Sacrificium: Escaping The Estupor

A fuerza de observar el mundo con atención uno ya acaba acostumbrándose a
todo. Hay obreros de derechas, curas rockeros, catalanes del Real Madrid (y
madrileños del Barça), y ahora nos llega una banda de death metal cristiano,
que se llama SACRIFICIUM y viene del sur de Alemania, para más señas. Eso sí que
es originalidad y lo demás son tonterías, ¡dejémonos de ñoñerías a lo Stryper
y defendamos a Cristo usando sus mismas armas, con un par! 

En fin, con eso de que son cristianos habrá que hacer acto de fe (y nunca
mejor dicho) respecto a la biografía del grupo que publican en Rock Detector,
porque por lo demás esas raíces religiosas no se dejan ver para nada ni en
la música ni en la portada del disco. Y de las letras ni hablemos, porque ni
siquiera las tienen colgadas en su página web. Dejando ya aparte esta anécdota, “Escaping
the estupor” es el segundo CD de esta formación con 12 años a sus espaldas,
que empezaron haciendo thrash metal y luego se subieron al carro del death
melódico, en el que aún siguen.

A lo largo del disco se pueden ver diferentes matices y formas de entender
el estilo que practican, ya que recogen claras influencias de grupos conocidos.
La más inmediata es sin duda la de IN FLAMES, sobre todo por el sonido limpio
de las guitarras (aunque no exento de dureza) y la voz rasgada de Claudio A.
Enzler, que recuerda en ocasiones a la del Anders Fridén más moderno. Las voces
más rajadas se combinan también con las guturales y gorrinas de toda la vida,
que se reparten entre el cantante y uno de los guitarristas, haciendo así una
combinación bastante interesante y cañera.

Las canciones beben bastante del sonido melódico sueco, como ya se ha dicho,
pero estos alemanes le meten una caña adicional a las canciones, más doble
bombo, más velocidad y en definitiva más mala hostia. Dependiendo de la canción
que estés escuchando, el combo te puede recordar más a DARK TRANQUILLITY (“Canvas”),
OBITUARY (“Extinction Of Mankind “), o CANNIBAL CORPSE (“Nothing From you”).
Innovadores, lo que se dice innovadores no es que sean, pero tienen bastante
potencia y la producción es lo suficientemente buena como para poder darle
una escucha a gusto. Si lo que buscas es un death metal de la vieja escuela,
sucio y garajero, este grupo no te lo va a dar. Otra cosa es cómo suenen en
directo, que seguro que son igual de borricos que cualquier otra banda de death.

Se puede decir que es un grupo más dentro de la poblada escena extrema, pero
no resultan desagradables. Al menos sirven para desintoxicarte un poco entre
disco y disco de MORBID ANGEL y sacar afuera tus demonios por un ratejo. Sus
principales bazas son sus acordes thrash combinados  con melodías típicas del
death, todo ello aderezado con una batería muy veloz y unos gruñidos como mandan
los cánones.

Un último apunte. En las filas de esta banda hay una chica tocando la guitarra,
Ulrike Uhlmann. ¿Quién dijo que a las mujeres no les iba el death metal? A
mí me parece sensacional, uno empieza a estar un poco harto de ver que las
chicas sólo pueden triunfar en el heavy metal como front-women o sex symbols.
Jóvenes death metaleros del mundo, me consta que muchos de vosotros tenéis
que entrar sufriendo a las discotecas para intentar ligar, pero no todo está perdido,
aún os queda alguna esperanza.