Nebulosa: Entre Los Sueños Y La Realidad

Desde tierras valencianas nos llega esta prometedora grabación titulada “Entre
los sueños y realidad” en la cual, el buen gusto por el power metal de corte
más clasicista toma sentido a lo largo de 9 pistas, casi todas ellas, aprovechables
para un primer disco con todas las de la ley.

NEBULOSA, el proyecto musical liderado por el guitarrista Javier Peregrín,
logra esquivar la infinidad de problemas que persiguieron la grabación de la
demo, incluso sin hacer notoria la lastimosa y larga enfermedad que persigue
a la vocalista Marga, haciendo hincapié en que con un presupuesto decente, este
“Entre los sueños y la realidad” podría haber sido un anticipo todavía mucho
más atrayente a lo que, espero, venga después.

“Quiero ver amanecer” es el primer título de la grabación en el que el oyente
se percata de las características que rodean las composiciones de Javier, aunque
sea evidente que el sonido es muy mejorable. Si bien la responsabilidad melódica
del tema recae en exclusividad en la voz de Marga, las partes instrumentales
consiguen denotar una intención de elegancia a medio camino entre el power metal
de tintes stratovarianos y toques progresivos propios de los grandes nombres
de la guitarra. 

Otra introducción, esta vez narrada por Dilara Akhoundova, precede a la mejor
pista del disco, quizás al tratamiento melódico más conseguido, “Yugoslavia
(la visión)”. El tema en cuestión, dotado de una letra muy notable dedicada
al desapercibido genocidio de hace tan sólo 10 años en una tierra tan cercana
en la cual no hay petróleo, es, sin duda, el más atractivo, el más pegadizo
y quizás, el más vendible de todos los incluidos en la demo. A partir de aquí,
NEBULOSA profundiza en el buen hacer instrumental de la guitarra de Javier Peregrín,
haciendo que sea un tanto difícil escapar a la cita de grandes maestros de las
seis cuerdas como Steva Vai y, sobretodo, Yngwie Malmsteen los cuales, sin lugar
a dudas, son la gran influencia del músico valenciano. De todas ellas, destacaría
el fantástico y natural toque al más puro estilo Yngwie del tema “Últimas notas
antes del crepúsculo”, una canción, en la que, aparte de una buena dosis de
virtuosismo, concede, junto a la siguiente “La puerta del tiempo” una ración
considerable de escapismo intelectual en forma de música.

Quizás el disco proponga demasiado protagonismo de unos teclados un tanto ridículos
en muchas ocasiones y las guitarras lleguen a sonar muy bajas en las partes
no instrumentales, pero, en definitiva, “Entre los sueños y la realidad” contiene
unos buenos ingredientes que esperemos que den forma, algún día, a un merecido
disco de debut.