Vision Divine: Destination Set to Nowhere

Muy buena obra de Vision Divine, demostrando que siguen teniendo mucho que decirnos y que mantienen toda la vitalidad e ideas.

Vuelven Vision Divine y en una forma envidiable; con Tower Torricini al bajo, con un gran Fabio Lione y con Olaf Thorsen como Mastermind en el que quizá sea su disco más ambicioso. En sus inicios eran una banda formada para explotar el filón del power itálico con Labyrinth (muchos de sus miembros estuvieron allí) y sobretodo de Rhapsody. Pero con el paso del tiempo la cosa decayó y el cambio de vocalista no jugó a su favor, a pesar de que Luppi es un gran cantante. Pero reconozco que su anterior “9 Degrees West of the Moon” no estaba nada mal, y con “Destination Set to Nowhere” confirman expectativas. Ahora que el power metal está algo apestado, está realmente bien que bandas como Vision Divine le den ese toque prog y sideral a su propuesta.

Tampoco hay enormes novedades, pero sí muy buenas canciones, grandes instrumentaciones y preciosos detalles. El primero es el poema narrado de Cecco Angiolieri que da paso a la vibrante “The Dream Maker”. Mucha guitarra, elementos progresivos, buen estribillo y con la voz inconfundible de Lione que emerge entre la tormenta de teclados de Alessio Lucatti. Los teclados campan a sus anchas en detrimento del bajo de Torricini, algo tapado. El trabajo con las melodías está realmente conseguido, así como los coros y la incombustible batería de Alessandro Bissa. Buen riff de teclados en “Beyond the Sun and Far Away”, más a medio tiempo. El trabajo es muy homogéneo pero no repetitivo, algo de lo que sí adolecían algunos de sus anteriores trabajos. Buenos detalles técnicos en la trabajada y sideral “The Ark”, con ese bonito interludio pausado a su mitad.

Uno de los cortes más logrados es sin duda “Mermaids from their Moons”, muy agresiva y en la que Lione deja patentes sus dotes. Ha mejorado muchísimo en directo respecto a sus inicios, pero también en estudio. El tema posee uno de los estribillos del álbum, y el solo es puro virtuosismo, siempre acompañado por grandes detalles de bajo y batería. Destacar que el pobre Puleri queda algo tapado por la guitarra del “jefe”, pero el chico no se queda corto… En “Lighthouse” el grupo vuelve a los terrenos power metal con los que les vimos nacer. Más directos, muy contundentes, veloces y con la melodía por bandera. “Message to Home” muestra su cara más baladera, y el medio tiempo “The House of the Angels” combina cumbres y valles. Gran final con “The Sin Is You”, la agresiva pero melódica “Here We Die” y el tema clave: “Destination Set to Nowhere”, que retoma la intro y la desarrolla dando nexo de unión. Acústicas, belleza y mucha clase.

Muy buena obra de Vision Divine, demostrando que siguen teniendo mucho que decirnos y que mantienen toda la vitalidad e ideas. Posiblemente poseen la mejor formación hasta la fecha y su sonido es bastante original muy a pesar de que se acerca algo a los olvidados Cydonia. La temática de surcar el espacio con una nave es algo ya visto en Iron Savior y en otras bandas, pero realmente han conseguido que las musas les visitaran. Grandes ejercicios instrumentales, mucha técnica, pero con el sabor con el que les vimos nacer. Sigue estando el power, los estribillos cabalgan y Lione es toda una garantía. Enhorabuena Mr. Olaf Thorsen.