Daylight Dies: Dismantling Devotion

Desgraciadamente DAYLIGHT DIES es una de esas bandas que atesorando una inmensa
calidad, no consigue una respuesta proporcional al esfuerzo y dedicación invertida
es sus trabajos. Tanto es así, que su reconocimiento sólo les permite sacar
disco periódicamente y girar en contadas ocasiones con gran esfuerzo y con un
mínimo de medios. Pero es que hablamos de un género como el Doom Metal, que
no goza de un soporte mayoritario. Si bien hay una escena creada y sostenida
por los cuatro valuartes de siempre, son muchos los músicos que gustan de este
estilo y que imprimen sus ganas y tiempo en formar bandas con un buen nivel
musical y con grandes inquietudes artísticas.

Los americanos DAYLIGHT DIES son una de esas formaciones. Y si bien tienen
su base de operaciones al otro lado del Atlántico, es en Europa donde la banda
se suele prodigar más y donde intenta focalizar sus contadas salidas de directo,
además de, por ejemplo, completar el proceso de mezcla de este último disco.
No en vano, la escuela de estos chicos reside en gran parte de las ciudades
centro y norte europeas, cuna de grupos como KATATONIA, OCTOBER TIDE o bandas
de la última década como RAPTURE o SLUMBER. No quiere decir esto que no haya
ejemplos musicales influyentes en DAYLIGHT DIES en el continente yankee. Sin
ir más lejos encontramos a NOVEMBERS DOOM, banda de inquietudes constantes y
de una inequívoca calidad. Pero es bien sabido que por aquellas tierras venden
otro tipo de cosas alejadas de lo que es el metal más europeo.

La tónica en este “Dismantling Devotion” es la misma que la empleada en “No
Reply”, cuando la banda todavía se encontraba en las filas de Relapse. El cambio
a Candlelight no ha supuesto, por tanto, un gran giro en la trayectoria de DAYLIGHT
DIES; si bien es cierto que supone una apertura de miras a un campo más amplio
que va más allá de lo puramente extremo. Lo que si que es palpable es el marcado
toque progresivo que invade muchas canciones. Por supuesto las voces profundas
y guturales están presentes en todo momento. Pero en esta ocasión, hay sitio
para un mayor número de artificios. Algo que nos podría llevar a sacar conclusiones
algo difusas, como la típica comparación con los últimos OPETH o ir más allá
incluso y hablar de similitudes con los indefinibles hoy por hoy ANATHEMA. Hay
un poco de todo esto, pero en pequeñas dosis. Volvamos a la idea inicial, que
es la que sustenta este disco y este proyecto: Doom metal melódico, con partes
guturales más Death y oscuridad  y halo melancólico a raudales.

La estructura de los temas tampoco deja lugar a dudas. Y nunca he visto tanta
linealidad a la hora de medir la duración de las canciones. Salvo dos excepciones,
el resto oscila entre un pequeño intervalo de tiempo. Detalles sin importancia,
pero curioso por otra parte. Y que da pie a lo que quizá pueda achacarse a este
tipo de bandas: la repetición de esquemas. Sin otros géneros ya es difícil no
repetirse, en este caso, lo es aún más. Salen creo que airosos, por otra parte.

La apertura de “A life Less Live” es una especie de híbrido entre ANATHEMA
de épocas pasadas, instrumentales y emotivos, y nuevas bandas más potentes y
rabiosas. Uno de los mejores temas del álbum, por otro lado.

Un gran recurso empleado por Ellis y los suyos es la inclusión de guitarras
acústicas en partes puntuales. “Dead Air” consta de este recurso y añade además
un sonido muy similar al de SWALLOW THE SUN en su aclamado “Ghost Of Loss”.

Llagamos a otro de los temas más atractivos del álbum: “A Dream Resigned”.
Junto con el tema que da título al álbum completarían el top 3 de mejores cortes
de este trabajo, añadiendo el tema inicial.

“All we Had” y “Solitary Refinement” ponen la nota más pausada y oscura, con
un matiz muy a lo MY DYING BRIDE que parece querer transmitir un dolor incontrolable.

Y la verdad es que poco más se puede decir de estos chicos de Carolina del
Norte. Si cabe alabar el buen gusto de los miembros de la banda, que recomiendan
cosas del estilo de KHOMA, que sin duda será una de mis próximas investigaciones
a realizar. Buen disco que creo merece un sitio en cualquier estantería que
se precie.