Insomnius Dei: Illusions Of Silence

He de reconocer que con la primera escucha de INSOMNIUS DEI me quedé algo frío. Y no sólo por la propia música, sino quizá por el excesivo aluvión de lanzamientos de Doom que vengo escuchando en las últimas semanas. Además, se trataba de la nueva propuesta de Mark Kelson, y quizá las referencias previas me dieron pie a esperar más de lo mismo, algo ligeramente distinto a THE ETERNAL pero que quizá no llegaría al nivel esperado de un músico tan prolífico. El último álbum de estos australianos, además, me había dejado bastante indiferente y las dudas sobre la salida de discos cual producción a gran escala de churros sembraron cierto recelo inicial ante este “Illusions Of Silence”.

Poco a podo perdí el miedo y bueno, la primera escucha no fue deslumbrante pero apuntaba maneras. “Vayamos a por la segunda” dije. La cosa mejoraba, y temas como “Seven Burning Eyes” comenzaron a sonar más y más ricos en matices, con una producción correcta pero no magistral que sin embargo no empañaba la buena orientación Doom / Death que destila el trabajo. Guitarras graves que podemos encontrar en el Thrash Metal, voces aguerridas y con gancho, partes también melódicas…la cosa mejoraba. Momento de la tercera escucha. Y fíjense, los detalles de solemnidad puramente Doom comenzaban a ganar puntos en “Illusions Of Silence”, un tema a medio camino entre los SWALLOW THE SUN más paisajísticos y unos ABLAZE IN HATRED realmente profundos. Quizá este sea el tema insignia de este álbum; no lo dejen pasar porque no tiene desperdicio. Nunca tan pocas notas dieron tan buenos resultados. Y para colmo, esa contraposición de voces – con tres líneas vocales distintas – quedaba “fetén”. Pónganse en situación. ¿Quién no ha fijado la vista en un papel que ha sufrido los efectos del tiempo y que se consume entre las llamas en una hoguera de invierno? Vamos a suponer que todo el mundo ha pasado por algo parecido. Pues este corte de más de 9 minutos refleja ese sentimiento de lo efímero, de algo condenado a desaparecer. Se que muchos no acaban de ver el arte en este aspecto, pero créanme que lo hay. Y los fans de género lo sabrán apreciar.

No es que tampoco esto fuera sorprendente. Mark Kelson es un tipo con una personalidad muy rebuscada. Puede llegar a ser el tío más afable del mundo – algunos recordamos sus sonrisas en un Doominations of Europe que registró una afluencia de 40 personas -, pero puede también ser un personaje introspectivo donde los haya. Amante confeso de toda expresión musical con fundamento, este músico también ha hecho pinitos en el diseño gráfico – recuerdo un cartel de una gira de DRACONIAN que nunca llegó a realizarse – y en el plano de la producción musical. Si a eso le añadimos su buen hacer, su capacidad de socialización con músicos y profesionales de la materia –algunos como Duncan Patterson han contado con él para llevar a cabo sus proyectos – y su intachable actitud a la hora de escribir música, llegamos a la conclusión de que este trabajo de INSOMNIUS DEI esconde muchas más cosas que las que se ven a primera vista.

Temas como “Terminal” suenan a auténtica gloria. Muy en una onda a medio camino entre los MY DYING BRIDE de hace unos años y unos OCTOBER TIDE o bandas más cercanas al Doom / Death. Aunque esto va a ratos. Y la tónica general no podemos decir que sea ésta a lo largo de los 60 minutos del álbum. Tan pronto encontramos un cambio que nos lleva a sonoridades más lentas y decadentes, como a partes más progresivas o a estribillos más Death. Y siempre teniendo en cuenta que miramos de reojo al Doom Metal más purista. Así que las influencias vienen desde distintos frentes.

Por lo demás, poco más que decir: doom, doom y más doom! Bien para empezar…