es la gracia, imagino. Ver las dos vertientes de un músico, aunque sea dentro de un mismo cuadro estilístico sirve para observar con qué frescura soporta el paso de los años. Y Mat hace un buen trabajo, no hay duda.

“Mask Of Sanity” se compone de doce canciones, incluyendo un bonus-track que, de manera poco sorprendente, es una versión del “Baby Please Don’t Go” de THIN LIZZY, la banda favorita de Mat.  Hay material para todos los públicos, incluyendo canciones de riffs muy melódicos como “Diary Of Evil” (donde ha colaborado el siempre infravalorado Roy Z) y trallazos que arrasan con todo como “Under The Gun”. Lo que no termino de entender es de donde saca la inspiración éste tipo para tirar adelante dos bandas en toda regla que le exigen un compromiso compositivo total y absoluto. Mat puede decir orgulloso que  sus últimos discos con PRIMAL FEAR y con SINNER son de lo más inspirado de su carrera, porque lo son.

En el plano instrumental destaca la incorporación del “viejo conocido” Klaus Sperling a la batería. Klaus, que ya había tocado con PRIMAL FEAR años ha hace un trabajo fabuloso tras los parches, como cabía esperar. Lo único que no destaca todo lo debido es el trabajo de los teclados. Solo en el mencionado “Under The Gun” y en algun tema más tiene algo de espacio el pobre de Frank Rössler. Pero es suficiente, evitando diluir el sonido potente de SINNER en interminables y ñoños colchones de teclados. A fin de cuentas Mat sabe un rato largo de Heavy Metal ¿no creen?