Love, Lust, Faith and Dreams

Me encantaban THIRTY SECONDS TO MARS. Los descubrí por casualidad con el primer disco, que apuntaba maneras, y el segundo me tuvo enganchado una buena temporada. Años después, ‘This Is War’ me pilló tan descolocado que sencillamente dejé de escuchar al grupo; entre un trabajo tan prescindible y las malas críticas de sus shows (además de la duración, más cercano al karaoke del público que un concierto al uso), perdí el interés. El hecho de escuchar el single de adelanto de ‘Love Lust Faith + Dreams’ hizo que al menos se despertara en mí el interés de ver de qué eran capaces. De poco.

La intro ‘Birth’, además de marcar el comienzo con ‘Love’, recuerda bastante a la de su antecesor, ‘Escape’, con aires de banda sonora de una película que promete, que transmite buenas sensanciones, con la voz susurrante de su líder apareciendo lo justo y necesario, y desembocando en ‘Conquistador’, donde se aprecia que siguen con sus arreglos electrónicos y sintetizadores, en una especie de mezcla entre MUSE y el Manson de ‘Personal Jesus’. No es lo único recurrente, ya que los coros de fans que ya pudimos escuchar en ‘This Is War’ aquí vuelven a aparecer, como demostró el single de adelanto ‘Up in the Air’, bajo una batería electrónica en forma de base machacona y repetitiva. Para cierto tipo de público, un acierto de adelanto; para otro sector, en absoluto.

Antes nombraba al grupo de Matt Bellamy, y coincidencia o no, el gusto que han cogido con la electrónica es una constante. ‘The Race’ es otro ejemplo (de nuevo con los coros), pero para ilustrarlo negativamente: cansan. ‘City Of Angels’ y el medio tiempo emotivo ‘End Of All Days’ tienen partes salvables, igual que la instrumental ‘Pyres Of Varanasi’, donde retoman los tintes de banda sonora, que bien podría haber sido un descarte de la de ‘Inception’. Tras el interludio, más coros en una plana ‘Bright Lights’ en ‘Do Or Die’. Antes decía que sus conciertos eran parecido a un karaoke, y parece que se han centrado en esa faceta de cara al futuro. Viendo el streaming que se retransmitió de su pasada actuación en el Rock am Ring, parece que esa va a ser la tónica general: mucho coro, mucho karaoke, mucha pérdida de tiempo con intros e interludios varios, mucha presencia de partes grabadas… En definitiva, mucho relleno. Además, parece que quieran copiar visualmente la que montan MUSE en los últimos años y no se acercan. El caso es que con la legión de fans tan acérrima que tienen, no necesitan mucho para que se les alabe y defienda de cualquier crítica, sea constructiva o no.

‘Convergence’ sobra (aquí encaran la última parte, ‘Dreams’), y curiosamente, para el final se deja el tema más interesante, ‘Northern Lights’, que sin ser una maravilla, al menos no deja mal sabor de boca para encarar la outro, ‘Depuis Le Debut’. Habrá a quién le guste, pero la carrera musical de Jared Leto hace años estaba bien diferenciada de la cinematográfica. Ahora van de la mano, y en muchas ocasiones da la sensación de que parece que importe más la imagen del grupo y sus vídeos, que parecen más cortos de cine que clips. No hace falta hacerlos de diez minutos para canciones que duran la mitad, por bonitos y vistosos que queden. No se le daría mal hacer música para sus propias películas, visto lo visto.

Post Views: 721